tag:blogger.com,1999:blog-55447586545537087652024-03-08T12:33:35.036+01:00Reino de GranadaÓrgano del Círculo Tradicionalista General Carlos CalderónRodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.comBlogger319125tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-74118757029444244612023-02-10T12:07:00.005+01:002023-02-10T17:57:20.766+01:00D. Vicente Casanova y Marzol: de soldado carlista a Arzobispo de Granada y Cardenal<p>Gracias a un correligionario y amigo, hemos sido conocedores de una maravillosa anécdota. Resulta que nada más y nada menos que el Excmo. Sr. D. <b>Vicente Casanova y Marzol</b>, cardenal y arzobispo de Granada en la década de 1920, fue uno de los voluntarios de Carlos VII en la tercera guerra carlista. </p><p>Ahora entendemos mejor que <i>El Siglo Futuro</i>, el diario que fuese ariete de la España católica durante más de medio siglo, contara a este príncipe de la Iglesia entre <a href="https://hemerotecadigital.bne.es/hd/viewer?oid=0000412609&page=5" target="_blank">sus más estrechos amigos y colaboradores</a>...</p><p>Curiosamente, la anécdota proviene de un liberal, el granadino (de Albuñol) Natalio Rivas Santiago. Aunque quizá no deba sorprender tanto si se tiene en cuenta que Rivas era amigo de Juan Vázquez de Mella y —según dijo él mismo— le unía a los carlistas «la fe religiosa y el amor a España». He aquí el relato.</p><p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEimEScP2eODGoSol89aYk4ScbYzf58jfOCRDmhkne2PlI2HxdQhw-hwO27uyBY1iRlkkA83ixO0GfaAHr5OVzsq5cNNNSRqe9wnzA13YEwsuHz_F-bPAh50r3gOiHylxVKCAkw-kudreeoS2GLODjoNsV9E6hCL7Znc3OS_RqUTyEwd0tiiUDual9ZX" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img alt="" data-original-height="515" data-original-width="430" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEimEScP2eODGoSol89aYk4ScbYzf58jfOCRDmhkne2PlI2HxdQhw-hwO27uyBY1iRlkkA83ixO0GfaAHr5OVzsq5cNNNSRqe9wnzA13YEwsuHz_F-bPAh50r3gOiHylxVKCAkw-kudreeoS2GLODjoNsV9E6hCL7Znc3OS_RqUTyEwd0tiiUDual9ZX" width="200" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Vicente Casanova y Marzol (1854-1930),<br />Arzobispo de Granada y Cardenal.</td></tr></tbody></table><br /><p><b>De soldado, a Cardenal</b></p><p>Hace muchos años —debió de ser hacia 1904, si la memoria no me es infiel—, en tiempos que me reunía yo a diario, en íntima relación, con el insigne e inolvidable Vázquez Mella, conocí en su casa de la calle de Valverde, 21, a un antiguo capitán carlista, llamado Fernando Galetti, que en la última guerra civil mandó un escuadrón de Caballería de voluntarios de Aragón. </p><p>Su porte distinguido, su aire caballeresco, su sincera honradez y, sobre todo, su singular consecuencia, conquistaron mi simpatía desde el primer momento. Era un ejemplar humano, troquelado en el más puro y auténtico cuño del viejo tradicionalismo español, y representación genuina de los que yo, que nunca fui carlista, he nombrado siempre "caballeros del ideal". Nació tradicionalista y lo fue, sin desmayos ni dudas, hasta su muerte. </p><p>En plena juventud abandonó su casa y se alistó bajo la bandera tradicional —que había de ser su sudario—, al comenzar la última contienda civil en 1872. Terminada la lucha en 1876, cesó como capitán de Caballería en las huestes de Carlos VII, y cuando, desde Cabrera abajo, fueron muchos los combatientes que reconocieron la restauración de la Monarquía, en la persona de Alfonso XII, él pasó la frontera, en compañía de los que no quisieron aceptar el nuevo régimen político. </p><p>De un lado tenía francas las puertas de un porvenir asegurado y próspero, que le brindaba el tranquilo bienestar y el ascenso a las más elevadas jerarquías castrenses; y de otro, la emigración con todas sus amarguras, privaciones e incertidumbres y la cerrazón del horizonte, que sólo mostraba sombras. Y optó, valiente y decidido, por la peregrinación a través de un desierto sin oasis posible, cuyo fin no alcanzaba a ver, dispuesto a sacrificarse por un ideal cuya tierra de promisión contemplaba tan lejana, que estaba persuadido de que en su vida probable, por mucho que Dios la prolongara, no alcanzaría a disfrutarla.</p><p>En el extranjero, primero en Francia y después en Bélgica trabajó, con tenacísima voluntad, en negocios mercantiles, logrando adquirir medios decorosos de mantenimiento, que le permitieron normalizar su existencia. Contrajo matrimonio con una dama belga, constituyendo un hogar cristiano y honrado, a cuya sombra creó una familia, educada en el ejemplo de sus padres, que fue modelo de laboriosidad y honradez. </p><p>Pasaron los años; crecieron sus hijos, que a su vez formaron nuevos hogares enlazándose con personas del país, y cuando ya los veía ventajosamente acomodados, y pensaba terminar sus días en apacible tranquilidad, falleció su esposa, dejándole en inconsolable aislamiento. </p><p>Hacía largo tiempo que la frontera española estaba abierta, en virtud de amnistía, para los emigrados carlistas, y buscando el calor de la patria como lenitivo a la triste soledad en que le sumiera su desgracia, Galetti regresó a España y se aposentó en Huécija, pueblo de la provincia de Almería, donde había nacido, y se dedicó a cuidar del modesto patrimonio heredado de sus padres, que durante su dilatado exilio había confiado a manos mercenarias. </p><p>Siempre que lo permitían las labores de su hacienda, pasaba temporadas en Madrid y diariamente concurría a casa de Vázquez Mella, al que tributaba verdadera adoración. De aquellas amenas reuniones, acaso sea yo el único superviviente. El padre Bocos, párroco de San Pedro; el inteligentísimo canónigo de Lérida mosén Antonio Salas; Alvaro Maldonado, y tantos otros que borró la muerte, formábamos la tertulia del elecuentísimo tribuno, Allí, como he dicho, tuve la fortuna de conocer a Fernando Galetti.</p><p>Poco tuvimos que tratarnos para contraer una sincera y leal amistad. Yo liberal y él tradicionalista, nos entendíamos perfectamente. Nos ligaba la fe religiosa y el amor a España, que son los vínculos más fuertes que pueden enlazar a dos personas. Contaba él más de cincuenta años de edad; yo no llegaba a los cuarenta, y, sin embargo, nuestra fraternidad era absoluta.</p><p>Me producía admiración que aquel hombre, que veía con frecuencia a antiguos compañeros suyos, que por haber acatado el nuevo régimen lucían los entorchados de general, no albergara en su espíritu el más remoto arrepentimiento de su firme y consecuente conducta. Creía, como un iluminado, en el futuro triunfo de la causa tradicionalista, y aunque estaba convencido de que él no gozaría de los beneficios de la victoria, porque la veía muy lejana, su alma alentaba, consolada con saber que llegaría la realización del sueño que fue objetivo de toda su vida. </p><p>Transcurrieron algunos años, durante los cuales nuestra amistad no se eclipsó ni un solo instante, y por razones que no importa consignar, tenía yo que pasar frecuentes temporadas en Almería. Tan pronto como se enteraba de mi estancia en la ciudad mediterránea, abandonaba su tranquila residencia rural y me acompañaba varios días. Ya estaba viejo; rebasaba los setenta años y presentía que su muerte estaba próxima. Pero la esperaba con la resignación del justo. </p><p>Era, a la sazón, Cardenal Arzobispo de Granada don Vicente Casanova, respetable y virtuoso prelado, que disfrutaba de grandes y merecidos respetos. </p><p>En una de nuestras íntimas charlas, me dijo éstas o parecidas palabras: </p><p></p><blockquote>«El actual Arzobispo de Granada es un íntimo y fraternal amigo mío. Quiero confiarle, con la debida reserva, que, hasta que terminó la guerra civil, fue uno de los tenientes del escuadrón que yo mandaba. Cuando se incorporó a nuestro Ejército era un joven de dieciocho años, y combatió durante toda la contienda con admirable heroísmo. Concluida que fué, yo marché al extranjero y él se acogió a la amnistía, pero no para aprovechar los beneficios que otros lograron, sino para abrazar la carrera eclesiástica, en la cual, usted ve, sus virtudes y su talento le han elevado a la más alta dignidad. Sospecho que el tiempo, que todo lo desgasta, ha borrado ese episodio de su vida, y que en tierras andaluzas es posible que no haya nadie que le conozca. El Cardenal, seguramente creerá que yo he muerto. He pensado varias veces visitarle, porque le quiero mucho, pero temo, si le veo, que él crea que por darme tono vaya a divulgar que fue un guerrillero; y aunque ello no menoscabaría su decoro, quiero evitarle esa contrariedad. ¿Le parece a usted que hago bien?» </blockquote><blockquote>«No —le contesté—; no debe usted abrigar ese temor. Al Cardenal le sobra talento para comprender que en nada puede empañar su buena fama el que, siendo seglar, luchara con las armas en favor de la causa tradicionalista; pero si conociendo la maldad humana, temiera que injustamente le censurasen por ello, él le conoce a usted y sabe que la caballerosidad de que siempre ha dado usted muestra, corre parejas con la discreción a que está obligado.» </blockquote><p></p><p>El ascendiente moral que yo ejercía sobre él; la lógica que apoyaba mis razonamientos, y yo creo que más que nada el ansia que le acuciaba de abrazar a su antiguo compañero, le decidió a emprender el viaje a Granada. </p><p>Cuando regresó de su excursión fue a verme, para referirme la entrevista. Su semblante reflejaba alegría y contento. </p><p>«Llegué —me dijo— al Palacio Arzobispal, sintiendo algún temor. Rogué al familiar que estaba de guardia que entregara a Su Eminencia mi tarjeta, y a los pocos momentos fui recibido. No puedo negarle a usted, que la más profunda emoción conturbaba mi ánimo, pero ésta se tornó en agradabilísima sorpresa, cuando contemplé al venerable Príncipe de la Iglesia de pie en el centro del despacho, en actitud respetuosa, que, llevando su mano a la sien, me saludaba militarmente, añadiendo: «A la orden, mi capitán.» Nos abrazamos derramando lágrimas. «¡ Fernando!» «¡Vicente!», fueron nuestras primeras palabras. La conversación fue larguísima y cordial, rayana en la ternura. </p><p></p><blockquote>«Gracias a Dios —me decía— que ha tenido la misericordia de conservarnos. Yo te creía muerto, y en esa suposición he rogado mucho por tu alma. Cuéntame tu vida. Yo también te relataré la mía.» </blockquote><p></p><p>Y ambos referimos nuestras andanzas, satisfechos de haber cumplido con los deberes que Dios nos impuso. Quedamos en que repetiría mi visita y, al despedirnos, le manifesté que no revelaría a nadie lo sucedido en tiempos pasados, salvo a un íntimo amigo —pensaba en usted, aunque no menté su nombre—, en cuya reserva confiaba. </p><p></p><blockquote>«Te conozco bien, me respondió, y no lo habrás dudado cuando has visto que no te ha recibido el Cardenal, sino el compañero que compartió contigo y a tus órdenes todas las glorias y reveses de la campaña.» </blockquote><p></p><p>Yo a nadie hice partícipe de aquella confianza. Después de fallecido el Cardenal, que me honró con su amistad, y con el que jamás me di por enterado, lo conté a algunas personas, y hoy por primera vez lo hago público, porque relatarlo honra la memoria de aquellos dos hombres ejemplares.</p><p><br /></p><p>Fuente: <b>Rivas Santiago, Natalio (1943). <i>Anécdotas y narraciones de antaño</i>. Editorial Juventud. págs. 111-115</b>.</p>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-57817251894802744592023-01-13T01:24:00.001+01:002023-01-13T01:24:17.502+01:00Nuestra declaración sobre Montejurra 76 y S.A.R. Don Sixto Enrique de Borbón<p><b>Declaración del Círculo Tradicionalista de Granada sobre Montejurra 76</b></p><p><iframe allow="autoplay" height="480" src="https://drive.google.com/file/d/1zeVMlGbrClIBcfWIf_YaV80N8phIwe1q/preview" width="640"></iframe></p><p style="text-align: center;"><b><a href="https://drive.google.com/file/d/1zeVMlGbrClIBcfWIf_YaV80N8phIwe1q/view?usp=sharing" target="_blank"><span style="font-size: large;">Descargar documento</span></a></b></p>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-55330378541353227242023-01-04T07:35:00.002+01:002023-01-04T18:15:09.613+01:00El periódico carlista La Esperanza, visto por un liberal-demócrata sincero en 1857<p>En su «revista de la prensa política española» (1857), el periodista granadino José de Castro y Serrano, no podía dejar de hablar de <i><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/La_Esperanza_(1844-1874)" target="_blank">La Esperanza</a></i>, el primer diario político carlista que existió (con la salvedad de las gacetas de guerra), que por aquel entonces era uno de los más populares y leídos de toda España. </p><p>Sorprende en su descripción la ristra de elogios que dedicó a este periódico, punta de lanza del carlismo, en la revista liberal <i>La América</i>, de tendencia democrática (como se conocía por entonces al ala más izquierda del partido progresista). Y es que el genio del director de <i>La Esperanza</i>, don <a href="https://reinodegranada.blogspot.com/2015/12/cl-aniversario-de-d-pedro-de-la-hoz.html" target="_blank">Pedro de la Hoz</a>, obligaba a todo el que leía sus artículos de primera plana a inclinarse ante su sabiduría, ilustración, sensatez y patriotismo, cualesquiera que fuesen sus ideas. Castro y Serrano decía así:</p><p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right; margin-left: 1em; text-align: right;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhtHzyx7LzSM0EjykydmeCGznQkLeqIKL4HZY0HMXxos-9jcODSOgPo2IgGumeqp6yQZSN2cmY_nJokoJtFRvtoQICPoBit1-wdLl2eVDs4SGC9twqKdodj2ymSy2r67oeV_J-GIOVdnYK-k6U6JkihJ_bYAi8hCyOgOyotDcpDDXNWyRoAe-eeO3Mf" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img alt="" data-original-height="565" data-original-width="424" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhtHzyx7LzSM0EjykydmeCGznQkLeqIKL4HZY0HMXxos-9jcODSOgPo2IgGumeqp6yQZSN2cmY_nJokoJtFRvtoQICPoBit1-wdLl2eVDs4SGC9twqKdodj2ymSy2r67oeV_J-GIOVdnYK-k6U6JkihJ_bYAi8hCyOgOyotDcpDDXNWyRoAe-eeO3Mf" width="180" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Pedro de la Hoz <br />(1800-1865)</td></tr></tbody></table><br /><p></p><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><p><i>La Esperanza</i> (...) ha sido y es en España mas que un diario; ha sido el núcleo y es la organizacion misma del partido monárquico puro; ha sido el catecismo y hoy es el código del mando absolutista. Sin <i>La Esperanza</i> no habria hoy entre nosotros mas que partido <i>despótico</i>, y sabida es la pobre significacion que en nuestros jóvenes oídos tiene ya esa palabra: con <i>La Esperanza</i> hay hoy en España verdadero y temible partido absolutista. Tambien este prodigio es obra de un solo hombre: tales serán su constancia y su talento. </p><p>Un dia, cuando vencidos los carlistas en el campo de Vergara por la política y por las armas; cuando vencedor el bando liberal por la idea y por los hechos con la aquiescencia implícita de los gobiernos despóticos de Europa, se veia desfallecer al partido absolutista aplanado con tantas catástrofes, ese dia, decimos, apareció <i>La Esperanza</i> en el campo del periodismo español, para infundir con su solo nombre aliento entre las huestes dispersas, y para tomar de la tienda de sus propios enemigos, armas con que batirles y disputarles su victoria. </p><p>El título y la ocasion elegida por el hombre no podian ser mas oportunos; y en efecto, desde ese día data la voz propagandista que sin perdonar momento, ni perder coyuntura por exigua que pareciese, resuena en los oidos del bando monárquico, anunciándoles para mañana la hora del triunfo; desde ese dia data la acusación perpetua que se ha lanzado sobre el partido liberal sin hacer otra cosa que poner de relieve la parte viciosa у absurda de su sistema; desde ese dia ha tenido el pais un catecismo abierto que á la vez que enseñaba la doctrina del sistema antiguo, modificaba y suavizaba ese mismo sistema á tenor de los adelantos civilizadores del siglo; desde ese dia, por último, se ha tenido públicamente entre nosotros una cátedra de despotismo ilustrado. Y ese si que producia un daño verdadero á las ideas liberales, que no los periódicos estúpidos cuya tarea estaba circunscrita á lamentarse de la abolicion del santo tribunal; pues esos periódicos solo corrian en manos de quienes se contentaban con ver escrito lo que ya habian pensado y lo que no habian querido dejar de pensar; pero papeles como <i>La Esperanza</i>, que comprenden y aceptan los adelantos de la civilización, que prometen equidad y justicia, orden y sosiego, desahogo y vida en contraposicion á las convulsiones necesarias de toda reinstalación social, esos periódicos son los que encarnan la fé, los que mantienen la esperanza y los que hacen prosélitos hasta entre los descontentadizos del ejército contrario. </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEh7huzRf3JCapnSceKl0X0UYRkYx7cFtGbgL6uP5Bh8GZj4PUIjJx04fT9bPqL3YpHX-Seqz2v9bZfLO9rDPwqsQ0QlWGu9uEl9uO2MVAtVdrzt6cVtoDfCcPZcTZXAZAfYo8hoDiHV6lnu78KAu1LlsM50hhHTWZC0BoBMDlYl6OfN7dr1PSZWr77k" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img alt="" data-original-height="1864" data-original-width="1326" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEh7huzRf3JCapnSceKl0X0UYRkYx7cFtGbgL6uP5Bh8GZj4PUIjJx04fT9bPqL3YpHX-Seqz2v9bZfLO9rDPwqsQ0QlWGu9uEl9uO2MVAtVdrzt6cVtoDfCcPZcTZXAZAfYo8hoDiHV6lnu78KAu1LlsM50hhHTWZC0BoBMDlYl6OfN7dr1PSZWr77k" width="171" /></a></div><p></p><p>Tal ha sido por espacio de diez y siete años la tarea constante del diario absolutista. Con gran lucidez de espresion, con envidiables dotes de ciencia y con formas tan intencionadas como decorosas, ha hecho partido de lo que era secta, ha hecho razón lo que era ignorancia, ha hecho posible lo que era quimérico y absurdo. Qué mas se le puede pedir á un hombre? ¿Qué mas se le puede pedir á un periódico? <i>La Esperanza</i> ha sido siempre y lo es en el dia un periódico valeroso; jamás ha dejado de contestar á nadie sea cualquiera el apuro en que se le haya puesto: ha sido y lo es hoy un periódico de inconcebible destreza; jamás ha tropezado en ninguno de los mil escollos que cada dia encontraba al paso. El mayor título de gloria que este diario puede esponer á la admiracion de su partido, es que vive aún, despues de haber atravesado solo y entre una turba de enemigos implacables, cerca de veinte años de revolucion contra sus ideas.</p><p><i>La Esperanza</i> ha estado fuera de la ley desde su aparicion; ha defendido lo que en España no se podia defender; ha sembrado lo que estaba prohibido sembrar; ha rehabilitado memorias que nuestras leyes tenian proscritas; y á pesar de todo, hoy es el dia en que con mayores brios esgrime sus armas, sin haber tenido que borrar por fuerza una sola línea de las infinitas que sobre asuntos peligrosos ha publicado. </p><p>No todos los hombres del partido absolutista aceptan, sin embargo, á <i>La Esperanza</i> por director y maestro, pues hay fanáticos ó necios que se figuran harto liberal y ocasionado á disgustos el sistema de gobierno que defiende; pero esos hombres que tan cándidamente creen posible y duradero el advenimiento de un orden de cosas mas oscuro todavia, debieran escuchar la voz de la gran masa de su partido que proclama al periódico como sustentador, organizador y fuerte áncora de su existencia. <i>La Esperanza</i> es el periódico español que se escribe con mas cuidado, y la empresa periodística mas importante de cuantas se han formado hasta ahora.</p></blockquote><p><br /></p><p>José de Castro y Serrano: <a href="https://hemerotecadigital.bne.es/hd/es/viewer?id=9ff23290-9794-49f5-9744-b35e86a403dd&page=9" target="_blank">La América (Madrid). 24/10/1857. Pág. 9</a></p>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-71419128688477557472022-10-17T00:19:00.014+02:002022-10-17T13:09:39.851+02:00«Nos, que valemos tanto como vos, y todos juntos más que vos...»: el invento de un calvinista francés<p>Todo el que se interesa por la historia antigua de España se habrá topado alguna vez con una curiosa frase, que se dice usaban los nobles aragoneses durante la ceremonia de coronación del Rey. Puede hallarse escrita en diferentes variaciones, una de las cuales es ésta: </p><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px;"><p style="text-align: left;">«<i>Nos, que valemos tanto como vos, y todos juntos más que vos, os facemos nuestro rey y señor, con tal que guardéis nuestros fueros y libertades; y si non, non</i>».</p></blockquote><p>Esta frase, inventada (como se verá) en el siglo XVI, pero popularizada en el XIX, transmitía la idea de que «fueros y libertades» eran lo sustancial de los reinos españoles medievales, mientras que el Rey (y, por ende, la monarquía), lo accidental. Según esta idea, la función del monarca vendría a ser meramente la de custodiar los derechos de sus súbditos, función que en el siglo XIX pasaría a ejercer la Constitución liberal, cobrando ésta un carácter poco menos que de sagrado. </p><p>En esta manera de entender la monarquía, al igual que en la «monarquía parlamentaria», el principio monárquico brilla por su ausencia. Si, como dice la <i>Ordenanza del Requeté</i>, el Rey es «verdadera autoridad y padre de los españoles», ¿acaso no quedaría la autoridad paterna por los suelos si varios de sus hijos osasen acercarse a él y espetarle: «todos juntos valemos más que tú»? Todo poder viene de Dios, dice San Pablo (Rom. XIII, 1); por eso, rechazar la autoridad, sea de un padre, de un maestro o de un gobernante, equivale a rechazar a Aquél que se la ha dado. <br /></p><p>En cuanto a la segunda parte de la frase, es cierto que los Reyes españoles debían jurar las leyes del Reino, y también lo es, como dijo la Princesa de Beira en su <a href="https://es.wikisource.org/wiki/Carta_a_los_espa%C3%B1oles_de_la_Princesa_de_Beira" target="_blank">carta a los españoles</a>, que «prescindiendo de Dios y de su ley, ningún hombre puede imponer deber ni obligación a otro hombre, ni aun una mayoría a una minoría; todo lo cual es la subversión de toda autoridad, de toda ley, de toda sociedad». De ahí que un monarca legítimo de origen, cuando pretende destruir la ley de Dios, pueda perder su legitimidad de ejercicio. No sucede esto por dejar de jurar ciertos fueros o libertades cuya conservación o modificación entren en el terreno de lo prudencial, si bien es siempre deseable mantener todo lo bueno y provechoso de la tradición. Como es evidente, una vez realizado un juramento, éste no se puede quebrantar (a menos que lo jurado atente contra la misma ley de Dios). </p><p>Pero veamos de dónde procede la susodicha frase apócrifa. Javier de Quinto en su <a href="https://books.google.es/books?id=vwxaAAAAcAAJ&printsec=frontcover&hl=es#v=onepage&q&f=false" target="_blank"><i>Del juramento político de los antiguos Reyes de Aragón</i></a>, contenido en la colección de discursos políticos sobre la legislación y la historia de este antiguo Reino (Madrid, 1848), trata con mucha erudición la cuestión de este supuesto juramento y atribuye, con fundados argumentos, la invención del mismo al francés François Hotman.</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiKzwfhmwg-iQroYcXQCZqFLyjrp5S3P8tQM5EAmMnXc43vsHzZ7uMjNuSZ-sFgCwHjpCMPufu2Ap0kdXut_uTNhwsYm1NSa9-QskOyIg7ZJkZy32_6zRXJqxRD-CL4BT-ALYuePV6Pi_aIyXEJmK-YI2SVomEIXUGuOp4AUYfY8w-Q1fE4OQ566t9g/s4000/Reino%20de%20Arag%C3%B3n.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="4000" data-original-width="3000" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiKzwfhmwg-iQroYcXQCZqFLyjrp5S3P8tQM5EAmMnXc43vsHzZ7uMjNuSZ-sFgCwHjpCMPufu2Ap0kdXut_uTNhwsYm1NSa9-QskOyIg7ZJkZy32_6zRXJqxRD-CL4BT-ALYuePV6Pi_aIyXEJmK-YI2SVomEIXUGuOp4AUYfY8w-Q1fE4OQ566t9g/s320/Reino%20de%20Arag%C3%B3n.jpg" width="240" /></a></div><br /><p>Hotman, llamado por algunos Francisco Otomano u Hotomano, fue un destacado jurisconsulto. Nació en París el 23 de agosto de 1524 y murió en Basilea el 12 de febrero de 1588. Afiliado a la secta de Calvino, publicó varias obras de Derecho, pero la que le dio más importancia fue la que tituló <i>Franco-Gallia</i>, cuya primera edición se publicó en Ginebra en 1573; después se hicieron otras hasta 1665, en Colonia, Middelburg, y Francfort. </p><p>Como explica De Quinto, el propósito de Hotman no era otro que desvirtuar en todo lo posible la autoridad real, con la que se hallaba enemistado, humillándola y constituyendo frente a ella otro poder al que atribuía la soberanía suprema, con lo cual presentaba a aquella más inferior, y por consiguiente más rebajada. Con este fin, hizo incursiones en la historia de otros pueblos, acomodando los hechos a sus deseos, o inventándolos de la manera que cuadraran mejor a sus intenciones, para deducir así las buscadas consecuencias. Puesto que en la historia de Francia no encontraba bastante fundamento para presentar a sus monarcas subordinados al poder supremo del país cuando intervenía en la solución de los más altos negocios del Estado, Hotman tuvo que apelar a otras historias extrañas, en las cuales, si no hallaba lo que satisfacía a su propósito, no tuvo escrúpulo en suponer o inventar lo que respondía a sus deseos. </p><p>Sin más fundamento, consigna a su manera que, entre las instituciones de todos los pueblos, ninguna puede citarse más insigne que cuando crean al Rey en las Juntas generales de Aragón. A fin de que quede consignado el hecho y perpetuada su memoria, pronuncian un razonamiento e introducen a un hombre a quien dan el título de Justicia de Aragón, al cual declaran por decreto de todo el pueblo superior al Rey y de más grande poderío. Y para poner de manifiesto el desprestigio del trono y de la autoridad real, que es el punto encubierto adonde se dirigen los intencionados tiros de Hotman, sostiene que al Monarca así elegido se le exigía el juramento bajo esta fórmula tan humillante: </p><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px;"><p style="text-align: left;">«NOS QUE VALENOS TANTO COME VOS, Y PODEMOS MAS QUE VOS, ELEGIMOS REY, CON ESTAS Y ESTAS CONDICIONES, INTRA VOS Y NOS UN QUE MANDA MAS QUE VOS.»</p></blockquote><p>Como se ve, Hotman ni siquiera se esforzó por hacer la redacción verosímil. En el romance aragonés de la época no se decía «come» (evidente galicismo) ni «elegimos» y el conjunto de la frase parece estar escrita por un extranjero. </p><p>De Quinto cuenta como fue Antonio Pérez (secretario de Felipe II, que malquistado y perseguido por el Rey prudente, emigró a Francia) quien reprodujo en sus <i>Relaciones</i> la fábula de Hotman, variando algunas palabras de la fórmula inventada, quedando ésta finalmente así: </p><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px;"><p style="text-align: left;">«NOS, QUE VALEMOS TANTO COMO VOS, OS FACEMOS NUESTRO REY Y SEÑOR CON TAL QUE NOS GUARDÉIS NUESTROS FUEROS Y LIBERTADES, Y SI NO, NO» </p></blockquote><p>Una escritura otorgada en 1075, conservada en el archivo del monasterio de San Victorián, nos saca de dudas. Contiene una Recopilación compuesta de tres partes: la primera los <i>Fueros de Sobrarbe</i>, que comprendía los que se sancionaron y acordaron cuando la conquista no había pasado del territorio de Sobrarbe; la segunda <i>Fuero Feyto</i>, que contenia los antiguos usos; y tercera <i>Fueros de Aragon</i>, que eran los promulgados cuando la misma conquista se extendió a otras tierras y el Reino tomó ya este nombre. La citada Recopilación se inicia en los siguientes términos: </p><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><p>«<i>Aqui comienza el libro de los primeros fueros que fueron fallados en spanya empues la perdicion que fue de los cristianos de spanya quando los moros en el tiempo del Rey Rodrigo et del conde D. Julian su sobrino conquirieron la tierra. </i></p><p><i>En el nombre de Jesu-Cristo qui es et sera nuestro salvamiento empezamos aqueste libro á perpetua memoria de los fueros de Sobrarve et ensalzamiento de la cristiandad computando del primer fuero que fue stablecido de los montanyeses en spanya quando moros conquirieron la tierra sobre era DCC vij anyos.....</i>»</p></blockquote><p>Sigue después el prólogo, y luego continúa con el </p><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><p>«<i>Título de Reyes et de huestes et de cosas que taynen á Reyes et á huestes.</i></p><p><i>Como deven levantar Rey en espayna et como les deve eyll jurar.</i></p><p><i>Et fue primerament establido por fuero en spayna del Rey alzar por siempre, et porque ningun Rey que iamas seria non lis podies ser malo, pues conceyllo, zo es pueblo, lo alzaban por Rey et li davan lo que ellos avian et ganavan de los moros, primero que lis juras antes que lo alzassen por Rey sobre la cruz é los Evangelios que les tovies adreyto et les meioras sienpre lures fueros et no les apeoras et que les desfficiés las fuerzas et que parta el bien de cada tierra con los honbres de la tierra convenibles á Ricos honbres à Cabaylleros á infanzones á honbres de villas et no con estranios de otra tierra. Et si por aventura abiniesse cossa que fuesse Rey ó ome de otra tierra ó de estranio logar ó de estranio lengoage que no les aduxisse en essa tierra mas de V ni en vayllia ni en servitio de Rey honbres estranios de otra tierra et que Rey ninguno no oviesse poder nunquas de facer cort sin conseyllo de los Ricos honbres naturales del Reyno et ni con otro Rey ó Reyna guerra et paz ni tregoa no faga ni otro granado fecho o embargamiento de Reyno sin conseyllo de Xij Ricos honbres ó Xij de los mas ancianos savios de la tierra. Et el Rey que aya su seyllo para sus mandas et moneda jurada en su vida et alferiz et seyna caudal et que se levante Rey en se dieylla de Roma ó de Arzobispo ó de Obispo et que sea areido la noche en su vigilia et oya su missa en la eglesia et offrezca porpora et de su moneda et dempues comulgue et al levantar suba sobre su escudo teniendo los Ricos honbres clamando todos tres veces Real, Real, Real, entonz espanda de su moneda sobre las qents ata C. solidos et por dar á entender que ningun otro Rey terrenal no aya poder sobre ellos cingesse eyll mismo con su espada que es asemblant de cruz et no deve otro cabayllero ser fecho en aquel dia. Et los Xij Ricos honbres o savios deben jurar al Rey sobre la cruz et los Evangelios de curiarle el cuerpo et la tierra et el pueblo, et los fueros aiudarli á mantener fielment et deven vesar su mano.</i>»</p></blockquote><p>Consta pues, el fuero de <i>alzar Rey,</i> y <i>como debe el Rey jurar</i>, guardando aquella conformidad, y establece la verdadera fórmula con que los Reyes debían jurar y ser jurados. Lejos de entrañar ésta humillación y desprestigio alguno para la corona, se la considera debidamente, con todo el esplendor que reclama tan augusta institución; y se le tributan homenajes de sumisión y respeto, al imponerse a los doce Ricos-omes o sabios, el deber de jurar la defensa de la persona del Monarca, su asistencia y ayuda, y al prescribirles que hubiesen de besarle la mano. El fuero<i> de alzar Rey</i> guarda mucha analogía con lo que sobre este punto se ordenaba por la legislación goda, como puede leerse en la ley 2.ª del Fuero Juzgo.</p><p>Consta también que los reyes de Aragón, como los del resto de la Península, se consideraban herederos del anterior Reino de España visigodo, del que derivaron después las regiones y no viceversa (como dijimos en nuestro anterior artículo <a href="https://reinodegranada.blogspot.com/2021/08/la-nacion-espanola-es-milenaria-pero.html" target="_blank">La nación española es milenaria, pero sus regiones no</a>).</p><p>Llama la atención que la frase inventada haya llegado hasta nuestros días, teniendo en cuenta que su falsedad fue demostrada hace casi dos siglos. Parece ser que a ciertas ideologías les ha interesado seguir propagándola. Con los medios de hoy resulta aún más fácil desmentirla.</p><p>En 1872 Carlos VII manifestó a los pueblos de la Corona de Aragón: «Hace un siglo y medio que mi ilustre abuelo Felipe V creyó deber borrar vuestros fueros del libro de las Franquicias de la Patria. (...) Yo os devuelvo vuestros fueros (...) y para hacerlo, como los años no transcurren en vano, os llamaré, y de común acuerdo podremos adaptarlos a las exigencias de nuestros tiempos». Como vemos, para el carlismo no son los fueros los que "ponen" y "quitan" Rey, sino el Rey quien "pone" o "quita" fueros, <i>adaptándolos a las exigencias de nuestros tiempos</i>.</p><p><br /></p><p>Fuentes:</p><p>* De Quinto y Cortés, Javier (1848): <a href="https://books.google.es/books?id=vwxaAAAAcAAJ&printsec=frontcover&hl=es#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Discursos políticos sobre la legislación y la historia del antiguo Reino de Aragón</a></p><p>* Martínez y Herrero, Bartolomé (1866): <a href="https://books.google.es/books?id=TvW5Yiw8B-wC&pg=PA78#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Sobrarbe y Aragón: estudios históricos sobre la fundación de estos reinos... Capítulo V: De la elección del primer Monarca</a>. págs. 78-96</p>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-48697424069964206352022-08-30T01:04:00.016+02:002022-08-30T19:16:56.308+02:00Tradicionalismo y fascismo (V) : Otros fascismos y epílogo<p> <a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghoQGcL_Oje_enxstYhs-Jt76QdCVaZyA1Ra_vjivOElnJN0RpdzpRZlBpiSeOYBU-bloKt4aGtDNfa18xBGOQQ1OMFpVRRNNA56Fjr7hISqL5jKYtRPDWSNHD_vAaq5nNcQaHY9yRQ2M/s1600/Tradicionalismo+y+fascismo.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghoQGcL_Oje_enxstYhs-Jt76QdCVaZyA1Ra_vjivOElnJN0RpdzpRZlBpiSeOYBU-bloKt4aGtDNfa18xBGOQQ1OMFpVRRNNA56Fjr7hISqL5jKYtRPDWSNHD_vAaq5nNcQaHY9yRQ2M/s320/Tradicionalismo+y+fascismo.png" width="283" /></a></p><p><a href="https://hemerotecadigital.bne.es/hd/es/viewer?id=bcd1e9fe-ccd9-4fb1-b254-8beb94cc4dd5&page=3" target="_blank">Folletón de EL SIGLO FUTURO</a></p><p>por José Luis Vázquez Dodero (noviembre-diciembre de 1934)</p><p><br /></p><p><b>OTROS FASCISMOS *</b></p><p>ESPAÑA. Falange Española de las J. O. N. S.</p><p>Este movimiento, acaudillado por José Antonio Primo de Rivera, reúne actualmente las fuerzas de Falange Española y las de las Juventudes de Ofensiva Nacional-Sindicalista, grupos distintos fundidos en la «F. E. de las J. O. N. S.» </p><p>El pensamiento de «Falange» está expresado en los «Puntos iniciales» (1) y en los discursos de su Jefe, sobre todo en el de 29 de octubre de 1933 y el de 4 de marzo de 1934. </p><p>«Falange» concibe España como «una unidad de destino» cuyos fines son: </p><p>«1.° La permanencia en su unidad. <br />2.º El resurgimiento de su vitalidad intensa. <br />3.º La participación, con voz preeminente, en las empresas espirituales del mundo.» (2) </p><p>Para alcanzar estos fines, España tropieza, según «Falange Española», con el obstáculo de una triple división: la de los separatismos regionales, la de los partidos políticos y la de la lucha de clases. </p><p>Para obviar la primera dificultad, «el sentido total de la Patria» exige «que todos los pueblos de España, por diversos que sean, se sientan armonizados en una irrevocable unidad de destino». Para suprunjr el segundo obstáculo es necesario «que desaparezcan los partidos políticos». «Nadie ha nacido nunca miembro de un partido político; en cambio, nacemos todos miembros de una familia; somos todos vecinos de un municipio; nos afanamos todos en el ejercicio de un trabajo.» (P. de Rivera.) </p><p>En fin, para acabar con la lucha de clases «el nuevo punto de vista considera a cuantos contribuyen a la producción como interesados en una misma gran empresa común». («Puntos iniciales»: 6.) </p><p>El Estado, no hay que decirlo, ha de ser un Estado totalitario. «Un Estado de «todos»: es decir, que no se mueva sino por la consideración de esa idea permanente de España; nunca por sumisión al interés de una clase ni de un partido.» («P. iniciales»: 4.) •</p><p>En lo espiritual, rechaza la interpretación materialista de la Historia y proclama que «toda reconstrucción de España ha de tener un sentido «católico». El nuevo Estado debe «inspirarse en el espíritu religioso católico tradicional en España, y concordará con la Iglesia las consideraciones y el amparo que le son debidos». («P. iniciales»: 8.) </p><p>¿Y la forma de gobierno? ¿Es republicano el movimiento de Falange Española? ¿Es monárquico, como el que acaudilla Mosley? </p><p>Este punto está eludido así en los discursos del Jefe como en los «Puntos iniciales»; lo está también en las principales manifestaciones del pensamiento falangista. </p><p>En el discurso de 29 de octubre de 1933, con el que hizo su aparición en política, José Antonio Primo de Rivera dijo: «Eso venimos a encontrar nosotros en el movimiento que empieza en este día: ese legítimo señor de España; pero un señor como el de San Francisco de Borja, un señor que no se nos muera. Y para que no se nos muera, ha de ser un señor que no sea al propio tiempo esclavo de un interés de grupo ni de un interés de clase.» </p><p>A juicio de Víctor Pradera, que ha comentado este discurso, «el <b>Tradicionalismo</b> tiene el «Señor que no se puede morir» en la única forma posible en política: en la forma de institución. Y así la adoptó, creando la Monarquía representativa hereditaria». (3) </p><p>En el pensamiento de «Falange» se percibe la huella de Mussolini: la literatura fascista por excelencia informa más que otra alguna los artículos y discursos de los «líderes». (4) </p><p><b>ALEMANIA. El Nacional-Socialismo racista. </b></p><p>El 23 de marzo de 1933 decía Hitler ante el Reichstag: «La disolución ataca todos los fundamentos del orden social. La completa contraposición de unos a otros en cuanto a los conceptos de Estado, Sociedad, Religión, Moral, Familia, Economía, abre diferencias que conducen a la guerra de todos contra todos. Partiendo del liberalismo del siglo pasado, este proceso encuentra naturalmente su término en el caos comunista.» </p><p>Estas palabras son exactamente las que en labios tradicionalistas significaron durante un siglo la repulsa hacia el régimen liberal y el continuo toque de alarma sobre las consecuencias que acarrearía. De aquí que el hitlerismo nacional-socialista coincida con <b>Tradicionalismo</b> y <b>Fascismo</b> en ser movimiento antiliberal. Quiere, como ellos, levantar sobre las ruinas del Estado liberal, el edificio de un Estado que dé por caducados para siempre los principios del liberalismo. Por eso el término «<b>Fascismo</b>» tiene un sentido genérico, por virtud del cual se aplica no sólo al fenómeno político italiano, de donde ha salido el nombre, sino a todos aquellos que van apareciendo en Europa para sofocar la división liberal y democrática y unir en un haz a todas las fuerzas dispuestas a salvar a la patria. </p><p>Anotada esta analogía fundamental, hay que hacer constar las particularidades privativas de cada uno de esos «fascismos». </p><p>La más sobresaliente del nacional-socialismo alemán es su «racismo». Su punto de vista, su fin, sus medios salen de este norte de la raza. </p><p>El antisemitismo racista no se funda, como el español en su día, en la universalidad del catolicismo, sino en una cuestión de raza. </p><p>«Hitler —ha escrito Eugenio Montes— pasa de la idea justa de que Alemania estaba corrompida, a la idea injusta de que esa corrupción es la obra del hebreo. Un resbalón más, y ya estamos en la tesis de que todo alemán es naturalmente bueno, siendo el judío quien, en la época de su poder, lo maleaba, lo convertía en malo.» (5) </p><p>«La sangre y la raza volverán a ser fuentes de la intuición artística.» (Hitler.) </p><p>La enemiga del Nacional-Socialismo a la raza judía es cosa de sangre aria incompartida. </p><p>La esterilización de los psicópatas, ya puesta en práctica, obedece a esta idea de la raza que da su ser al «racismo». La «raza» lo es todo. El movimiento nacional acaudillado por Hitler es «racista», y esta peculiaridad acentuadísima es lo que más le distingue de los otros «fascismos». </p><p>Por lo demás, «todo el Poder —dice el Führer en el discurso de 6 de julio de 1933— yace en manos del ejecutivo». </p><p>El nacionalismo racista ha manifestado la soberanía del Imperio. Cada Estado tiene al frente un gobernador, nombrado por el Presidente de la República a propuesta del Canciller. El gobernador representa y pone en práctica la política del Canciller. Nombra y depone a los jefes del Gobierno regional y a propuesta suya a los demás miembros del Gobierno. (6) </p><p>***</p><p>Acerca de la forma de gobierno, Hitler ha hecho las siguientes manifestaciones: «El gobierno nacional, ante el actual estado de cosas, considera la cuestión de la restauración monárquica como fuera de discusión. El intento de resolver este problema por sí mismo en algún Estado alemán sería considerado como un ataque a la unidad del Reich y se procedería en consecuencia». (Discurso ante el Reichstag, el 23 de marzo de 1933.) </p><p>«No se trata ahora de decidir sobre Alemania como Estado, del Imperio como forma de gobierno; no se decide sobre la monarquía, ni sobre el capitalismo ni el militarismo, sino sobre el ser o no ser de nuestro pueblo.» (En el Congreso del Frente del Trabajo alemán; Berlín, 10 de mayo de 1933.) (7)</p><p>«Protesto contra la tesis de que Alemania sólo puede ser feliz con sus dinastías hereditarias. Esta tesis, propalada intensamente en los últimos días, es falsa. Con toda estimación a los valores de la Monarquía y aquellos entre nuestros Emperadores y Reyes que han sido verdaderamente grandes a lo largo de nuestra historia, declaro que actualmente queda fuera de discusión el problema de la forma de Gobierno. Sea cual fuere la decisión que a este respecto adopte la nación algún día, sea cual fuere la resolución que den al problema el pueblo y sus conductores, una cosa habrá que tener presente: quien asuma la mas alta significación del Estado recibirá sus poderes del pueblo alemán, y sólo del pueblo alemán, dependiendo, por tanto, de él exclusivamente. Yo me siento tan sólo encargado por la nación de una misión que consiste en ejecutar aquellas reformas que luego puedan darle al pueblo la posibilidad de decidir, de un modo definitivo, la forma de Gobierno que adopte para el futuro, y su Constitución para más adelante.» (Discurso en el Reichstag el 30 de enero de 1934, primer aniversario de la subida al poder.) </p><p>El Jefe del Gobierno prusiano, Goering, ha disuelto todas las federaciones y organizaciones monárquicas y se ha preparado para impedir el resurgimiento de tendencias y movimientos análogos. «El nuevo Estado —ha dicho— desconoce el litigio de la forma de gobierno.» </p><p><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgRxdzZh9KgQxDypt-OMgSoCFVyWeouiHUDgdEtyhxaSHXJHh5cKX-pQVjjoX4J5kYw6HtRl_sOFPOF-2IIhBvAn20dV1Xj-hZCk1U1OqIbIBxYHn2RpSQzFvBNI2qPGRR9eZC5VaET4HApwfHKHLbLNeFpLXGFj4XEFg4O65miwwGht7QC2CMNCNQp/s2048/Engelbert%20Dollfuss.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1607" data-original-width="2048" height="251" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgRxdzZh9KgQxDypt-OMgSoCFVyWeouiHUDgdEtyhxaSHXJHh5cKX-pQVjjoX4J5kYw6HtRl_sOFPOF-2IIhBvAn20dV1Xj-hZCk1U1OqIbIBxYHn2RpSQzFvBNI2qPGRR9eZC5VaET4HApwfHKHLbLNeFpLXGFj4XEFg4O65miwwGht7QC2CMNCNQp/s320/Engelbert%20Dollfuss.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">El canciller católico austríaco Engelbert Dollfuss <br />pasando revista a las tropas.</td></tr></tbody></table><br /><p><b>AUSTRIA. El «Frente patriótico». </b></p><p>Dominada por completo la revolución judaico-roja y algo apagados, al parecer, los peligros del nacional-socialismo y del Anschluss, el «kleine» Dollfuss está entregado a la obra de edificar la nueva Austria. Repetidamente ha dicho que edificará sobre los firmes pilares de la «Quadragesimo anno». Claras están, pues, las directrices del nuevo Estado: católico, corporativo. </p><p>En la mente de Dollfuss la religión no es, por consiguiente, un medio político, sino un fin. Su ferviente religiosidad aleja cualquier sospecha de pragmatismo. </p><p>«Austria es un Estado católico cuyos derechos vienen de la gracia de Dios, y no del pueblo.» </p><p>Van a la absoluta eliminación de todo vestigio de política liberal, democrática y de lucha de clases. </p><p>Han quedado suprimidos los partidos políticos; el «Frente patriótico» —formado por cristiano-sociales, Heimwehren y agrarios— será en adelante la única expresión del sentido de la opinión pública. </p><p>Han sido deshechos los sindicatos socialistas y se han creado unos sindicatos profesionales, únicos reconocidos de ahora en adelante, que constituirán las distintas Corporaciones, base social del nuevo Estado. </p><p>Se constituirá, según parece, una Cámara con representación orgánica corporativa y facultades legisladoras en determinados asuntos (económicos, sociales, etc.). </p><p>Muy en breve se pondrá en vigor la nueva Constitución, a la que Eugenio Montes califica de «aquiniana». </p><p>Austria ha hecho borrar de su denominación oficial la palabra «república» y en su emblema ha cambiado el águila republicana por el águila imperial. Es una república, pero parece como si no quisiera serlo. Está abriendo las puertas de la patria a los Habsburgos, con los que parece estar Dollfuss en buenas relaciones. ¿Por qué no entonces una restauración? </p><p>Los draconianos tratados internacionales de la postguerra impusieron a los vencidos —argumento Aquiles contra la idea republicana— la transformación en República como medio para su total aniquilamiento. Dificultan, pues, grandemente los aliados la restauración austríaca. Saben que será el comienzo de la formación de una gran potencia. </p><p>Pero parece ser que Dollfuss también se ha dado cuenta de que le hace falta esto para bien forjar la nueva Austria. </p><p><br /></p><p><b>INGLATERRA E IRLANDA </b></p><p>El país del tópico liberal y parlamentario también está siendo invadido por las doctrinas fascistas. Los camisas negras, acaudillados por Sir Oswald Mosley, están adquiriendo gran auge. </p><p>Muy poco se puede decir de su contenido ideológico, pues son en la oposición, como buenos fascistas, todo nervio y acción. No admiten el «racismo»; son mussolinianos y no hitlerianos. </p><p>Son los únicos fascistas —que yo sepa— decididos en cuanto a forma de gobierno: son clara y rotundamente monárquicos. </p><p>Los fascistas irlandeses —camisas azules— tienen por jefe a O'Duffy. </p><p>Es enemigo de De Valera por sus delirios separatistas. </p><p><br /></p><p><b>PORTUGAL. Oliveira y el Nacional-Sindicalismo. </b></p><p>En Portugal la revolución, más lenta y moderada, conducida por Oliveira Salazar, permanece completamente dentro del régimen republicano. Ha modificado por decreto el sufragio, restringiendo en parte su universalidad y concediendo voto de calidad a los padres de familia. Con la nueva Constitución del Estado, aprobada por plebiscito el 19 de marzo del año pasado, se abrió un ciclo nuevo en la vida de la nación, definiendo la república portuguesa como una «República unitaria y corporativa», y quedando, por tanto, suprimida la huelga y todo rastro de lucha de clases. Se están formando los Sindicatos que integrarán las Corporaciones, según dictamina el Estatuto del Trabajó Nacional. </p><p>Actualmente no hay más que poder personal dictatorial. Según parece, una vez realizada esta nueva estructuración portuguesa, se formará una Cámara Corporativa. </p><p>El Nacional-Sindicalismo, cuyo principal teórico es Rolao Preto, que desempeña además la jefatura del grupo, tiene un contenido eminentemente económico expuesto brillantemente por aquél en doce puntos doctrinales. (8) </p><p>En ellos se nos muestra el Nacional-Sindicalismo como un movimiento de gran acometividad, que pretende derruir el Estado liberal para establecer el Corporativo.</p><p><br /></p><p><b>EPÍLOGO </b></p><p>De estas breves consideraciones se deduce, como indicaba al comenzar el trabajo, que <b>Fascismo</b> y <b>Tradicionalismo</b> son movimientos que coinciden en el designio de derrocar la política liberal con todas sus derivaciones y consecuencias. Ortega y Gasset ha dicho que el <b>Fascismo</b> erige a «la violencia en sucedáneo de una legalidad inexistente»; Para Ortega lo más característico del <b>Fascismo</b> es la «ilegitimidad». «Lo que otorga un altísimo rango —dice— como síntoma histórico al hecho italiano es que nos presenta el gobierno de un poder ilegítimo «como tal». Toda preocupación por consagrar mediante un derecho el ejercicio del poder está sustituida por la mera declaración de un motivo: «hay que salvar a Italia». (9) </p><p>Todo esto presupone el concepto liberal del orden jurídico, según el cual una suma de voluntades humanas establece siempre la legalidad valedera, aunque sea con menoscabo de la norma eterna. </p><p>Del Vecchio, por el contrario, cree en el Derecho natural y afirma que el <b>Fascismo</b> es un esfuerzo para restaurar en el mundo su dormido imperio. </p><p>«La verdad es —afirma— que la revolución fascista no es otra cosa que un paso adelante en el camino de la verificación histórica del Derecho natural. De este criterio ideal toma la razón de su legitimidad, que en vano se buscaría en concepciones inmanentistas o positivistas del Derecho.» (10) </p><p>Sean cualesquiera los errores y aun las vulneraciones del Derecho natural que el <b>Fascismo</b> haya cometido, lo indudable es que las palabras de Del Vecchio son ciertas, porque el <b>Fascismo</b> no es la consagración de lo ilegítimo, como dice Ortega y Gasset, sino la repudiación de una legitimidad no más que aparente para instaurar un orden que valore las cosas ateniéndose a eterna e inmutable pauta. </p><p>Con mayor o menor precisión y tino, todos los «fascismos» vagan alrededor del Derecho natural, a veces tímida o equivocadamente, pero siempre en actitud de arrancarle el secreto. Tanteos o realizaciones, indican sin cesar que se busca lo que hay de eterno en el orden del universo; eso que la quimera de varias generaciones ha querido hacer objeto de deliberación, entregándolo, como cualquier accidente, a las disputas de los hombres. </p><p>Este amor de eternidad había sido desde mucho antes la esencia del <b>Tradicionalismo</b>. No hay un solo punto de su programa que no se haya examinado a la luz de lo eterno. Por eso en él la Idea es antes que la Acción, que toma su dirección en el seno de aquélla, como la flecha de manos y ojos del arquero.</p><p>En lo fundamental, todos los movimientos de ahora no han hecho sino confirmar la doctrina política tradicionalista. </p><p>Las diferencias nacen de circunstancias de lugar y tiempo y acaso también de que Mussolini y sus colegas, hombres de improvisación, tienen que suplir intuitivamente todo lo que no se les alcanza por un sistema de verdades adquirido y dominado con la parsimonia científica. </p><p>Así, quizá lo que en sus comienzos tiene apariencias de cesarismo, dé más tarde paso, en circunstancias propicias, al orden antiguo del Rey de herencia que reina y gobierna como el padre del pueblo. </p><p>Horacio, refiriéndose a las voces arcaicas, dejó escrita esta sentencia en su «Arte poética»: «Multa renascentur quae jam ceciderunt»: muchas renacerán que ya cayeron en desuso. </p><p>Algo así puede decirse en esta hora de Derecho y Política, Estado y Gobierno. </p><p>Todo hace pensar que los hombres comienzan a afanarse por un orden nuevo. Nuevo, porque el actual ha durado tanto que ha llegado a parecer el orden natural de las cosas. Fuera de esto, el orden que se busca no es nuevo, sino eterno.</p><p><b>LAUS DEO</b></p><p><b><br /></b></p><p><b><br /></b></p><p><span style="font-size: x-small;">(*) Téngase en cuenta al leer este capítulo que el plazo de admisión de los trabajos para el Concurso de que se trata se cerraba en marzo [de 1934].</span></p><p><span style="font-size: x-small;">(1) Vid. el núm. I de «F. E.»: «Puntos iniciales».</span></p><p><span style="font-size: x-small;">(2) «Puntos iniciales», 1.</span></p><p><span style="font-size: x-small;">(3) Vid. <a href="https://es.wikisource.org/wiki/%C2%BFBandera_que_se_alza%3F" target="_blank">«¿Bandera que se alza?»</a>, núm. 43 de «Acción Española». </span></p><p><span style="font-size: x-small;">(4) Giménez Caballero ha publicado «La nueva catolicidad» con observaciones sobre España.</span></p><p><span style="font-size: x-small;">(5) «El vértigo romántico». («A B C», 2-2-1934.)</span></p><p><span style="font-size: x-small;">(6) Vid. «La revolución Nacional-Socialista», por Vicente Gay. Barcelona, 1934. </span></p><p><span style="font-size: x-small;">(7) «La joven Alemania quiere Trabajo y Paz.» (Discursos del Canciller Hitler; edición oficial en castellano: Berlín, 1933.)</span></p><p><span style="font-size: x-small;">(8) Véanse los interesantes artículos publicados por Preto en los números 39, 45, 46, 47, 49 y 50 de «Acción Española»; donde expone los doce puntos.</span></p><p><span style="font-size: x-small;">(9) Vid. J. Ortega y Gasset: «El Espectador»; tomo VI, pág. 35. («Sobre el Fascismo».)</span></p><p><span style="font-size: x-small;">(10) Vid. art. cit., pág. 854.</span></p>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-30621013358142756832022-08-29T23:53:00.001+02:002022-08-30T00:06:11.045+02:00Tradicionalismo y fascismo (IV) : Rey<p> <a href="http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0000533521&page=3&search=&lang=es" target="_blank"></a><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghoQGcL_Oje_enxstYhs-Jt76QdCVaZyA1Ra_vjivOElnJN0RpdzpRZlBpiSeOYBU-bloKt4aGtDNfa18xBGOQQ1OMFpVRRNNA56Fjr7hISqL5jKYtRPDWSNHD_vAaq5nNcQaHY9yRQ2M/s1600/Tradicionalismo+y+fascismo.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghoQGcL_Oje_enxstYhs-Jt76QdCVaZyA1Ra_vjivOElnJN0RpdzpRZlBpiSeOYBU-bloKt4aGtDNfa18xBGOQQ1OMFpVRRNNA56Fjr7hISqL5jKYtRPDWSNHD_vAaq5nNcQaHY9yRQ2M/s320/Tradicionalismo+y+fascismo.png" width="283" /></a></p><p><a href="https://hemerotecadigital.bne.es/hd/es/viewer?id=591932f5-9468-4622-a601-de0a2a234a4f&page=3" target="_blank">Folletón de EL SIGLO FUTURO</a></p><p>por José Luis Vázquez Dodero (noviembre-diciembre de 1934)</p><p><br /></p><p><b>REY</b></p><p>Para el <b>Tradicionalismo</b> es sustancial la cuestión de las formas de gobierno. Sistema con sillares metafísicos, no olvida que es vano hablar de formas de gobierno sin analizar ante todo el contenido de este vocablo «forma», para no incurrir en logomaquias cuando se plantea la discusión sobre el problema. (1)</p><p>El concepto del <b>Tradicionalismo</b> respecto a las formas de gobierno lo expresa muy bien Vázquez de Mella cuando dice que, en el derecho natural, no son meros accidentes, sino cosa que se relaciona con los atributos inherentes a la soberanía, y según sea el concepto que se tenga de ésta, así será el concepto que se tenga de las formas de gobierno. </p><p>El <b>Tradicionalismo</b> pone sobre su cabeza todo el peso de la argumentación de Santo Tomás para probar que el gobierno de uno es superior intrínsecamente a toda otra forma de gobierno. </p><p>En la filosofía del <b>Tradicionalismo</b> la Monarquía es en sí misma, en abstracto, prescindiendo de toda relación de lugar y tiempo, la mejor forma de gobierno. (2) </p><p>Pero además pesa también el argumento histórico.</p><p>El Rey de la Tradición no es un autócrata. Es un soberano que reina y «gobierna»; pero su poder está templado por las libertades municipales y forales y por las Cortes, sin cuyo consentimiento no puede poner la mano en ninguna ley fundamental, ni gravar con nuevas cargas contributivas al pueblo. El Rey está, además, asistido por el «Consejo Real». </p><p>Otra característica es el principio hereditario de la Monarquía. Este principio asegura la permanencia, la estabilidad, la seguridad; es la garantía de que la Monarquía no es accidental para la nación. </p><p>Estos son a grandes rasgos los principales puntos del programa tradicionalista en cuanto al régimen de gobierno. En una palabra: para el <b>Tradicionalismo </b>es sustancial que haya un Rey hereditario, el cual gobierna de hecho, aunque con cortapisas. </p><p>Mussolini, por el contrario, sienta en la «Doctrina» como cosa descontada la accidentalidad de las formas. El <b>Fascismo</b> fué, en sus comienzos, republicano (3). Cuando la marcha sobre Roma, dejó de serlo. Pero —entiéndase bien— no porque creyese que la Monarquía era una forma de gobierno superior a la República por razones filosóficas o meramente históricas, sino porque, según de sí dice el Duce, estaba «convencido de que la cuestión de las formas políticas de un Estado no es, hoy, primordial, y de que del estudio de las monarquías y de las repúblicas pasadas y presentes resulta que Monarquía y República no deben juzgarse bajo especie de eternidad, sino que representan formas en las cuales se evidencia la evolución política, la historia, la tradición, la psicología de un país determinado. El <b>Fascismo</b>, pues, está por encima de la antítesis Monarquía-República, con la que se quedó retrasada la democracia, cargando sobre la primera todas las insuficiencias y haciendo la apología de la última como régimen de perfección». (Párrafo 6 de la «Doctrina».) </p><p>No basta citar estas interesantes frases del Duce, porque a veces es notorio el divorcio entre la teoría y los hechos de gobierno. Hay que descender a la realidad política italiana para ver si en efecto la institución monárquica es o no una pieza fundamental en el <b>Fascismo</b>. </p><p>Don José F. Lequerica, en reciente artículo (4), quiere ver en el <b>Fascismo</b> «la síntesis más sabia» de «la forma monárquica hereditaria» y los «poderes autocráticos». </p><p>Por su parte don José Linares Rivas, en otro interesante artículo (5), afirma que «el <b>Fascismo</b> italiano, que en un primer momento pudo no ser monárquico, se confirma prácticamente en la absoluta necesidad de mantener en su más alto prestigio esta institución (la Monarquía) fundamental para la vida del país, viendo en la realeza la encarnación suprema de la idea nacional...», etc. Y líneas después añade: «El principio monárquico ha sido adoptado por la experiencia fascista italiana, «como base fundamental del sistema». </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh5nBTB2Apvtd8lL40Vp8LrgKZSsKAbZ2INFm9VS2b3OyttxCRw_IrM8Aoy1F7W_HrsM4RHGGQUCgoL8qKpqePv-N_GykwylbIFTLCFmFZJwVhUnCw1QQcNY-EBfENK9qkqmj_5ApWYn7TXDAXLL1_8PnaOhSowul8dTZPZa0cZDaB5f-bWsjfTc6Xh/s1200/1200px-Spanish_Royal_Crown_1crop.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1008" data-original-width="1200" height="269" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh5nBTB2Apvtd8lL40Vp8LrgKZSsKAbZ2INFm9VS2b3OyttxCRw_IrM8Aoy1F7W_HrsM4RHGGQUCgoL8qKpqePv-N_GykwylbIFTLCFmFZJwVhUnCw1QQcNY-EBfENK9qkqmj_5ApWYn7TXDAXLL1_8PnaOhSowul8dTZPZa0cZDaB5f-bWsjfTc6Xh/s320/1200px-Spanish_Royal_Crown_1crop.jpg" width="320" /></a></div><p>Tentemos la elocuencia de los hechos. </p><p>En Italia, como ya queda dicho, el Poder ejecutivo es fortísimo. A su cabeza, y sin dependencia real alguna del legislativo, está el Duce, que tiene además el título de «Capo del Governo», Capitán del Gobierno fascista. Los ministros son nombrados por él, y sólo ante él responden. </p><p>La ley de 9 de diciembre de 1928 reorganizó e incorporó oficialmente al Estado el Gran Consejo fascista, especie de punto de unión entre el Estado y el Partido. </p><p>El «Capo del Governo» nombra también libremente a los miembros del Gran Consejo, cuya misión es asesorar al Duce y nombrar en su día a quien haya de sucederle. Goad llama al Gran Consejo «el supremo depositario del poder» (6). Y, en efecto, otro escritor lo confirma diciendo que tendrá que intervenir en caso de sucesión al trono, y aventura que es muy probable que el nuevo soberano tenga que ser reconocido por el Gran Consejo. </p><p>¿Y el Rey?, se preguntará. En el <b>Fascismo</b> el Rey, por lo visto, no tiene prerrogativas regias; reina, en cuanto que sigue en pie la institución que representa; pero no gobierna, y por consiguiente, no reina en el sentido auténtico del vocablo. Representa la Tradición, y viene a ser una especie de sombra secular que contribuye con el benéfico esplendor institucional a dar fuerza a los que de veras ejercen la soberanía. «El Rey, suma y compendio de todo su pueblo —dice el artículo que acabo de citar— dará en su día la investidura al jefe del Gobierno que designe el Gran Consejo Fascista, para suceder en el tiempo al Duce.» </p><p>Se pregunta uno qué clase de Rey es este que no tiene facultades constitucionales para desentenderse del primer Ministro, que no puede sino ratificar sumisamente las leyes, que no goza siquiera de la prerrogativa de elegir nuevo jefe cuando el actual muera... </p><p>Habrá que pensar que el Rey del <b>Fascismo</b> tiene menos mando que cualquier Rey constitucional; que es un Rey de nombre... </p><p>Un francés que ha estudiado el <b>Fascismo</b> con imparcialidad no exenta de resabios liberales (7) afirma que aquél estruja a la Monarquía y que si no la rechaza es porque ve en ella una utilísima fuente de legitimación de su poder y sus actos. </p><p>Pero, por otra parte, la República es, en rigor filosófico, lo más opuesto al <b>Fascismo</b>, porque o es gobierno democrático o no es República. </p><p>«El <b>Fascismo</b> —dice Aldo Dani— se ha injertado en la Monarquía de la misma manera que se hubiera injertado en la República. Mejor dicho, «él es el que constituye el régimen». La Monarquía o la República no pasan de formas externas.» </p><p>Parecen ciertas las palabras que subrayo; pero, para lo que el <b>Fascismo</b> es y representa, indudablemente la Monarquía le da algo que no podría darle la República: la majestad y el brillo de la institución. </p><p>De la República, al matar la democracia liberal, no hubiera quedado nada; de la Monarquía, aunque se cercenen todas las regias prerrogativas, ha quedado, para bien del <b>Fascismo</b>, todo lo que ella tiene siempre de divino a los ojos del pueblo. </p><p>Es otra manifestación del gran talento político de Mussolini. </p><p>En el <b>Tradicionalismo</b>, la Monarquía es de esencia: no se concibe sin ella. El <b>Fascismo</b> la considera accidental, porque es un partido que ha concentrado en sus manos todos los poderes. Pero entiende que, aunque nada le quede al Rey de soberanía efectiva, todavía puede el pueblo beneficiarse de su presencia, que impone más respeto que institución alguna. Quizá no sea más que un caso de psicología de las multitudes. </p><p>Políticamente, Italia depende de una organización poderosísima: el partido fascista, que absorbe por completo el poder. El Duce ha conservado la Monarquía como se conserva lo que nos da lustre y brillo a los ojos del prójimo. </p><p>El <b>Fascismo</b> es una autocracia colectiva con un blasón de filosofía y de historia.</p><p><br /></p><p><br /></p><p><span style="font-size: x-small;">(1) No es este lugar para hacer una disquisición sobre punto tan elevado; pero no estará de más advertir que el concepto de «forma» de que parten los pensadores tradicionalistas, y aun el mimo programa implícitamente, es éste que Santo Tomás trae en el capítulo 1 «De ente et essentia»: «Per formam significatur perfectio uniuscujusque rei».</span></p><p><span style="font-size: x-small;">(2) Vid. Gilson: «Santo Tomás de Aquino», páginas 344 y siguientes, y Grabmann, págs. 140 y siguientes de la citada obra del mismo título. Importa subrayar el fundamento metafísico de la fe monárquica tradicionalista, porque hay quien cree que ésta proviene únicamente de consideraciones históricas. En estos libros se expone muy clara y exactamente el pensamiento de Santo Tomás.</span></p><p><span style="font-size: x-small;">(3) En el primer Congreso fascista (octubre 1919) Mussolini dijo: «No teníamos prejuicios monárquicos ni republicanos; pero hoy decimos que la Monarquía es inferior a su misión histórica».</span></p><p><span style="font-size: x-small;">(4) «El pantalón al revés». («La Época», 14-4-1934.)</span></p><p><span style="font-size: x-small;">(5) «Las ideas fascistas y el problema de la Monarquía» («La Epoca», 28-3-1934.)</span></p><p><span style="font-size: x-small;">(6) O. cit., pág. 164.</span></p><p><span style="font-size: x-small;">(7) Vid. G. Roux, obra cit. págs. 70 y siguientes.</span></p>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-85812659732994848392022-08-28T16:05:00.011+02:002022-08-30T00:05:22.054+02:00Tradicionalismo y fascismo (III) : Patria<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghoQGcL_Oje_enxstYhs-Jt76QdCVaZyA1Ra_vjivOElnJN0RpdzpRZlBpiSeOYBU-bloKt4aGtDNfa18xBGOQQ1OMFpVRRNNA56Fjr7hISqL5jKYtRPDWSNHD_vAaq5nNcQaHY9yRQ2M/s1600/Tradicionalismo+y+fascismo.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghoQGcL_Oje_enxstYhs-Jt76QdCVaZyA1Ra_vjivOElnJN0RpdzpRZlBpiSeOYBU-bloKt4aGtDNfa18xBGOQQ1OMFpVRRNNA56Fjr7hISqL5jKYtRPDWSNHD_vAaq5nNcQaHY9yRQ2M/s320/Tradicionalismo+y+fascismo.png" width="283" /></a></div>
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<a href="http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0000533521&page=3&search=&lang=es" target="_blank">Folletón de EL SIGLO FUTURO</a><br />
<br />
por José Luis Vázquez Dodero (noviembre-diciembre de 1934)<br />
<br />
<b>PATRIA</b><br />
<br />
<b>1) ESTADO Y NACIÓN</b><br />
<br />
Para simplificar mi tarea voy poniendo a cada capítulo un título del lema tradicionalista. Examinado «Dios», le toca el turno al concepto de Patria. Pero esta palabra se pone aquí como un nombre amplísimo en el que tienen cabida multitud de nombres que son otros tantos problemas de Derecho público, y que se agrupan bajo este vocablo emotivo y sentimental, «Patria», para hacer más sencilla y menos complicada la tarea.<br />
<br />
Estado, Sociedad, Nación, Soberanía, etc. son términos que pueden examinarse a la sombra de ese término lleno de vibraciones y sonoridades mágicas que es la palabra Patria.<br /><br />
«Initium doctrinae sit consideratio nominis». Esta prudentísima sentencia de Epicteto no está de más<br />
cumplirla aquí donde reina extraordinaria confusión terminológica y donde los tratadistas modernos han complicado extraordinariamente el léxico. Por eso para saber a qué atenerse y no manejar equívocamente las palabras, conviene darles antes un sentido, en el que han de entenderse cuantas veces se usen.<br /><br />
Y lo primero es decir que la Nación es una forma de Sociedad. La Sociedad se concibe y se explica de dos modos: o por la sociabilidad del hombre, y entonces la Sociedad es un hecho «natural»; o rechazando esa sociabilidad, y en este caso la Sociedad es un hecho «artificial». La primera es la concepción tradicional cristiana; la segunda es la teoría del pacto de Rousseau. Si se admite que la Sociedad es un hecho natural, una criatura, un ser, habrá que admitir que, como todo ser y toda criatura, la Sociedad tiene una «forma». Ahora bien, esta forma de la Sociedad no es otra sino la que nace «naturalmente» (1) de la tendencia de la sociabilidad, en su desenvolvimiento y desarrollo. Toda forma social está determinada por una necesidad natural: venimos al mundo en el seno de una sociedad, la Familia; nos desenvolvemos en la agrupación que las familias forman para atender sus fines y que se llama Municipio; el cual, para los suyos, se agrupa en una Sociedad superior, que es la Región, Sociedad que en su unión con las análogas produce otra que cuando se mira desde fuera se llama Nación y cuando se mira desde dentro, por los propios nacionales, llamamos Patria, según la conocida identificación de Cánovas del Castillo.<br />
<br />
De aquí que las Naciones sean para el <b>Tradicionalismo</b> «productos históricos en que el principio universal de sociabilidad se ha ido plasmando». (2)<br />
<br />
Importa subrayar este fundamento «social» de la Nación, porque de la aplicación de este principio surgen trascendentales consecuencias en el orden político y de gobierno.<br />
<br />
Hay, pues, una jerarquía de agrupaciones humanas para atender los fines terrenos; jerarquía que comienza donde comienza el hecho fundamental de toda Sociedad —la vida misma, que da lugar a la familia— y que se corona en la Nación, «sociedad política suprema en que sus miembros realizan el destino humano». (3)<br />
<br />
Mella ha dicho de la Nación que «es un río formado por afluentes»; con lo cual se significa perfectamente esta gradación social de que venimos hablando.<br />
<br />
Esclarecido el concepto de Nación, urge esclarecer el de Estado. Y con esto está dicho que Nación y Estado son dos conceptos, y por tanto conceptos «distintos». No es este lugar propio para hacer una reseña de la polémica científica en torno a ellos.<br />
<br />
Desde la absoluta divinización de Hegel («el Estado es la voluntad divina como Espíritu actual» o «la sustancia ética consciente de sí misma») hasta la novísima identificación de Estado y Derecho que concibe Kelsen, pasando por la definición simplista de Kant y el concepto materialista de Duguit, hay multitud de escuelas, doctrinas y tanteos alrededor del Estado, que no son del caso examinar ahora. (4)<br />
<br />
Baste saber que para el <b>Tradicionalismo</b> el Estado no es otra cosa sino ese supremo cuerpo social —Nación— en cuanto organizado políticamente; es decir, la organización jurídico-política, del organismo social vivo que llamamos Nación.<br />
<br />
El <b>Tradicionalismo</b> hace suya, en lo que se refiere a Sociedad y Estado, la doctrina de Santo Tomás de Aquino que veía en la Sociedad una exigencia natural del hombre, y en el Estado la necesaria autoridad que mira por el bienestar colectivo. (5)<br />
<br />
La diferencia entre Estado y Nación la expresa Vázquez de Mella perfectamente en su discurso de 30 de junio de 1916 con las siguientes palabras: «Una colección de emigrantes de diferentes creencias, de razas distintas, pueden llegar un día en un buque náufrago a estrellarse en la costa de una isla desierta e inhospitalaria y erigir un Poder público e independiente, constituir un Estado; dondequiera que haya una soberanía política independiente existe un Estado, pero no constituirá una Nación. Un Estado se puede constituir en una batalla, sobre una espada vencedora, cuando una provincia se destaca o una colonia se emancipa; pero una Nación, no; una Nación no se improvisa». (6)<br />
<br />
¿Está claro? El Estado, la soberanía política, puede ser obra de unas horas, en azares y situaciones especiales; la Nación, el organismo social vivo sobre el que actúa como organizador jurídico el Estado, no. El Estado puede surgir en un instante; la Nación, no, porque es la entrega —tradición— del patrimonio espiritual, moral y material de generación en generación; y, en frase de Gustavo Le Bon, «un conjunto de fuerzas atávicas condensadas en nosotros mismos».<br />
<br />
De estos conceptos de Nación y Estado deduce el <b>Tradicionalismo</b> una consecuencia que constituye uno de los puntos fundamentales de su doctrina: la soberanía de «lo social» sobre «lo político»; la subordinación del Estado a la Nación.<br />
<br />
Siendo lo social el hecho primario y natural anterior a cualquier forma de organización política, es<br />
lógico que el Estado, organizador, esté supeditado a la Nación, organizada, puesto que la razón de ser del primero es precisamente el bien de la segunda.<br />
<br />
Así, pues, para el <b>Tradicionalismo</b> el Estado <i>depende</i> de la Nación y es su servidor necesario.<br />
<br />
Antes que la soberanía política, y sirviéndose de ésta para su provecho, está en el <b>Tradicionalismo</b> la soberanía social: «Reconocemos —dice el Programa— lo que llamamos <i>soberanía social</i>, fruto de otras jerarquías subordinadas de personas o entidades sociales que, aparte la persona individual, cuyos derechos naturales proclamamos, comienzan en la <i>familia</i>: se prolongan por el <i>municipio</i>, que es una agrupación de familias; siguen por la hermandad de esos municipios en comarcas que se unen para formar la <i>región</i>.<br />
<br />
De esta preeminencia de lo social surgen para la política, tal como la concibe el <b>Tradicionalismo</b>, las siguientes consecuencias que sumariamente recojo:<br />
<br />
1.ª El Regionalismo y la autonomía municipal, ya que el Municipio y la Región son cuerpos sociales vivos que tienen derecho a administrarse por sí mismos, aunque sin mengua de la unidad nacional ni de las funciones <i>específicas</i> del Estado.<br />
<br />
2.ª El régimen corporativo, gremial, que parte del reconocimiento de las clases sociales y que tiene por objeto agruparlas para armonizar los intereses de todas en beneficio de la Nación.<br />
<br />
3.ª La representación orgánica, en la que se atiende al interés vivo, real y verdadero de las clases, sin sacrificar, como hace el sufragio universal igualitario de las democracias, lo social, que es la vida auténtica a lo político, que es el interés de los partidos.<br />
<br />
4.ª La limitación de la autoridad política, que encarna en la persona del Rey por las libertades municipales y regionales.<br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjNyIMaKvlCIvKMICToR5gTfyqdEmLPUyIC7InvBd9BANXmFiVPbd0TNxg8x5QPv_8on09XQVAO2LEF8WN7doZhzX5EACZfL_NxNIsAI6PM6yvgbibGu2fQZrIGtzDBYxl_nrV1P_Q6EVY4BxYW5jwKkvTlC1ujAnuoFd4vRQAh4xm7dr4uXHdq_Oj7/s1366/1366_2000.jpg" style="font-style: italic; margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="1131" data-original-width="1366" height="331" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjNyIMaKvlCIvKMICToR5gTfyqdEmLPUyIC7InvBd9BANXmFiVPbd0TNxg8x5QPv_8on09XQVAO2LEF8WN7doZhzX5EACZfL_NxNIsAI6PM6yvgbibGu2fQZrIGtzDBYxl_nrV1P_Q6EVY4BxYW5jwKkvTlC1ujAnuoFd4vRQAh4xm7dr4uXHdq_Oj7/w400-h331/1366_2000.jpg" width="400" /></a><br /><br />Tratemos ahora de presentar la concepción fascista de la Nación y Estado según está expuesta en las principales fuentes de información, y sobre todo, por supuesto, en ese diseño general que es la «Dottrina» de Mussolini.<br />
<br />
En España se oye con frecuencia reprochar al<b> Fascismo</b> una concepción estadolátrica de la vida. El <b>Fascismo</b>, suele decirse, sigue el pensamiento de Platón y Hegel en cuanto al Estado. Por eso es menester estudiar objetiva y desapasionadamente, en los mismos textos fascistas, esta doctrina, y compararla con la tradicionalista.<br />
<br />
Una observación preliminar. Está escrito en este tratado que <b>Tradicionalismo</b> y <b>Fascismo</b> coinciden en ser movimientos de reacción contra la política vacilante deicida del Ideario de la Revolución. Este ideario puesto en práctica es el liberalismo, es la democracia inorgánica, y sabido es que el liberalismo, haciendo caso omiso de lo social, colocó al individuo frente al Estado y encargó a éste de atender y cumplir fines sociales que hasta entonces, según ley natural, atendían y cumplían los organismos naturales. Es decir, el Estado desahució a la Sociedad de los puestos que legítimamente ocupaba, cosa lógica en una doctrina nacida del supuesto de que la Sociedad no es producto del hecho <i>natural</i> de la sociabilidad, sino del <i>artificial</i> del pacto.<br />
<br />
Ahora bien: el <b>Tradicionalismo</b> ha sido consecuente en su posición contrarrevolucionaria, puesto que quiere reivindicar para la sociedad todo lo que violenta y dolosamente le había arrebatado el Estado, y hacer que de nuevo resplandezca en sus consecuencias la premisa fundamental de la sociabilidad humana.<br />
<br />
¿Lo ha sido igualmente el<b> Fascismo</b>? A esta pregunta contestamos a continuación. Pero antes una palabra. Si ha sido consecuente, estamos en el caso examinado, y nada hay que añadir. Si no lo ha sido —y a esto se endereza esta observación preliminar— nos encontraríamos ante la pirueta política e histórica de una doctrina que viniendo a reemplazar a otra y a aniquilar todos los principios y consecuencias de la primera, llega por otro camino a idénticos resultados. Porque tanto monta dar en el estatismo por la vía del individualismo inorgánico que prescinde de todo cuanto signifique organización espontánea y natural, como ir a parar a ese estatismo combatiendo el artificio del pacto y teniendo presente lo orgánico y lo social, pero prescindiendo de ellos al dar al Estado poder absorbente y omnímodas atribuciones que los destruyen.<br />
<br />
Mussolini apunta esta idea general sobre el <b>Fascismo</b>: «El Fascismo es una concepción histórica en la que el hombre no es quien es sino en función del proceso espiritual al que concurre, en el grupo familiar y social, en la nación y en la historia, a la cual colaboran todas las naciones. De ello nace el gran valor de la tradición en las memorias, en el idioma, en las costumbres, en las normas de vida social. «Fuera de la historia el hombre no existe». («Dottrina», párrafo 6.)<br />
<br />
He aquí, en la frase que subrayo y en todo el párrafo, la tradición como elemento del <b>Fascismo</b>. Y más: «La tradición es ciertamente una de las mayores fuerzas espirituales de los pueblos, por ser creación sucesiva y constante de su alma». (En «Jerarquía», año I, 1922, número I.)<br />
<br />
«Nos servimos de los valores morales y tradicionales que el socialismo olvida o desprecia,..» (<i>Popolo d' Italia</i>, 23-3-1921.)<br />
<br />
Y así otras frases en las que Mussolini hace desempeñar a la tradición su papel de parte integrante del<br />
ser actual de las naciones.<br />
<br />
A tono con ello decía en Nápoles el 24 de octubre de 1922: «Para nosotros la Nación es, sobre todo, espíritu y no sólo territorio. Hay Estados que han tenido inmensos territorios y que no han dejado huella alguna en la historia humana. No es sólo el número, porque hubo en la historia Estados minúsculos, microscópicos, que dejaron documentos memorables, imperecederos en el arte y en la filosofía. La grandeza de las naciones es el conjunto de todas las virtudes, de todas estas condiciones. Una nación es grande cuando traduce en la realidad la fuerza de su espíritu».<br />
<br />
¿No es esto esbozar el pensamiento de Mella antes copiado, según el cual las Naciones no se improvisan, porque son sociedades con un patrimonio moral transmitido incesantemente de unas a otras generaciones sobre la base física del territorio en que viven y se desenvuelven?<br />
<br />
Sin embargo, en la mente de Mussolini la Nación no tiene el mismo valor de hecho anterior al Estado que le reconoce el <b>Tradicionalismo</b>, para el cual éste es una consecuencia de aquélla.<br />
<br />
Mussolini siente lo contrario de una manera paladina y rotunda: «Esta personalidad superior —dice el párrafo 10 de su <i>Doctrina</i>— es Nación en tanto que es Estado. No es Nación la que genera el Estado, según el viejo concepto naturalista que sirvió de base a los publicistas de los Estados nacionales del siglo XIX. Por el contrario, la nación se crea por el Estado, que da al pueblo, consciente de la propia unidad moral, una voluntad creadora de una existencia efectiva».<br />
<br />
Que una Nación lo sea en tanto es Estado, no puede tener para el <b>Tradicionalismo</b> otro sentido que aquel por el cual se hace depender el reconocimiento de una Nación como tal, en el concierto universal, de su organización jurídica y política. Claro que toda Nación como Sociedad organizada políticamente, es siempre Estado; pero esto no quiere decir que el entendimiento no conciba un primer momento o materia social —Nación— distinto de otro en que esa materia se formaliza política y jurídicamente —Estado—.<br /><br />
De otro lado, en el programa del Partido redactado por el Congreso de Roma se establecen fundamentos de Nación y Estado que lo mismo podían estar en el programa tradicionalista:<br />
<br />
<i>Nación</i>: «La Nación no es sólo la simple suma de los individuos vivos, ni el instrumento de los partidos para sus fines, sino el organismo que comprende la serie infinita de las generaciones, de la que cada una de ellas es elemento transeúnte, y la síntesis suprema de todas es el valor material e inmortal de la estirpe».<br />
<br />
<i>Estado</i>: «El Estado es la encarnación jurídica de la Nación; las instituciones políticas son formas eficaces en cuanto los valores nacionales encuentran en ellas expresión y tutela». «El Estado está reducido a las solas funciones de orden jurídico y político.» (7)<br />
<br />
Palabras que, como decía, lo mismo podían estar en un discurso de Mella que en un articulo de Pradera o en un programa autorizado por la Junta Suprema Tradicionalista.<br />
<br />
La tradición está perfectamente definida en una frase exacta: La Nación es el organismo que abarca la serie infinita de generaciones, y cada una es <i>elemento transeúnte</i>; transeúnte, se entiende, no porque no deje nada, sino cabalmente por lo contrarío: porque no puede hacer caso omiso de lo que han dejado las demás.<br />
<br />
El Estado, por su parte, es también totalmente tradicionalista: es la encarnación jurídica de la Nación, y sus funciones son de orden jurídico-político.<br />
<br />
Y, en fin, para que la identificación sea absoluta, se hace del Estado un servidor de la nación y se supedita lo político a lo social: «las instituciones políticas son formas eficaces en cuanto los valores nacionales encuentran en ellas expresión y tutela».<br />
<br />
Pero la <i>Doctrina</i> de Mussolini no dice lo mismo. De las doscientas referencias escasas que he sacado, buena parte se refieren al tema concreto que estoy tratando, y no encuentro en ninguna nada que se parezca a esa distinción de conceptos y limitación de funciones que tan clara, precisa y perfectamente hace un acuerdo del Congreso de Roma.<br />
<br />
La <i>Dottrina</i> —sea cualquiera la aplicación que después se haga de sus principios, que de esto no juzgo ahora— es como una apoteosis del Estado.<br />
<br />
«Para el fascista —dice el Duce— todo está en el Estado, y nada humano o espiritual existe y tanto menos valor puede tener, fuera del Estado. En este sentido el <b>Fascismo</b> es totalitario, y el Estado fascista, síntesis y unidad de todos los valores, interpreta, desarrolla y domina toda la vida del pueblo».<br />
<br />
Sin duda la frase más rotunda y que más ha dado que hablar en lo que a la idea del Estado se refiere, es esta, del discurso de Mussolini en la Cámara de los Diputados el día 26 do mayo de 1927: «Todo en el Estado, nada contra el Estaco, nada fuera del Estado».<br />
<br />
De esta frase y de otras que pueden recogerse aquí y allá en discursos y obras, ha salido la acusación de hegelianismo para la doctrina fascista.<br />
<br />
Completaré la breve antología de citas exhumadas en la <i>Doctrina</i>, de Mucsolini:<br />
<br />
«El Estado, como voluntad ética universal, crea el derecho». (Párrafo 10.)<br />
<br />
«Para el <b>Fascismo</b> el Estado es lo absoluto, ante el cual los individuos y los grupos son lo relativo». (Idem ídem de la parte II).<br />
<br />
«El Estado fascista tiene una conciencia y una voluntad, por lo que se llama Estado <i>ético</i>. (Idem ídem ídem.)<br />
<br />
Estas frases tienen un acentuado tinte hegeliano; más claro: parecen sacadas de la doctrina hegeliana del Espíritu objetivo. Sabido es que Hegel profesa la idea de una Ética objetiva cuya concreción y realización es el Estado. Esta moralidad realizada y encarnada es la más alta manifestación del Espíritu; es «Dios sobre la tierra». Luego el Estado es lo absoluto: exactamente lo mismo que nos dice Mussolini en las palabras transcritas. (8) <div><br /></div><div>No puedo omitir que a esta acusación de hegelianismo ha hecho frente la pluma autorizadísima de Giorgio del Vecchio. He aquí cómo descarga de ella al<b> Fascismo</b>: </div><div><br /></div><div>«Las mismas consideraciones nos guían a mirar con desconfianza el híbrido connubio, ya intentado por algunos, entre la Filosofía de Hegel y el espíritu del <b>Fascismo</b>. Aquella. Filosofía fué—¿quién no lo sabe?—el exponente del sórdido conservadurismo prusiano, la dogmática exaltación, bajo especie de eternidad, de un orden político contingente, tramontado ya y superado más veces (desde la revolución de 1848 hasta hoy) en la misma Alemania.» (9) </div><div><br /></div><div>La observación del profesor italiano es muy aguda. Trata de rechazar la paternidad hegeliana del <b>Fascismo</b> haciendo notar el contraste entre el carácter de éste—antiliberal, antidemocrático, «revolucionario»—y el viejo liberalismo democrático y burgués que se desprende de la doctrina de Hegel. (10) </div><div><br /></div><div>Sin embargo, esta defensa no borra las palabras de Mussolini. Lo que hay es que en el <b>Fascismo</b> pensamiento y acción, doctrina y práctica no se corresponden. </div><div><br /></div><div>En primer lugar su doctrina emana de la acción, invirtiendo la jerarquía augusta de los valores. Pero además hay contradicción evidente entre el concepto de Estado y Nación elaborado por el Congreso de Roma y el que Mussolini expone por su cuenta. </div><div><br /></div><div>¿Cuál será, pues, el pensamiento del<b> Fascismo</b>: un Estado divinizado como valor supremo, o un Estado que sirve como sociedad perfecta a ese auténtico latir humano que es el cuerpo nacional? </div><div><br /></div><div>A mi ver, para contestar a esta pregunta hay que separar la doctrina de la práctica. Para Mussolini el Estado es, como para Hegel, lo absoluto; si no con todo el alcance metafísico del vocablo, al menos como algo absorbente, omnipresente y omnipotente. </div><div><br /></div><div>Pero es indudable que esta idea pagana, remozada en el panteísmo moderno, no se ha llevado a la práctica en la legislación fascista de Italia, aunque ciertos abusos y tendencias del poder civil, denunciados por Pío XI, supongan concesiones a aquélla.</div><div><br /></div><div>Un régimen que basara sus decisiones legislativas en el principio «todo en el Estado, nada fuera del Estado», hubiera anulado la familia y a ser posible la Iglesia en el ámbito de su jurisdicción. Y el <b>Fascismo</b> no lo ha hecho. Luego en el <b>Fascismo</b> la realidad jurídica no está de acuerdo con la mente, tan clara, paladina y sin reservas, de su jefe. Habrá que pensar que pensamiento y acción no marchan juntos, a no ser que demos la primacía al acuerdo de un Congreso sobre la palabra misma del Duce. Pero pensando que una cosa es lo que el <b>Fascismo</b> dice y otra lo que hace, quizá no ande muy descaminado Giorgio del Vecchio. </div><div><br /></div><div><b>2) DOS PALABRAS SOBRE «NACIONALISMO» </b></div><div><br /></div><div>El <b>Fascismo </b>concibe la vida «como lucha», porque «la lucha es el origen de todas las cosas» y «la vida un combate incesante». (Mussolini.) </div><div><br /></div><div>Esta belicosidad, este entusiasmo combativo es, según el propio Duce en carta a M. Bianchi, «característica peculiar del Fascismo». </div><div><br /></div><div>El primer mandamiento del decálogo de la Milicia fascista dice así: «El fascista, y en particular el miembro de la Milicia, no debe creer en una paz perpetua».</div><div><br /></div><div>Este ímpetu guerrero se acentúa a veces en expresiones como esta del profesor Bodrero, vicepresidente de la Cámara de Diputados, dirigiéndose a los universitarios de Padua: </div><div><br /></div><div>«Existe una virtud que debe ser vuestro estímulo, que debe ser el fuego de vuestra juventud, y a esta virtud se la llama Odio.» </div><div><br /></div><div>Mussolini (25 de mayo de 1929) ha dicho: </div><div><br /></div><div>«No podemos renunciar a esta educación a la que daremos su verdadero nombre, porque la hipocresía nos repugna: educación guerrera; este nombre no debe espantarnos.» Y añade: «Teniendo que defender cada día nuestra existencia de gran pueblo, no podemos de ninguna manera ceder al engaño de mi universalismo que se explica en los pueblos que alcanzaron pleno desarrollo, pero que no puede admitirse en un pueblo que está aún en camino». </div><div><br /></div><div>Se respira en la atmósfera fascista un deseo vehemente de mantener a la nación tensa y firme, como en espera de que llegue la coyuntura propicia al estallido. </div><div><br /></div><div>No son sólo las milicias; son también los «balillas», los muchachos que se adiestran en la institución así llamada para adquirir y desarrollar un formidable temperamento de batalladores y soldados. </div><div><br /></div><div>Téngase en cuenta que todas las reacciones, hasta las del mundo intelectual y moral, tienen algo de violento, y que el <b>Fascismo</b> ha venido a sacudir y hacer vibrar los nervios entumecidos de una nación en decadencia. El escepticismo liberal hace olvidar a los ciudadanos la virtud del patriotismo. Habrá individualidades aisladas que lo sientan; pero el cuerpo social llega, a fuerza de oír hablar de «Humanidad», a perder la noción de la Patria. </div><div><br /></div><div>Pío XI, al anatematizar los nacionalismos exacerbados, ha proclamado la licitud y hasta la conveniencia del nacionalismo que no vulnera las normas inmutables de la justicia. </div><div><br /></div><div>«El amor de la patria y de la raza—dice en la «Ubi arcano Dei»—es una fuente potente de múltiples virtudes cuando está regulado por la ley cristiana»; pero «el amor a la patria se convierte en germen de abusos y de impiedades cuando, con menosprecio de las reglas de la justicia y del derecho, degenera en amor inmoderado a la nación». </div><div><br /></div><div>El <b>Tradicionalismo</b> lleva a su programa el concepto cristiano del amor a la patria, y con ello está dicho sencillamente que es nacionalista del más fino temple católico o universal. </div><div><br /></div><div>Santo Tomás pone el patriotismo en el tratado de las virtudes, considerándolo como una forma de la piedad, que es la reverencia que el hombre debe a los seres de quienes procede. La reverencia a Dios es la religión; la reverencia a la patria es el patriotismo; la reverencia a los padres, el amor filial. </div><div><br /></div><div>«Ama siempre a tus prójimos—dice San Agustín en «De libero arbitrio)—, y más que a tus prójimos, a tus padres, y más que a tus padres, a tu patria, y más que a tu patria, a Dios.» </div><div><br /></div><div>Por eso, el nacionalismo, como las demás afirmaciones del programa tradicionalista español, no es más que una consecuencia limpia y pura de las consabidas premisas filosóficas y teológicas. Una vez rechazada la hipótesis de que la Sociedad es producto de un pacto, rechaza el <b>Tradicionalismo</b> el falso concepto de Nación examinado antes, del cual nace el nacionalismo que pudiéramos llamar agresivo (11), al hacer de la Nación, por el libre arbitrio de los pactantes, un valor absoluto, insular e ilimitado. En oposición a la caduca paganía de este concepto, la doctrina tradicionalista contempla a la nación bajo especie de eternidad, y le da un valor «relativamente absoluto», si este término vale para expresar que hay que amarla y hasta morir por ella en cuanto Patria, pero que no es lícito divinizarla como si no existieran otras naciones y por consiguiente otras Patrias. </div><div><br /></div><div>Tampoco se le oculta al <b>Tradicionalismo </b>que el nacionalismo español tiene que ser, por el peso secular de la historia, necesariamente católico o universalista. Si exalta el valor nacional «España» es porque quiera despertar las energías católicas de la raza, aletargadas en dos siglos de postergación de todo lo autóctono. </div><div><br /></div><div>Hay, pues, también aquí, una línea clara y consecuente de deducciones lógicas impecables. </div><div><br /></div><div>Por último. Exacerbando el nacionalismo inmoderadamente, el <b>Fascismo</b>, antiliberal, desembocaría—por vía contraria a las doctrinas liberales—en el achaque liberal nacionalista, ya que el nacionalismo mal entendido no es otra cosa sino el liberalismo de las naciones. (12)</div><div><br /></div><div><b>3) CORTES Y RÉGIMEN CORPORATIVO </b></div><div><br /></div><div>Las Cortes del <b>Tradicionalismo</b> se basan en estos principios fundamentales: </div><div><br /></div><div>1.º Representación por clases y Cuerpos sociales. </div><div>2.º Incompatibilidad entre el cargo de diputado y toda merced, honor y empleo otorgado por el Estado. </div><div>3.º El mandato imperativo, como vínculo entre el elector y el elegido. </div><div>4.º Aquellas dos atribuciones que consisten en no poder establecer ningún impuesto nuevo ni ser modificada ninguna ley fundamental sin el consentimiento «expreso y previo» de las Cortes. </div><div><br /></div><div>El principio orgánico de los grupos sociales con sus intereses propios y peculiares lo acepta el <b>Fascismo</b>, aunque hasta ahora no ha sido llevado a la práctica como informador de un sistema de elección y representación. </div><div><br /></div><div>«Los fascistas—dice Bernard Pujo—estiman que una nación está compuesta de grandes grupos económicos y sociales, que tienen conciencia plena de los intereses superiores del país y dan a la vida nacional su auténtica-fisonomía.» (13) </div><div><br /></div><div>Hasta ahora en el sistema electoral italiano las asociaciones presentan sus candidatos, y el Gran Consejo fascista selecciona entre ellos a los más aptos. Una vez formada la lista, el cuerpo electoral se pronuncia sobre ella con un «sí» o un «no» exclusivamente. </div><div><br /></div><div>Este sistema va a desaparecer. Las elecciones celebradas el 25 de marzo del corriente año 1934 son las últimas que se ajustan a su patrón. </div><div><br /></div><div>Parece absurdo que el <b>Fascismo</b> siga eligiendo Parlamentos inorgánicos. En su admirable discurso de 15 de noviembre de 1933 ante el Consejo Nacional de Corporaciones, Mussolini expresa esta idea, que a tantos se nos ocurría. «En el fondo—dice—esta Cámara de Diputados es anacrónica hasta en su título, es un instituto que hemos encontrado y que es extraño a nuestra mentalidad, a nuestra pasión de fascistas. La Cámara «presupone un mundo que hemos derrocado», presupone pluralidad de partidos, y, de tarde en tarde, el «ataque a la diligencia». </div><div><br /></div><div>Subrayo las primeras palabras del último período, porque me relevan de todo comentario al expresar por boca del mismísimo Duce la paradoja que supone conservar un Parlamento así en el <b>Fascismo</b>. </div><div><br /></div><div>En el mencionado discurso apuntaba Mussolini el deseo de instaurar la representación corporativa, de tal manera que lo esencial poco o nada diferiría del sistema propugnado por el <b>Tradicionalismo</b>. «La Corporación—dice—no sólo debe cumplir su fin conciliatorio, sino que no veo inconveniente alguno en que se lleve a la práctica su misión consultiva. Ya se verifica el hecho de que cuando el gobierno debe tomar acuerdos de importancia consulte a los interesados. Y si mañana esa misión consultiva se convierte en obligatoria para ciertas cuestiones, no veo ningún mal en ello...» </div><div><br /></div><div>En un régimen de fortísimo Poder ejecutivo está de más una Cámara como la que todavía existe en Italia. Es un vestigio inútil del sistema derribado. Tiene una vida artificial, puesto que su único papel—como el del Senado—es examinar y aprobar las leyes, pero sin prerrogativas para oponerse a ellas, sojuzgada como está por la voluntad omnipotente del Gran Consejo. </div><div><br /></div><div>La misión de la futura Cámara corporativa no sabemos cuál será a punto fijo, ni si se la investirá de verdadera facultad legislativa. Para que fuera análoga a la que propone para España el <b>Tradicionalismo</b>, tendría que desempeñar dos oficios: el de instrumento legislativo y el de cortapisa a la soberanía real, manteniéndola siempre a raya dentro de su propia órbita. (14) </div><div><br /></div><div>No parece aventurado suponer que estos planes no están en la mente del Duce, dada la extraordinaria concentración de poder que en el <b>Fascismo</b> recae sobre el Jefe del Gobierno, con la merma consiguiente de las regias prerrogativas.</div><div><br /></div><div>***</div><div><br /></div><div>Una palabra siquiera sobre las Corporaciones, ya que <b>Fascismo</b> y <b>Tradicionalismo</b> quieren organizar corporativamente el Estado. </div><div><br /></div><div>La Corporación fascista reúne a patronos y obreros en las distintas actividades profesionales. Partiendo del principio de las clases sociales, la Corporación trata de armonizar sus intereses, haciéndolas colaborar y sometiéndolas al supremo órgano corporativo que es el Ministerio de Corporaciones. </div><div><br /></div><div>«Las Corporaciones—dice el Congreso de Roma—pueden considerarse como expresión de la solidaridad nacional y como medios de desarrollo de la producción.» </div><div><br /></div><div>El Estado fascista es el Estado corporativo. La realización positiva de ello ha tenido lugar creando la Corporación, que es el órgano mixto en que se reúnen los sindicatos de obreros y de patronos. Las creadas hasta ahora son ocho: Industria, Agricultura, Comercio, Banca, Transportes terrestres, Transportes marítimos, Turismo y Teatro. Sobre ellas está el Consejo nacional de Corporaciones, creado en abril de 1930. Y toda esta organización sindical la preside el Ministro del ramo. </div><div><br /></div><div>Como los principios del programa tradicionalista no se han puesto en práctica, desconozco qué desenvolvimiento daría a la idea central de su Régimen corporativo. Idea central que no es otra sino la de agrupar las clases con arreglo a los intereses sociales que representan y dar representación a los Cuerpos. </div><div><br /></div><div>La simplicidad de este principio se iría desenvolviendo al dar forma legal a las agrupaciones gremiales que dentro de cada brazo habrían de formarse.</div><div>
<br />
<br />
<br /><span style="font-size: x-small;">
(1) Vid. el artículo de Víctor Pradera en el <a href="http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0003640990&search=&lang=es" target="_blank">número 8 de <i>Acción Española</i></a>, titulado <i>El pacto social</i>.<br />
(2) Programa de la J. Suprema Tradicionalista.<br />
(3) Idem.<br />
(4) Vid. Giorgio del Vecchio: <i>Filosofía del Derecho</i>, pág. 296.<br />
(5) De esta <i>sociabilidad natural</i> deduce bellíssimamente Santo Tomás que hubiera habido Sociedad y Estado aunque no se hubiera cometido el pecado original, y por tanto que el Estado no es una necesidad nacida del pecado. (Vid. M. Grabmann: <i>Santo Tomás de Aquino</i>, pág. 140.) San Agustín es de la misma opinión. (Vid. M. Grabmann; <i>Filosofía medieval</i>, página 21.)<br />
(6) Vid. Vázquez de Mella: <a href="https://books.google.es/books?id=VAgqAQAAMAAJ&hl=es&pg=PA300#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Obras Completas, Volumen X</a>, página 300.<br />
(7). Cit. por N. Cebreiros: «El Fascismo», pág. 162.</span></div><div><div><span style="font-size: x-small;">(8) Vid. Augusto Messer: «De Kant a Hegel» («Historia de la Filosofía»), págs. 239 y 240.</span></div><div><span style="font-size: x-small;">(9) G. del Vecchio: «Estado fascista y viejo régimen», en el número 48 de «Acción Española». </span></div><div><span style="font-size: x-small;">(10) Para Hegel—dice Messer en el lugar citado—«la única constitución del Estado «verdadera» es la monarquía constitucional. Pero esta forma de gobierno está en él impregnada de un sentido conservador. No quiere que mayorías momentáneas, casuales, o las mudables opiniones del día, modifiquen las instituciones públicas históricamente producidas».</span></div><div><span style="font-size: x-small;">(11) La conocida frase de Voltaire expresa perfectamente su contenido: «L'amour de la patrie est lá haine de la patrie des autres.» </span></div><div><span style="font-size: x-small;">(12) Vid. Pendan, obra cit., págs. 157 y siguientes donde hay un clarísimo análisis del nacionalismo.</span></div></div><div><span style="font-size: x-small;">(13) B. Pujo: «Dix-ans de Fascisme», pág. 31.</span></div><div><span style="font-size: x-small;">(14) Dos características peculiarísimas del Tradicionalismo en este terreno son el «mandato imperativo» y el «juramento mutuo». Por el primero, el procurador en Cortes se obliga a cumplir la voluntad inviolable de los electores, ante los cuales responde como mandatario a mandante. El segundo lo prestan las Cortes al Rey y el Rey a las Cortes al comenzar el reinado, según rancio uso español.</span></div>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-63873934213905601452022-08-26T13:50:00.091+02:002022-08-29T23:53:52.693+02:00Tradicionalismo y fascismo (II) : Dios<div class="separator"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghoQGcL_Oje_enxstYhs-Jt76QdCVaZyA1Ra_vjivOElnJN0RpdzpRZlBpiSeOYBU-bloKt4aGtDNfa18xBGOQQ1OMFpVRRNNA56Fjr7hISqL5jKYtRPDWSNHD_vAaq5nNcQaHY9yRQ2M/s1600/Tradicionalismo+y+fascismo.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghoQGcL_Oje_enxstYhs-Jt76QdCVaZyA1Ra_vjivOElnJN0RpdzpRZlBpiSeOYBU-bloKt4aGtDNfa18xBGOQQ1OMFpVRRNNA56Fjr7hISqL5jKYtRPDWSNHD_vAaq5nNcQaHY9yRQ2M/s320/Tradicionalismo+y+fascismo.png" width="283" /></a></div>
<br />
<br />
<a href="http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0000533263&page=3&search=&lang=es" target="_blank">Folletón de EL SIGLO FUTURO</a><br />
<br />
por José Luis Vázquez Dodero (noviembre-diciembre de 1934)<br />
<br />
<b>DIOS</b><br />
<br />
En esta breve síntesis de los principios fascistas y tradicionalistas comenzar por lo más alto parece lo más sabio.<br /><br />
Dios está arriba, como coronamiento y cúpula. Dios está abajo, como cimiento y sillar. Dios, en fin —dice el Catecismo—, «está en todas partes».<br /><br />
Superado el escepticismo en que se basan las políticas agnósticas, Dios, «Causa Primera», tiene que estar presente informándolo todo para el político de la Verdad, porque Dios es la Verdad esencial.<br />
<br />
Al hombre, dicen los teólogos, le une un triple lazo con Dios: el «ontológico» como de efecto con su causa eficiente productora; el «lógico» como de imagen con la causa ejemplar a que se asemeja; el «ético» como de agente con la causa final, de cuya bondad participa. (1)<br /><br />
Estos derechos de Dios imponen un conjunto de deberes correlativos en el hombre, y de aquí nace la necesidad de la Religión, que «etimológicamente es «reatar», «religare», porque por ella nos volvemos a unir voluntariamente a Dios, a quien lo estamos ya por ley de causalidad (Lactancio); es rumiar, meditar, «releer», «relegere», porque ella nos hace recapacitar lo que le debemos a Dios (Cicerón); es «re-elegir», «religere», ya que por ella volvemos a elegir a Dios, a quien perdimos por el pecado (San Agustín). Cualquiera etimología que se adopte, «religión» es el «lazo que une el hombre a Dios». (2)<br /><br />
Este lazo no debe desaparecer para el Estado, porque el Estado se ordena al bien temporal de los individuos, a la consecución de sus fines terrenales; pero estos fines no deben conseguirse con descuido de los otros, más altos y superiores, y a los cuales, por consiguiente, todos deben hallarse subordinados.<br /><br />
Por eso, como dice un gran pensador, la antigua preocupación de «neutralidad» ha sido ya desechada definitivamente. «Podrán ser neutros una piedra o una planta. Un ser que piensa no puede ser nunca neutro, porque «pensar» es ya salir de la neutralidad. Y como los pueblos no son más que sumas de seres que piensan, necesariamente tienen un cierto pensamiento colectivo que los orienta en determinado sentido y los hace salir de la neutralidad.»<br />
<br />
Jesucristo dijo: «Yo soy la Verdad». Y toda la política del <i><b>Tradicionalismo</b></i> se basa en esas palabras. Política, decía, de Verdad objetiva, que arranca de la creencia en Aquel que dijo que Él era la Verdad. Es decir, política inspirada en el Evangelio. Más claro: política católica.<br />
<br />
En el sistema tradicionalista, Dios es el supremo punto de referencia. De Dios sale todo, a Dios se ordena y a Dios va. «Política de Dios», según la frase de nuestro Quevedo.<br />
<br />
El <b>Tradicionalismo </b>parte de la existencia de una institución, la Iglesia católica, depositaría de la Verdad revelada. Cree además que la maravillosa aportación de España a la civilización universal se ha hecho bajo la égida de la Iglesia. Y que todo lo genuinamente nacional es también genuinamente católico, resultando obra católica toda obra española.<br />
<br />
Esta es la tesis de Menéndez Pelayo sobre nuestra historia.<br />
<br />
Por consiguiente. Teología, Filosofía e Historia inspiran al<b> Tradicionalismo</b> español el primero de los lemas de su programa: Dios.<br />
<br />
Oigamos a los propios enunciadores del programa tradicionalista: «El primer lema del programa tradicionalista es Dios. Dios, de quien dimana todo poder. Dios, que para los tradicionalistas no sólo quiere decir la sumisión del hombre individual a la ley divina, sino la sumisión del Estado, de la sociedad civil organizada, de todos los poderes e instituciones públicos. Dios, en nuestro programa, quiere decir que el Estado es confesional y católico, naturalmente; que acepta, y proclama, y reconoce, y respeta los derechos de Dios en la sociedad, y, por tanto, los de su Santa Iglesia». (Junta Suprema Tradicionalista: «Dios, Patria, Rey».)<div><br /></div><div><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgx84T5E16xykfVSQaaUfcO_WhxMQ4f23u2oua19XoewxtQYc2tbj6hTJzvfMOYNtCNkcZpDAyBqUWvak92jDOvhXpKF-a9pTdNYDbjePM1RLQLJ3MWMW-GBagsgcH5oslq7tXGXJqPlw_ia-w3K6zSfp-awrg4MQbSe19tvkiTpi9vNRfQdCt53_4x/s785/Santisima-Trinidad-Viena_20210524150823450172.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="785" data-original-width="709" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgx84T5E16xykfVSQaaUfcO_WhxMQ4f23u2oua19XoewxtQYc2tbj6hTJzvfMOYNtCNkcZpDAyBqUWvak92jDOvhXpKF-a9pTdNYDbjePM1RLQLJ3MWMW-GBagsgcH5oslq7tXGXJqPlw_ia-w3K6zSfp-awrg4MQbSe19tvkiTpi9vNRfQdCt53_4x/w361-h400/Santisima-Trinidad-Viena_20210524150823450172.jpg" width="361" /></a><br />
<br />
El <b>Fascismo</b> y la idea de Dios; el <b>Fascismo</b> y la Religión; <b>Fascismo</b> y Catolicismo; la base religiosa del <b>Fascismo</b>: he aquí una serie de enunciados sobre los cuales se ha discutido acaloradamente entre personas de las doctrinas más variadas.<br />
<br />
Por una parte, todos aquellos que se sienten vejados porque un régimen que da de lado a la política democrática haya logrado para Italia innegables beneficios, procuran presentar el régimen mussoliniano como el más perfecto dechado de «reacción», o sea, como movimiento autoritario en que, por defenderse las instituciones de la civilización cristiana, la Iglesia toma parte y es coautora del «delito».<br />
<br />
La postura de los enemigos del <b>Fascismo</b> en este punto obedece a la política religiosa de Mussolini, y es natural que a pesar de los incidentes, dificultades y choques con la Iglesia que aquélla ha producido suscite el recelo y produzca el enojo de los adversarios del Catolicismo o del simple espiritualismo.<br />
<br />
Nacionalista y patriota, Mussolini ha exterminado la Masonería. Ha hecho desaparecer las Sociedades secretas. Ha proclamado la fuerza y la hermosura de la Religión católica. Ha concertado el Pacto de Letrán, reconociendo la soberanía de la Santa Sede. Ya antes de esto, advierte B. Pujo, el «duce» había procurado impresionar favorablemente al Vaticano. Cedió a la Vaticana la biblioteca del Palacio Chigi; devolvió el convento de Asís; restauró el culto en algunas iglesias; restituyó muchos conventos a las Ordenes religiosas; restableció la enseñanza religiosa en las escuelas primarias y el crucifijo en el Parlamento; reformó, en fin, en las postrimerías de 1925, la legislación referente a la Iglesia...<br />
<br />
Y, sobre todo, el Pacto de 11 de febrero de 1929, ratificado por el Parlamento el 13 de junio del mismo año... La solución de un problema sexagenario, con toda su extraordinaria transcendencia política y religiosa, es uno de los más grandes aciertos de Mussolini y un tanto que no podrán perdonarle los enemigos de la Iglesia.<br />
<br />
El articulo primero declara a la Religión católica única religión del Estado italiano. Italia reconoce (artículo 2.°) la soberanía internacional de la Santa Sede como un atributo inherente a su naturaleza y a las exigencias de su misión en el mundo. El territorio del Vaticano pasa a ser Estado soberano; etc., etc. (3)<br />
<br />
¿No son hechos más que suficientes para que las fuerzas ocultas de la revolución, la masonería, el judaísmo, todas las potencias del ateísmo se hayan desencadenado contra la política mussoliniana?<br />
<br />
Pero entre los católicos, el <b>Fascismo</b> tampoco ha dejado de suscitar recelos.<br />
<br />
En primer lugar, por algunas afirmaciones de Mussolini en su «Dottrina» y en sus discursos, donde abundan frases de una virulencia exasperada y terrible. La doctrina del Estado, que luego se expondrá; los conflictos con la Santa Sede, etc., han sido para muchos piedra de escándalo. Gran número de católicos no ocultan sus prevenciones y hacen escrúpulo así de algunos puntos de la doctrina fascista como de determinados actos de gobierno.<div><br />Nadie que leyera el artículo «Necesidad de navegar», publicado por Mussolini el 1 de enero de 1922 en el «Popolo d' Italia», podrá prometerse del autor otra cosa que una política religiosa jacobina. Véase hasta qué punto llega la cruda aspereza de la frase: «Nuestra batalla es más ingrata, pero más bella, porque nos obliga a contar sólo con nuestras fuerzas. Hemos desmenuzado todas las verdades reveladas, hemos escupido en todos los dogmas, despreciado todos los paraísos, burlado a todos los charlatanes —blancos, rojos, negros— que ponían en circulación drogas milagrosas para dar la «felicidad» al género humano. No creemos en los programas, ni en los planes, ni en los santos, ni en los apóstoles, y, sobre todo, no creemos en la felicidad, en la salvación, en la tierra prometida. No creemos en una solución única —sea económica, política o moral—, en una solución lineal de los problemas de la vida, porque —¡oh ilustres chantres de todas las sacristías! —la vida no es lineal, y jamás la reduciréis a un segmento limitado a las necesidades primordiales».<br />
<br />
Apuntadas antes las obras que el <b>Fascismo</b> ha llevado a cabo en el terreno religioso, conviene indagar los principios informadores de la política fascista en relación con la Religión.<br />
<br />
Cosa difícil, desde luego, porque el <b>Fascismo</b> afirma no tener principios y hace ascos de los programas.<br />
<br />
Para el <b>Fascismo</b>, como para Goethe, la Acción quiere ser antes que el Verbo. El examen de esta proposición nos llevaría demasiado lejos. Baste apuntar la dificultad de buscar en los «principios» las normas de la política fascista.<br />
<br />
«La dottrina —dice Mussolini— dev' essere non un' esercitazione di parole, ma un atto di vita». Con esta frase, que después habrá ocasión de comentar, basta y sobra para justificar lo que acabo de decir.<br />
<br />
En el parágrafo 12 de «La Doctrina del <b>Fascismo</b>» define el «duce» las relaciones entre el Estado y la Religión:<br />
<br />
«El Estado fascista —dice— no permanece indiferente respecto del hecho religioso en general ni de aquella particular religión positiva que es el Catolicismo italiano. El Estado no tiene una teología, pero tiene una moral. En el Estado fascista la religión está considerada como una de las manifestaciones más profundas del espíritu; en consecuencia, no sólo se la respeta, sino que se la defiende y protege. El Estado fascista no crea un «Dios» particular, como Robespierre quiso hacer en cierto momento, en los delirios extremos de la Convención; tampoco busca el medio de borrarlo de las almas, como hace el bolcheviquismo; el <b>Fascismo</b> respeta al Dios de los ascetas, de los santos, de los héroes, y también al Dios tal como se ve y se reza en el corazón ingenuo y primitivo del pueblo».<br />
<br />
Hay aquí dos frases profundamente antiliberales: «no sólo se la respeta, sino que se la defiende y protege»; «el Estado no permanece indiferente respecto al hecho religioso ni de aquella particular religión positiva que es el Catolicismo italiano».<br />
<br />
Por este lado se acerca al<b> Tradicionalismo</b>, pero añade: «El Estado no tiene una Teología, pero tiene una moral». En el sistema tradicionalista, el Estado es una concepción política con base teológica, y la moral del Estado dimana de esa concepción. Admitida la Revelación, para el <b>Tradicionalismo</b> todos los conceptos que integran su programa y que nutren sus postulados —desde los más altos hasta los más oscuros e insignificantes—, están sometidos al juicio de la Teología en cuanto no pueden hallarse en oposición con ella.<br />
<br />
Esta ejecutoria no es, a todas luces, compartida por el <b>Fascismo</b>. El <b>Tradicionalismo</b> tiene un concepto de la vida —y por consiguiente de la sociedad, del Estado, de la política, etc.— armónico con las normas del Evangelio y como son interpretadas por la Iglesia.<br />
<br />
Pero el <b>Fascismo</b> tiene una especie de «mística», como dice Georges Roux, y quiere tener una filosofía de la vida privativa y original.<br />
<br />
En primer lugar, el <b>Fascismo</b> vindica para su filosofía la nota de «espiritualista». Cinco veces al menos hace mención de ella Mussolini en la «Dottrina», y siempre para hacerla inseparable del <b>Fascismo</b>.<br />
<br />
«No se comprenderá —dice— el <b>Fascismo</b> en muchas de sus manifestaciones prácticas como organización de partido, como sistema de educación, como disciplina, si no se considerase a la luz de su modo general de concebir la vida. Este modo es espiritualista».<br />
<br />
«Se trata —añade en otro lugar— de una concepción espiritualista nacida de la reacción general del siglo contra el positivismo degenerado y marchito del ochocientos».<br />
<br />
Y también: «El <b>Fascismo</b> es una concepción religiosa en la que se considera al hombre en su relación inmanente con una ley superior, con una voluntad objetiva, que trasciende del individuo particular y lo eleva a miembro consciente de una sociedad espiritual».<br />
<br />
El <b>Fascismo</b> concibe la vida como un «combate continuo» (Mussolini), y por eso es una «reacción divina» que consiste «en juntarse como hermanos contra el egoísmo de todos y cada uno en nombre de un «duce» terrestre que vela sobro todo y sobre todos, en nombre de un Padre no terrestre que igualmente vela». («Roma Fascista», 21 junio 1931).<br />
<br />
El «duce» dice que el fascista «desdeña la vida cómoda», porque el <b>Fascismo </b>«aplica el espíritu antipacifista a la vida de los individuos» y «niega la ecuación bienestar-felicidad, que convertiría a los hombres en animales limitados a pensar en una sola cosa: alimentarse y engordar, reducidos a la pura y simple vida vegetativa».<br />
<br />
Todo este sentido ascético de la vida nace de una fe: «Si el <b>Fascismo</b> no fuese una fe, ¿cómo daría estoicismo y arrojo a sus adeptos? Sólo una fe que ha alcanzado altura religiosa, sólo una fe puede sugerir las palabras salidas de los labios ahora exangües de Federico Florio». («Vínculos de sangre» en el «Popolo d'Italia» del 19 de enero de 1922).<br />
<br />
El ministro de Justicia, Rocco, ha escrito unas palabras que vienen muy al caso y en las cuales no se distingue a punto fijo si quiere asignar al <b>Fascismo</b> una moral propia o si trata de hacerle suya la católica. «El Estado fascista tiene su moral, su religión y su misión espiritual en el mundo. Debe extender y defender la moralidad del pueblo. No puede mostrarse indiferente ante los problemas religiosos». Por el contrario, debe profesar y proteger la religión que juzga verdadera, esto es, la Religión católica». (4)</div><div><br /></div><div><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiFMgzSClYXTL_yrzUr1ESQ6-ceQgNfwWqVwQZwqBtvZpTMjE_4KwFAEJIi7yrgReOY9Wlp0NoTJk-Bs9YV9ASxs71IOs4utmTa7jbfMzqHJxS6tJp9C4oPbFwOlIeOrGGvZg-AZsmyhUK86lZi3RlDtTOJX0FJp6qfMsxzHkzAgurE4MRy9Z8nEF3N/s1200/BENITO-MUSSOLINI-Colorized.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="938" data-original-width="1200" height="250" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiFMgzSClYXTL_yrzUr1ESQ6-ceQgNfwWqVwQZwqBtvZpTMjE_4KwFAEJIi7yrgReOY9Wlp0NoTJk-Bs9YV9ASxs71IOs4utmTa7jbfMzqHJxS6tJp9C4oPbFwOlIeOrGGvZg-AZsmyhUK86lZi3RlDtTOJX0FJp6qfMsxzHkzAgurE4MRy9Z8nEF3N/s320/BENITO-MUSSOLINI-Colorized.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Benito Mussolini<br /></td></tr></tbody></table>
<br /></div><div>No he escaseado las citas sobre este punto, porque lo juzgo importantísimo. Ya que el <b>Fascismo</b> no tiene un programa o unas bases de doctrina definida, hay que acudir a las fuentes que parecen más auténticas, y las fuentes más auténticas son la «Dottrina» de Mussolini, sus discursos y artículos, y los de los primates del <b>Fascismo</b>, como el citado Rocco.<br />
<br />
¿Qué se deduce de lo expuesto? Trataré de explicarme en pocas palabras.<br />
<br />
El <b>Fascismo</b>, que nació de una necesidad biológica, como antes dije, a cuya satisfacción acudieron espontáneamente unos patriotas que percibieron la catástrofe en que su Italia iba a hundirse, no encarnó en hombres de formación doctrinal católica. Mussolini había sido socialista y no tenía fe religiosa: mal podía concebir el Estado, las instituciones políticas y la obra de gobierno a la luz de la Revelación.<br />
<br />
Pero Mussolini es un extraordinario hombre de Estado, y a su perspicacia no escapó todo el inmenso bien que de la Religión se sigue al pueblo y toda la falsa postura de las políticas nacidas al calor de la Revolución, con su secuela de persecución religiosa, ateísmo, escuela laica, etc., etc.<br />
<br />
El «duce» sabe, él mismo lo repite, que «la tradición es ciertamente una de las mayores fuerzas espirituales de los pueblos, por ser creación sucesiva y constante de su alma».<br />
<br />
El alma es «naturaliter christiana», y de aquí que un hombre bien intencionado, dispuesto a gobernar un pueblo sin prejuicios antirreligiosos, acierte muchas veces, porque necesariamente esa inclinación recta y esa perspicacia política le hacen dar en el clavo, supliendo otras luces.</div><div>
<br />¿Es el <b>Fascismo</b> puramente pragmático? ¿Pone la religión al servicio del Estado?<br />
<br />
No escudriñamos las intenciones de sus dirigentes; pero quizá sea difícil descargar a la política religiosa de Mussolini de esta acusación o nota de pragmatismo.<br />
<br />
Obsérvese que para el pragmatismo Verdad y Eficacia se confunden. Allí hay Verdad donde hay Eficacia; aquello es verdadero que es eficaz prácticamente. (5)<br />
<br />
Pues bien: a una política de servicio de los intereses religiosos sólo se llega por dos caminos: o porque el Estado descanse en una Teología, o porque parezca simplemente lo más justo, lo más conveniente y lo más «político».<br />
<br />
Parece demasiado dura la afirmación del abate Sturzo: «Dios es un buen servidor al servicio del <i>duce</i>, pero no otra cosa. Conviene tener a Cristo en la escuela como un elemento más para que los chicos se estén quietos». (6) Se respira cierta animosidad.<br />
<br />
Escuchemos todavía a Mussolini: «En lo político, el<b> Fascismo</b> quiere ser una doctrina realista, en sentido práctico; sólo aspira a resolver los problemas que se propongan históricamente por sí mismos y que muestren o sugieran su propia solución».<br />
<br />
De aquí puede, evidentemente, tomarse pie para afirmar el pragmatismo fascista, y por consiguiente que su política religiosa obedece exclusivamente a móviles políticos y razones de gobierno.<br />
<br />
Sin embargo —todo hay que decirlo— Mussolini ha querido sacudirse el sambenito de este oportunismo utilitario, y precisamente en lo que se refiere a su política religiosa. «Quienes sólo ven en la política religiosa del régimen fascista —dice— consideraciones de mera oportunidad, no han comprendido que el <b>Fascismo</b>, además de ser un sistema de gobierno, es, ante todo, un sistema de pensamiento».<br />
<br />
«Pragmático» llama al <b>Fascismo</b> su fundador y «duce» (7) el cual es, por otra parte, en dictamen de Goad, «un hombre «esencialmente» pragmático». (8)<br />
<br />
¿A qué carta quedarnos? ¿Es puro pragmatismo la posición del <b>Fascismo</b> respecto de la Religión católica?<br />
<br />
Mi parecer es que esto no interesa capitalmente. Tanto valdría como hacer pesquisa minuciosa en la conciencia de los gobernantes italianos.<br />
<br />
En cambio, puede afirmarse que ciertas manifestaciones y la falta de una concepción teológica que sirva de basamento a la doctrina fascista, corroboran en su política, objetivamente hablando, cierta tendencia a ir a la Verdad por el rodeo menos puro de la eficacia práctica.<br />
<br />
Mussolini, con una ignorancia impropia de su genio, dijo esta vaciedad que tan mal sonó en los oídos de Pío XI: «El Catolicismo es una secta judía de Palestina que sólo al pasar por Roma se hizo universal».<br />
<br />
Por eso el<b> Fascismo</b> no es una construcción levantada sobre la roca firme de la Teología.<br />
<br />
Por eso, mientras en el<b> Tradicionalismo</b> la Religión es una idea de fin, en el <b>Fascismo</b> se queda sólo en idea de medio.<br />
<br />
Por eso, en resolución, mientras para el Tradicionalismo el Estado es «esencialmente» católico, para el <b>Fascismo</b> es «esencialmente» fascista.<br />
<br />
Que Mussolini mismo, con unas palabras del discurso de 13 de mayo de 1929 en la Cámara de Diputados, nos pruebe esta afirmación, cerrando este capítulo: «... El Estado fascista reivindica plenamente su carácter ético: es católico, pero es fascista sobre todo, exclusivamente, «esencialmente» fascista. El catolicismo lo integra, y lo declaramos abiertamente, pero nadie piense, bajo especies filosóficas o metafísicas, cambiar las cartas sobre la mesa».<br />
<br />
<br />
<br />
<span style="font-size: small;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div>(1) Vid. «La Redención, síntesis de la Teología», por Adolfo A. Cuadrado, pág. 41.</span><br />
<span style="font-size: small;"><br /></span>
<span style="font-size: small;">(2) Vid. Gomá; «Valor educativo de la Liturgia», página 21.</span><br />
<span style="font-size: small;"><br /></span>
<span style="font-size: small;">(3) Vid. el interesantísimo volumen «Les transformations recentes du Droit public italien», de Trentin.</span><br />
<span style="font-size: small;"><br /></span>
<span style="font-size: small;">(4) Citado por Roux: «La Italia fascista», pág. 184.</span><span style="font-size: small;"><br /></span>
<span style="font-size: small;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div>(5) Vid. Augusto Messer: «Historia de la Filosofía: La Filosofía actual», pág. 109.</span><br />
<span style="font-size: small;"><br /></span>
<span style="font-size: small;">(6) Cit. por Pemán en «El hecho y la idea de la Unión Patriótica», pág. 294.</span><br />
<span style="font-size: small;"><br /></span>
<span style="font-size: small;">(7) En las últimas líneas del párrafo IX de la «Dottrina»: «De ahí el aspecto pragmático del Fascismo...»</span><br />
<span style="font-size: small;"><br /></span>
<span style="font-size: small;">(8) Goad: «El Estado Corporativo», pág. 108.</span><br /></div></div>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-72668956127609668142022-08-24T15:47:00.042+02:002022-08-29T23:54:11.017+02:00Tradicionalismo y fascismo (I) : una coincidencia<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh3JbstDd0uDaeq6CTe7QXE1UKQ2eexnUfkID7zCUTHc5BB0TlPe0QyuSZThnOMR0RRQD8cZcl553G1KYtbWpaCwpQ9uoQUfpLxQSNj7a6YOIhhvttLaQ4_MbUMdQJ6-w0ZwY3aF0r_xls/s1600/Tradicionalismo+y+fascismo.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh3JbstDd0uDaeq6CTe7QXE1UKQ2eexnUfkID7zCUTHc5BB0TlPe0QyuSZThnOMR0RRQD8cZcl553G1KYtbWpaCwpQ9uoQUfpLxQSNj7a6YOIhhvttLaQ4_MbUMdQJ6-w0ZwY3aF0r_xls/s320/Tradicionalismo+y+fascismo.png" width="283" /></a></div>
<br />
<br />
<a href="http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0000532692&page=3&search=&lang=es" target="_blank">Folletón de EL SIGLO FUTURO</a><br />
<br />
por José Luis Vázquez Dodero (noviembre-diciembre de 1934)<br />
<br />
<b>UNA COINCIDENCIA</b><br />
<br />
<i>Utinam frigidus esses, aut calidus! Sed quia tepidus es, et nec frigidus nec calidus, incipiam te evomere ex ore meo. (Apoc. III, 15-16)</i><br />
<br />
No recuerdo haber leído en ninguno de los muchos libros que se han dedicado al <b>fascismo</b> lo que éste supone en relación con la filosofía pura. Cualquier régimen político es la aplicación de unos principios que pertenecen al reino de la filosofía. Así como no hay hecho artístico sin una estética que lo informe, así tampoco hay política sin una metafísica que le sirva de basamento. Basta asistir a una discusión parlamentaria o escuchar un debate político para echar de ver al punto que la política, por mucho que quiera hacérsela ciencia práctica, ciencia y arte de realidades, tiene fundamentos especulativos, razones, principios, «porqués», instancias superiores adonde se acude como suprema justificación de los actos de gobierno.<br />
<br />
Nada escapa al imperio de la Idea, porque la Idea rige al mundo, como luego se explicará al hablar de<br />
la doctrina fascista.<br />
<br />
Según sea la metafísica profesada, así será la política que se propugne. Y más en concreto puede decirse que toda política depende, en principio, de una cuestión que en cualquier tratado de filosofía aparece entre otras muchas sin que reparemos con facilidad en su trascendencia. ¿Tiene el entendimiento humano aptitud para conocer la verdad? ¿Existe la certeza? He aquí un título previo que hay que discutir en política también, aunque muchos la crean ajena a él.<br />
<br />
No es cosa de hacer una larga divagación histórica sobre este punto. Me parece a mí que todas las políticas que han gobernado al mundo pueden dividirse con arreglo a este criterio sencillo y elemental: políticas que creen en la Verdad y políticas que no creen en ella; regímenes basados en la certeza, y regímenes escépticos respecto a la aptitud humana para alcanzarla.<br />
<br />
La Edad Media, era de fe, es un gran período histórico de creencia en la verdad objetiva. La misma creencia religiosa y metafísica, el mismo ímpetu genesíaco, nacido de la confianza del hombre en sus propias fuerzas, animan las cuestiones de la «Suma», y los títulos de las «Partidas», y los versos de la «Divina Comedia» y la imponente canción de piedra de las catedrales. Y así la política. Política de sillar de catedral y de terceto dantesco, sin vacilaciones en la perfección de sus once sílabas por verso.<br />
<br />
Cuando la Reforma en lo religioso y la filosofía criticista en lo metafísico hicieron vacilar el pilar intelectual de la política, surge lo que con nombre abarcador y sintético llamaremos Revolución. Entonces la política se basa en la igual impotencia de todos los hombres para conocer la verdad. La Igualdad de la Revolución era ésta; no la antinatural igualdad de condiciones en lo social.<br />
<br />
En las políticas de la Verdad todo descansa, por el contrario, en la igualdad potencial de todos los hombres para conocerla.<br />
<br />
Desde los Reyes Católicos hasta el siglo XVIII España tuvo esa política que conoce la Verdad y si es necesario la impone, porque la Verdad en política es el Bien al hacer aplicación de sus principios, y el Bien es el objeto a cuya consecución deben tender, como las flechas al blanco, todos los actos del mando. Llevada de esta filosofía optimista y vital, Isabel la Católica hizo una limpia temerosa al tomar posesión del trono, y después, absorbiendo y transformando la corrupción del Renacimiento pagano y de la Reforma disolvente, sus sucesores perpetuaron su política dotando a España de un Renacimiento y una Reforma privativos y autóctonos.<br />
<br />
El liberalismo se engendró de la fuga del alma propugnada por el luteranismo y del pesimismo de la filosofía criticista de Kant.<br />
<br />
La tragedia de esta política de verdades subjetivas y parciales, donde, una vez declarado incapaz el entendimiento, nadie tiene derecho al monopolio de lo verdadero, consiste en que la noción de lo verdadero, el concepto de verdad, va impreso en lo más hondo de la naturaleza humana.<br />
<br />
Así como los actos del entendimiento son siempre afirmativos, y no puede haber negación más que en cuanto al objeto sobre que versa la operación intelectual, así, por mucho que el hombre quiera huir de la Verdad, su concepto siempre le sigue, le acosa, le posee y le subyuga. Por eso el signo trágico del liberalismo consiste en la asombrosa paradoja de que mientras declara que no hay Verdad absoluta y sí sólo verdades relativas y subjetivas (con los mismos derechos, por consiguiente), está declarando implícita y explícitamente que hay una Verdad absoluta, que es él mismo: que es la verdad de que la Verdad no existe, y está reclamando para su tesis los privilegios y prerrogativas de la Verdad absoluta que niega. Es una tesis que se devora a sí misma, es un principio que devora sus consecuencias, como Saturno devoraba a sus hijos.<br />
<br />
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjyZWOCzYciAA-RgW-b7JjPQ_wuQdY3mZsiAJeV9QGpTQby53h-genLbseRIQIpBnHupcogbmt-TOIklBlyOXTflZUOWF7mzNvupb2eVs4lqWtv1Y0dMmprtqAj8kFvEn1FOi5Izn6RktA/s1600/Saturno+devorando+a+un+hijo.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjyZWOCzYciAA-RgW-b7JjPQ_wuQdY3mZsiAJeV9QGpTQby53h-genLbseRIQIpBnHupcogbmt-TOIklBlyOXTflZUOWF7mzNvupb2eVs4lqWtv1Y0dMmprtqAj8kFvEn1FOi5Izn6RktA/s320/Saturno+devorando+a+un+hijo.jpg" width="271" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><i>Saturno devorando a un hijo</i>, pintura de Francisco de Goya</td></tr>
</tbody></table>
<br />
Pues bien: he aquí que después de dos siglos de liberalismo, comienza a hablarse de su fracaso y comienzan sobre todo a percibirse síntomas evidentes de un saludable retomo a la Verdad objetiva.<br />
<br />
Rusia es uno de ellos. Rusia es el gran bofetón a la política agnóstica, porque siendo la última consecuencia lógica de sus postulados, ha sido escuela de absolutismo en lugar de espejo de agnosticismo, como era natural que fuera. La política de los soviets es en cierto modo política de Verdad objetiva, porque es política de Error absoluto. ¿No es significativo el hecho de que cuando un sistema llega al ápice de su desenvolvimiento se eche mano de sus principios antagónicos?<br />
<br />
Pero entre los novísimos movimientos, ninguno como el <b>fascismo</b> significa el deseo y la necesidad de volver por los fueros de la Verdad perdida. Bajo esos términos tan frecuentes de «Estado fuerte», «movimiento integral», «Estado totalitario», palpita la Verdad, que quiere otra vez sacudir sus alas y mostrar al mundo su faz radiante. «Estado fuerte» no es otra cosa sino un Estado en que Bien y Mal, Verdad y Error, Patria y Antipatria no tengan los mismos derechos ni reciban de una ley cruzada de brazos un trato idéntico. Es la enunciación de que la Verdad debe estar tutelada, protegida como el supremo bien social, contra cualquier asalto.<br />
<br />
Lo «totalitario» es, sencillamente, la expresión del deseo de que «todos» se agrupen estrechamente en torno a la Verdad, que es la Religión, que es la Patria, que es el Orden, que es la Propiedad.<br />
<br />
Esta parece una coincidencia digna de señalarse entre<b> Fascismo</b> y <b>Tradicionalismo</b>. El Tradicionalismo español no ha sido otra cosa sino una «Comunión» —«Comunión» se llama y no partido— que ha defendido frente a todos los accidentalismos, las fragmentaciones y los subjetivismos, la necesidad de salvar «totalitariamente» las esencias de lo español, el contenido de la civilización hispánica que ahora llamamos, con un vocablo perfecto, Hispanidad.<br />
<br />
El <b>Tradicionalismo</b> (1) es por esencia una política de Verdad objetiva. Por eso el <b>Tradicionalismo</b> ha propugnado siempre que frente a la doctrina de la Revolución, ya descarada y clara, ya disfrazada y en pequeñas dosis, no cabía más que oponer íntegra, perfecta y pura toda la Verdad y sólo la Verdad.<br />
<br />
La doctrina de la libertad que de aquí se deriva es sustancialmente la que informa la política fascista. Para cuanto redunde en beneficio de la Verdad y por consiguiente del Bien, libertad plena; para el Error y el Mal, cadenas.<br />
<br />
«La libertad del individuo —dice expresando estos conceptos un poco vagamente uno de los acuerdos del Congreso fascista de Roma— encuentra un doble límite en la libertad de las otras personas jurídicas y en el derecho soberano de la nación a vivir y desarrollarse.»<br />
<br />
Los partidos políticos desaparecen lo mismo en el<b> Fascismo </b>que en el<b> Tradicionalismo</b>, porque los partidos implican una concepción del Estado en que los supremos intereses de la Verdad se posponen a sus propios mezquinos intereses.<br />
<br />
El <b>Fascismo </b>es obra de un «partido» que sigue impropiamente llamándose tal, puesto que el nombre más adecuado dada la ideología que lo nutre, sería el equivalente al de Comunión, que usa el <b>Tradicionalismo</b> español.<br />
<br />
El asco, la repulsa más violenta hacia los partidos arranca a Mussolini apostrofes virulentos contra la política que ellos representan, como arrancó a la elocuencia de Mella magníficos acentos de indignación patriótica.<br />
<br />
«Los partidos de oposición —dice Goad acertadamente justificando la actitud fascista— con sus objeciones artificiales y sus tergiversaciones de los fines del gobierno mediante una Prensa partidista subvencionada, sólo crean dudas y desconfianzas, oscureciendo y debilitando la voluntad nacional. No hay nación, como no hay individuo, que pueda prosperar si tiene el ánimo constantemente debilitado y embargado por tales consideraciones secundarias. Además, el gobierno de partidos, por su misma esencia, contribuye a crear una actitud mental de oposición y de crítica, estorbando la confianza y la cooperación constructiva.»<br />
<br />
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjERe4-3ymGSC51-M2NN5fMyRyjEL_kYQg4gbqOTVLK0-AP45zNbsZkgLfTT0pAeRT5kMg1EKLvpm4SxmqVWrnho3R376c4wB9_w2xc_vVy2ex3blhkRvUkRWuun-nvwnApQOjarw9te04/s1600/D.-Juan-Vazquez-de-Mella.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjERe4-3ymGSC51-M2NN5fMyRyjEL_kYQg4gbqOTVLK0-AP45zNbsZkgLfTT0pAeRT5kMg1EKLvpm4SxmqVWrnho3R376c4wB9_w2xc_vVy2ex3blhkRvUkRWuun-nvwnApQOjarw9te04/s1600/D.-Juan-Vazquez-de-Mella.jpg" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">D. Juan Vázquez de Mella (1861-1928)</td></tr>
</tbody></table>
<br />
Y en este mismo sentido había dicho ya Vázquez de Mella que la única aspiración de los partidos era el Poder, y por eso en las discusiones se pone de manifiesto que no separan, a los que en él turnan, diferencias substanciales de principios, sino sólo de procedimientos y de práctica; de manera que la bandera y la enseña común a todos —la de la Patria— no existe, porque la destrozan con sus intrigas, matando todas las grandes unidades morales.<br />
<br />
En fin, Mussolini en su «Dottrina del Fascismo» escribe esta frase: «Un partido que gobierna totalitariamente una nación, es un hecho nuevo en la historia».<br />
<br />
Lo que prueba que el partido fascista no quiere ser, aunque se llame tal, «partido», sino «Comunión» patriótica y nacional cuyos intereses se confundan con los intereses de la patria.<br />
<br />
Coinciden, pues, <b>Tradicionalismo</b> y <b>Fascismo</b> en ser políticas que rechazan el escepticismo como principio informativo, partiendo de la aptitud humana para conocer la Verdad, y para conocerla con certeza. Probada esta aptitud y admitida esta certeza, nace la «seguridad» en que determinados principios son salvadores, y de esta «seguridad» se engendra la negación de beligerancia a los principios contrarios, «seguro» germen de mal y de ruina.<br />
<br />
Es decir, para los dos movimientos hay un depósito sagrado de cosas intangibles que no pueden jamás, en nombre de una teoría o una opinión cualquiera, quedar a merced de las veleidades de los que las sustentan.<br />
<br />
Para el <b>Fascismo </b>como para el <b>Tradicionalismo</b>, la democracia es irracional, porque somete la calidad al número y porque concede pretendidos derechos de opinión sobre que no constituyen materia opinable. Se puede turnar sobre lo accidental; sobre lo sustancial, nunca afirman ambos. Se puede «opinar» sobre el estilo artístico que convenga a una determinada casa; pero en cuanto a que los cimientos estén arriba, no hay opinión posible, porque edificar «sobre» cimientos es un principio arquitectónico sustancial e inderogable.<br />
<br /><b>
Fascismo</b> y <b>Tradicionalismo</b> se basan en el fracaso de los dogmas revolucionarios: de la «Libertad», que no es un fin, sino un medio; de la «Igualdad», que no existe más que espiritualmente, pero en modo alguno en lo social y en lo político; de la «Fraternidad», que es un mito si antes se suprime a Dios como fundamento de la moral, pues sólo en Él, como Padre común, somos los hombres hermanos.<br />
<br />
El <b>Tradicionalismo</b> se adelantó al <b>Fascismo</b> y supo profetizar las consecuencias de un sistema que le haría nacer.<br />
<br />
El nacimiento del <b>Fascismo</b> fue una necesidad biológica elemental Sólo cuando se habían apurado las consecuencias del liberalismo y cuando la nación estaba a punto de aniquilarse, se pensó en instaurar la firmeza de lo inconmovible.<br />
<br />
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhwVqmcJlJ1YdS2CrxLh90xyy1QuiOZwt-tneNbWyPP8kPxNXAmC3m4zUWfainNTPvp9tK62rkplJE8Vb0SrMNziYDOZH452JzK6P5WTOpSdIDK5eP6hkriAB7CTCrTGy30gpafb60AbTE/s1600/marcha-fascista-sobre-roma-de-1922.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="222" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhwVqmcJlJ1YdS2CrxLh90xyy1QuiOZwt-tneNbWyPP8kPxNXAmC3m4zUWfainNTPvp9tK62rkplJE8Vb0SrMNziYDOZH452JzK6P5WTOpSdIDK5eP6hkriAB7CTCrTGy30gpafb60AbTE/s320/marcha-fascista-sobre-roma-de-1922.jpg" width="320" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Marcha fascista sobre Roma (1922)</td></tr>
</tbody></table>
<br />
Por el contrario, el <b>Tradicionalismo</b> tiene una línea clara e ininterrumpida de admoniciones y advertencias desde que comenzó lo que Maeztu llama la «dispersión de la Hispanidad», es decir, cuando empezaban a instaurarse los «principios» y no habíamos apurado todavía las «consecuencias».<br />
<br />
De Forner a Maeztu, pasando por el «Rancio», Donoso, Balmes, Mella y el incomparable Menéndez Pelayo, una legión de cíclopes ha puesto sus espaldas para apuntalar la España que se cuartea.<br />
<br />
Como al <b>Tradicionalismo</b> en España, al <b>Fascismo</b> italiano no le han valido las fórmulas medias de transacciones y acomodamientos. Ambos tienen la mirada puesta en la consecución íntegra del bien de las naciones. La transacción y el pacto sólo son buenos en circunstancias especialísimas. Erigirlos en sistemas es empequeñecerse y hacer ganar terreno al adversario.<br />
<br />
A <b>Fascismo</b> y <b>Tradicionalismo</b> les resulta igualmente extraña la candidez con que Dom Sturzo escribe estas palabras que cierran su libro sobre Italia y el <b>Fascismo</b>:<br />
<br />
«<i>En Italie aussi, l'heure sonnera de l'avenèment d'une démocratie généreuse et progressive qui, par les methodes de liberté», reconciliera tous les partis et rendra au pays, vis a vis de l'Europe, son vrai caractère de grande puissance pacifique.</i>» (2)<br />
<br />
Está en boga hablar de la vuelta a la Edad Media. Son ya lugar común las citas de Berdiaeff en esta materia. Berdiaeff en su «Nueva Edad Media» no ha descubierto nada nuevo. Su éxito se debe a que ha puesto de relieve unas cuantas verdades filosófico-histórico-políticas con extraordinaria brillantez.<br />
<br />
Pero ¿qué significa la vuelta a la Edad Media? Es inevitable tocar este punto al hablar de <b>Fascismo </b>y <b>Tradicionalismo</b>. Nos suministrará una prueba más de esta «coincidencia» general que venimos examinando entre ambos movimientos.<br />
<br />
Ruiz del Castillo concibe los términos Edad Media y Renacimiento como términos genéricos o modos vitales que se repiten en el curso de la historia. Las Edades Medias son épocas constructivas, de ordenación, jerarquía y trabajo; épocas de fe y de entusiasmo. Los Renacimientos son, por el contrario, eras de dispersión y particularismo destructivo en que el hombre derrocha paganamente y sin norte fijo, con escepticismo destructor, los tesoros acumulados en las edades de parsimonia<br />
y cordura. (3)<br />
<br />
Por consiguiente, como dice Pemán, cuando se habla de vuelta a la Edad Media no se debe entender la vuelta a todo lo que en esa Edad se aceptaba, sino al ideal genérico y al «modo» vital que la Edad Media encarna y representa. (4)<br />
<br />
He aquí por qué, de un modo amplio y general. <b>Fascismo</b> y <b>Tradicionalismo</b> son movimientos coincidentes. Uno y otro nacen al final de una gran orgía renacentista. Uno y otro son una llamada de atención al hombre, para que, recogiéndose en sí mismo, contemple las cosas, otra vez, «sub especie aetemitatis». Uno y otro miran, como dioses términos hifrontes, con una cara al pasado y con otra al porvenir.<br />
<br />
<br />
<br />
<span style="font-size: small;">(1) Aunque no es necesario, se hace la salvedad de que siempre que nombro <i><b>Tradicionalismo</b></i> me refiero única y exclusivamente a la doctrina política española, que no tiene nada que ver con la escuela filosófica francesa del mismo nombre.</span><br />
<span style="font-size: small;"><br /></span>
<span style="font-size: small;">(2) Dom Sturzo: «L'Italie et le Fascisme». Traducido al francés por Marcel Prebot.</span><br />
<span style="font-size: small;"><br /></span>
<span style="font-size: small;">(3) Esta bella teoría recuerda, por su ritmo cíclico uniforme la famosa de los «corsi e ricorsi», de Juan Bautista Vico. Es sabido que Vico cree que tres especies de edades alternan periódicamente en la Historia: la «divina», la «heroica» y la «humana», a las cuales corresponden politicamente la «teocracia», la «aristocracia» y la «democracia».</span><br />
<span style="font-size: small;"><br /></span>
<span style="font-size: small;">(4) El ilustre jurista Giorgio del Vecchio, uno de los más autorizados tratadistas contemporáneos de Filosofía del Derecho, ha publicado un interesante artículo: «Estado fascista y viejo régimen», en el que defiende al <b>Fascismo</b> de la acusación de reaccionario. Tomando la expresión «medievalismo», no en sentido lato como acabo de emplearla, sino estricto, presenta al <b>Fascismo</b> como un movimiento original y «sui géneris» ajeno a la concepción jurídica medieval. (Vid. «Acción Española», <a href="http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0003669977&search=&lang=es" target="_blank">número 45</a>).</span>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-32337961985189874172022-03-10T23:47:00.003+01:002022-03-10T23:57:35.375+01:00A los mártires de la Tradición<p>Un año más, los integrantes del Círculo Tradicionalista de Granada «General Calderón» hemos celebrado la fiesta de los mártires de la Tradición, instituida por Don Carlos VII. </p><p>Hoy, 10 de marzo, fecha ineludible para todo carlista, hemos acudido al cementerio municipal de San José para honrar a los que ofrecieron sus vidas por nuestra sacrosanta Religión y nuestra amadísima Patria, la inmortal España.</p><p>Ante la tumba del requeté Ángel Vidal Muñoz, muerto en campaña durante la Cruzada de Liberación a los 18 años de edad, nuestro correligionario Javier A. ha depositado una vela encendida. Después de un momento de duelo y tras el rezo de un Padrenuestro, Avemaría y Gloria por el eterno descanso de los mártires de la Santa Causa, hemos leído el siguiente poema de <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Florentino_Soria_L%C3%B3pez" target="_blank">Pedro Sánchez Eguzquiza</a>:</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjUtUzUYzJFz7C_2AhAU0pvumBvQaXnrsrtsqQQYfulOtglslRBL5mLIsxAqHW7RrlJsB9MgZMbUkmWHK_OoP1cmS4lmEmhXPrLhK5I9W1nTf-ITBN1s3oTiOB7Abap3skgse-sGxIvoqUelke2QVqtAbX3nFMIRUGiNgma5Ch7lsRK0itZFOgT52j4" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="1512" data-original-width="2016" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjUtUzUYzJFz7C_2AhAU0pvumBvQaXnrsrtsqQQYfulOtglslRBL5mLIsxAqHW7RrlJsB9MgZMbUkmWHK_OoP1cmS4lmEmhXPrLhK5I9W1nTf-ITBN1s3oTiOB7Abap3skgse-sGxIvoqUelke2QVqtAbX3nFMIRUGiNgma5Ch7lsRK0itZFOgT52j4" width="320" /></a></div><br /><br /><p></p><p><b>A los mártires </b></p><p>Musa cristiana, dulce compañera<br />de mi existencia que el pesar consume, <br />deja oír tu armonía placentera <br />y no permitas que el dolor me abrume. <br />Préstame tus acentos soberanos <br />para que eleve canto resonante <br />en honor de los mártires hispanos <br />que, en lid horrisonante, <br />por <i>Dios</i> y por el <i>Rey</i> y por la <i>Patria </i><br />la sangre de su pecho derramaron <br />é infamias infinitas repararon. </p><p>Del seno oscuro de nación extraña <br />se extendieron mefíticos errores <br />que invadieron á España <br />incubando miserias y dolores. <br />Hombres funestos de ambición impía, <br />cegados por sacrílego delirio, <br />por diabólica vía <br />la nave de la patria condujeron <br />y en bárbaro martirio <br />sus hijos más notables perecieron. <br />Corrió sangre inocente <br />al pie de los altares; <br />levantó la impiedad su altiva frente <br />derrocando las leyes seculares <br />que á España hicieron colosal y fuerte <br />y en toda su extensión reinó la muerte. <br />Muerte en almas, y muerte en corazones; <br />muerte moral de las inteligencias; <br />muerte de las antiguas tradiciones, <br />muerte de las virtudes y las ciencias; <br />muerte en el llano, muerte en la montaña; <br />muerte en pueblos, aldeas y ciudades, <br />muerte del cenobita con vil saña: <br />muertes sin fin; sin fin de iniquidades.</p><p>Por salvar los principios homicidas <br />que á la patria arrastraban á la tumba, <br />en hórrida balumba, <br />sacrificaron sin piedad las vidas, <br />que eran á un tiempo su sostén y ornato; <br />perdieron las colonias; <br />con fiero desacato <br />inundaron los templos <br />con el lodo de torpes ceremonias; <br />las sagradas riquezas <br />legado de otras épocas mejores,<br />las áureas bellezas <br />que produjeron ínclitos mayores <br />de nuestra raza prez y justa gloria, <br />redujeron á míseras cenizas; <br />y do estendía el arte sus fulgores, <br />do la virtud intrépida victoria <br />conseguía del vicio y la flaqueza; <br />do místico plantel de puros lirios <br />exhalaba perfumes celestiales, <br />de la naturaleza <br />triunfando y' de sus lúbricos delirios, <br />ángeles pareciendo y no mortales, <br />horrenda asolación tendió sus alas <br />y el vicio se adornó con torpes galas. </p><p>Un río de ambición y podredumbre <br />en que flotaban sórdidas maldades <br />cubrió los horizontes españoles. <br />Inmensa muchedumbre <br />de crímenes, traiciones, falsedades <br />el infierno abortó, ahogar buscando <br />en su licor abyecto y nauseabundo <br />á España, cuya fe iluminó al mundo. <br />Y creyeron gozosas las naciones <br />que España fenecía <br />entre las convulsiones <br />y espantosa agonía <br />que la agitaron con terrible espanto; <br />y el averno llenóse de alegría <br />al ver á su enemiga en tal quebranto, <br />y el ángel tutelar de las Españas, <br />cubierto el rostro de tristeza suma, <br />batió sus alas de nevada pluma, <br />y del suelo amasado con hazañas <br />huyó con rapidísima presteza<br />sumiéndose del cielo en la grandeza. </p><p>¡<i>Finis Hispaniæ</i>! parecía escrito<br />con rojos caracteres en las nubes,<br />pero al soplo bendito <br />del Criador que mora entre querubes, <br />de la española tierra <br />brotaron en legiones <br />héroes incontables <br />que el llano, la ciudad y la alta sierra <br />ilustraron con bélicas acciones, <br />y rescataron con su sangre pura <br />á la patria con actos de heroísmo <br />salvándola piadosos del abismo. </p><p>¿Quién, mártires sagrados <br />cantar pudiera con potente acento <br />los hechos esforzados, <br />el cristiano ardimiento, <br />el desprecio de bienes terrenales, <br />la audacia y el denuedo temerarios <br />que mostrasteis en luchas desiguales<br />pasmando á vuestros mismos adversarios? <br />En la impía centuria <br />que amontonó las ruinas por do quiera <br />con satánica furia, <br />sólo vosotros con fulgente lumbre <br />brilláis como del sol la roja esfera; <br />sólo vosotros renováis la gloria <br />de aquella raza que formó la urdimbre <br />de nuestra patria, extraordinaria historia. </p><p>¡Qué cuadro de heroísmo nos presentan! <br />Quién de prosapia noble, <br />abandona su espléndida morada <br />do brillantes se ostentan <br />en armonía doble <br />las glorias de la ciencia y de la espada, <br />y ni las continuadas privaciones <br />de vivir en movibles campamentos; <br />ni la falta del lujo y atenciones <br />que siempre rodearon su existencia <br />ni los combates árdidos, cruentos <br />en que, soldados rasos, toman parte <br />con pasmosa bravura y competencia; <br />ni el ostracismo largo <br />donde, fieles siguiendo á su estandarte, <br />comen el pan amargo<br />que les ofrecen extranjeras gentes<br />amenguan su entusiasmo de creyentes</p><p>Quién de amada familia rodeado <br />expone con viveza <br />de la patria los males; <br />toma luego las armas del soldado <br />é imitando sus hijos su entereza <br />el hogar, entre gritos maternales, <br />unidos y resueltos abandonan <br />y en tremebundas lides <br />elocuentes pregonan <br />su valor de cristianos adalides. </p><p>Junto al cadáver del amado esposo <br />yace llorando, inconsolable madre <br />sin que su corazón halle reposo; <br />y al ver aproximarse al hijo triste, <br />enjugando su llanto <br />le dice: «Las pisadas de tu padre, <br />de quien honor y vida recibiste, <br />sigue, hijo mío; sin pavor ni espanto; <br />por nuestra Patria y Religión pelea. <br />No temas á la muerte <br />ni la mísera suerte <br />que me aguarda. De Dios cumplida sea <br />la voluntad, que allá en el cielo <br />será recompensado nuestro duelo.» </p><p>Y jóvenes y ancianos <br />y hasta niños, doncellas y mujeres <br />tan heróicas proezas realizan <br />que pasmaran á griegos y espartanos <br />á quienes las historias eternizan. <br />Ilustres soberanos, <br />con pobre solio y sin igual corona <br />renuevan las hazañas de Pelayo, <br />y en la abyección que á España desmorona <br />luchan sin tregua, luchan sin desmayo <br />seguidos de entusiastas servidores, <br />de sabios y guerreros <br />que ora con los fulgores <br />de su pasmosa ciencia; <br />ora con los severos <br />acentos de su vívida elocuencia; <br />ante la ,juventud que los admira; <br />ante el público absorto y suspendido <br />de sus mágicos labios;<br />ante la plebe ciega que delira<br />vomitando satánicos agravios;<br />en los campos sangrientos de batalla,<br />á la impiedad triunfante<br />y al vicio dominante<br />se oponen con valor fuerte muralla.</p><p>Y mueren sonrientes, <br />ora besando santo escapulario <br />mientras estallan bombas estridentes <br />que sin cesar envía su adversario; <br />ora envueltos en mísera pobreza <br />por no reconocer el despotismo, <br />continuando con férrea entereza <br />á su bandera inmaculada fieles; <br />ya de rudo ostracismo <br />apurando las hieles; <br />ya de mundana gloria <br />menospreciando el brillo, <br />siempre obedientes á la ley cristiana, <br />siempre leales á su gran caudillo. </p><p>¡Y cuántos son los mártires insignes! <br />¡Cuantos héroes surgen en tu seno <br />querida é infelice patria mía! <br />¿Quién los podrá contar? ¿Quién las hazañas <br />á nuestra edad indiferente extrañas, <br />que realizan con valor sereno <br />cantara con insólita armonía? <br />Entonces del sepulcro do te asientas <br />surgirías, oh España desdichada; <br />entonces por completo renovada <br />lavarías las múltiples afrentas <br />que extranjeras naciones <br />y de hijos desgraciados las traiciones <br />te arrojaron con torpe vilipendio, <br />mancillando tu gloria refulgente <br />y á tus plantas abriendo abismo hirviente. </p><p>¡Oh mártires sagrados! desde el cielo<br />donde gozáis la bienaventuranza, <br />después de vuestras luchas en el suelo, <br />á España proteged con mano fuerte. <br />De la sima do ciega se avalanza, <br />de la región oscura, de la muerte<br />donde la arrastra, bárbara locura, <br />apartadla piadosos; <br />y á vuestros esforzados descendientes,<br />reliquias de la raza más bravía, <br />á cuantos van en pos de la bandera <br />que defendisteis con tesón valientes, <br />enviad una chispa de la hoguera <br />que vuestro ser abrasa, <br />inspiradles aquel viril denuedo <br />aquel valor sin tasa <br />con que. firme la mano, el pecho ledo, <br />combatisteis las turbas liberales <br />que inundaron á Espata en duros males. </p><p>Y tú, Rey Caballero <br />de la impiedad acérrimo adversario, <br />creyente fiel, magnánimo guerrero, <br />en grandiosas empresas temerario, <br />tú que sufriste la amargura intensa <br />de morir tras larguísimo destierro <br />sin salvar á la patria que se hunde; <br />hoy que has hallado eterna recompensa, <br />bélico ardor en nuestro pecho infunde <br />y suplica al Señor llegue la hora <br />de que, siguiendo tus heroicas huellas, <br />aniquilemos la horda destructora <br />que á nuestra patria destrozar pretende. <br />De tu hijo y sucesor haz que sigamos <br />las órdenes resueltas que acatamos, <br />y á la impiedad que por do quier se extiende <br />sin encontrar en su carrera valla, <br />venceremos en ardida batalla. </p><p>Marzo de 1910.</p><p>(Cantos a la Tradición, por Pedro Sanchez Eguzquiza)</p>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-35560174155534829042022-03-04T03:23:00.013+01:002022-03-04T10:53:30.136+01:00El General español «No importa» en el espíritu de resistencia ucraniano<p>En unas recientes <a href="https://twitter.com/PabloIglesias/status/1499001284111867905" target="_blank">declaraciones en televisión</a>, Pablo Iglesias ha venido a decir que los ucranianos no tienen nada que hacer en la guerra abierta que les ha declarado Vladimir Putin. Supuestamente, al preguntarles sobre el particular, unos militares amigos de Iglesias le habrían dicho: </p><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><p>—«Es imposible [que el Ejército ruso sea derrotado], dada la correlación de fuerzas que hay entre el Ejército ruso y el Ejército ucraniano y las milicias civiles». </p><p>—«¿Cuál es la única manera de derrotar al Ejército ruso?»—, habría inquirido el exvicepresidente podemita. </p><p>—«Una misión militar internacional liderada por Estados Unidos con otros países de la OTAN».</p></blockquote><p>Ante esta presunta respuesta, Iglesias añade: «Estaríamos hablando de una conflagración mundial con una potencia que tiene armamento nuclear». </p><p>A nadie se le escapa que el antiguo dirigente del partido morado, punta de lanza del aberrosexualismo y el feminismo radical en nuestro país, amigo de etarras y separatistas de todo pelaje, está al servicio del eje Moscú-Teherán-Caracas, del que ha recibido durante muchos años suculenta financiación y apoyo propagandístico, por lo que no nos sorprende que su discurso derrotista para los ucranianos sea el que interesa a sus aliados.</p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEim3DuwwUdY-A7ouHluM_M9QkfvoGLSFfhxDbDjMc3DGOwmujMcuGdS599tOkaRoQN4CBTsfO1ZCI3tvCcd7ktPIqiDKw5pY4yYNAafi0lobPSKSUj4Oe3P-gtzjMMhX3slTvr8YnPB_kIecOIoKm0wUGpK4INhoDwrhewqCVyFlDIENQ_v4KRznu5V" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img alt="" data-original-height="370" data-original-width="656" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEim3DuwwUdY-A7ouHluM_M9QkfvoGLSFfhxDbDjMc3DGOwmujMcuGdS599tOkaRoQN4CBTsfO1ZCI3tvCcd7ktPIqiDKw5pY4yYNAafi0lobPSKSUj4Oe3P-gtzjMMhX3slTvr8YnPB_kIecOIoKm0wUGpK4INhoDwrhewqCVyFlDIENQ_v4KRznu5V" width="320" /></a></div>Preciso es recordar en este contexto la <a href="https://www.aciprensa.com/noticias/obispo-denuncia-grave-persecucion-a-catolicos-en-ucrania-61323" target="_blank">persecución que sufren los católicos</a> desde 2014 en las zonas controladas por los cismáticos prorrusos. Al producirse la invasión putiniana el pasado 24 de febrero, el sacerdote ucraniano Basil Kovpak, de la Fraternidad de San Josafat, vinculada a la Fraternidad Sacerdotal San Pío X, ha exhortado en <a href="https://www-saintjosaphat-org.translate.goog/novyny/tradyciia?tx_news_pi1%5Baction%5D=detail&tx_news_pi1%5Bcontroller%5D=News&tx_news_pi1%5Bnews%5D=5145&cHash=67fbdefc45b365d90fb0795659907d84&_x_tr_sl=uk&_x_tr_tl=es&_x_tr_hl=de&_x_tr_pto=wapp" target="_blank">un comunicado</a> a los fieles católicos de la Tradición «a formar un frente espiritual, a tomar el escudo de oración, el Santo Rosario, y no soltarlo hasta la victoria final». <p></p><p></p><p></p><p>Entretanto, el sobrevenido «pacifista» Iglesias, que tanto se ha destacado siempre por su ardiente defensa del bando frentepopulista en la guerra de España y del bando soviético en la Segunda Guerra Mundial, manda el siguiente mensaje al pueblo ucraniano: «lo mejor que pueden hacer es rendirse incondicionalmente a Putin, porque no tienen nada que hacer».</p><p>Probablemente Pablo Iglesias no haya oído hablar nunca del General <i>No importa</i>. La historia de España no es su punto fuerte y menos los episodios que tienen que ver con nuestras grandes gestas, de las que abomina. Pero recordemos quién fue ese General. El periódico realista <i>El Procurador General de la Nación y del Rey</i>, en su <span style="color: #0000ee;"><u>número 139, correspondiente al 16 de febrero de 1813</u></span>, lo explicaba:</p><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px;"><p style="text-align: left;">Preguntaba un oficial frances en una tertulia de españoles qual era el mejor General de quantos sostenian la causa de la España. Cada uno de los tertulios fué citando á aquel que en su juicio tenian por mejor: pero el oficial Frances á todos respondia. No es ese. Volvieron á citar otros y otros, y volvió, el frances á repetir lo mismo: hasta que apurados los nombres de todos los generales no tuvieron ya los Españoles General alguno que citar. Entonces el oficial Frances les habló en estos ó semejantes términos. Señores, el General mejor que tiene España, y el que al fin ha de salvarla es el General <i>No importa</i>. Este, este es el que á nosotros nos está haciendo las muelas, el que nos aburre, y el que ultimamente ha de dar con nosotros y nuestro Emperador al traves. Ganamos una batalla que creemos decisiva.... No importa, dicen los Españoles, si esa se perdió, otra se ganará. Ocupamos una Provincia.... No importa: otro dia la desocuparán. Dispersamos un exército.... No importa: en tal parte se reúne otro. Tomamos una plaza.... No importa: mañana ó el otro se reconquistará. Hacemos en fin qualquiera genero de progreso…. No importa, y con este <i>No importa</i> nos resisten, nos aniquilan, nos desesperan. Por eso digo que el gran general que ha de salvar la España, es el <i>No importa</i>. </p></blockquote><p>Ucrania parece tenerlo todo en contra. La OTAN no va a intervenir directamente. Enfrente tienen una potencia militar con armamento nuclear, muy superior a sus capacidades, que se ha anexionado ya con éxito parte de su territorio. Lo más que pueden pedir son oraciones, ayuda humanitaria y armas. No otra cosa pedían los requetés en la Cruzada: «Mientras quede un terrón por conquistar, una sola cosa pediremos: fusiles para nuestros voluntarios y frentes donde combatir», <a href="http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0030010592&page=4" target="_blank">escribía en diciembre de 1936</a> el periodista tradicionalista granadino Fernando de Contreras y Pérez de Herrasti.</p><p></p><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgFFKfBk01_nqxmP5b0D0ttElXN4M84S46XWM_VhbajyhkaS4eas4ZB_3T8MnoNlqOMJAUj07M47T1yVMLft5C9myOaIF5N1Wq0URXwlvyZu077TQDvrVfyaISjaoSva-5znTmI_VgFRx90us2_D7cRD0Dtg_4vnkJw4AbD4cGVaS7EnfZuS4vH2P6j" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img alt="" data-original-height="376" data-original-width="282" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgFFKfBk01_nqxmP5b0D0ttElXN4M84S46XWM_VhbajyhkaS4eas4ZB_3T8MnoNlqOMJAUj07M47T1yVMLft5C9myOaIF5N1Wq0URXwlvyZu077TQDvrVfyaISjaoSva-5znTmI_VgFRx90us2_D7cRD0Dtg_4vnkJw4AbD4cGVaS7EnfZuS4vH2P6j" width="180" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">El P. Basil Kovpak orando<br />por Ucrania ante el <br />Santísimo Sacramento.</td></tr></tbody></table><p></p><p>El ejemplo era siempre el mismo: «Quisiera y pido á Dios que el general <i>No importa</i> presida nuestra empresa», <a href="https://books.google.es/books?id=DJ4NAQAAIAAJ&pg=PA149&dq=%22general+No+importa%22&hl=es&sa=X&ved=2ahUKEwiz4cKIlav2AhXchv0HHaVtATcQ6AF6BAgFEAI#v=onepage&q=%22general%20No%20importa%22&f=false" target="_blank">dijo Carlos VII</a> en diciembre de 1872, antes de volver a cruzar la frontera española para ponerse al frente de sus hombres en una guerra que sabía también desigual. «Emblema de nuestra raza» llamaba Vázquez de Mella al General <i>No importa</i> en un memorable <a href="https://reinodegranada.blogspot.com/2017/03/el-general-no-importa.html" target="_blank">artículo de 1905</a>, añadiendo que «el perpetuo NO IMPORTA español (...) nos recuerda el deber de no rendirnos nunca al infortunio y alzar altivos la frente en las horas de las grandes tristezas nacionales, recordando las magnificencias del pasado». Y más recientemente, Rafael Gambra, en otro <a href="https://reinodegranada.blogspot.com/2014/03/no-importa.html" target="_blank">artículo escrito en 1986</a> en el <i>Boletín Fal Conde</i> del anterior Círculo Tradicionalista de Granada, sentenciaba, en relación a la actitud que deben seguir actualmente los carlistas: «Nuestros mayores nos dieron el ejemplo y la consigna: NO IMPORTA. Lo que se nos exige no es vencer sino luchar».</p><p>Aunque nuestras simpatías están con nuestros hermanos católicos, no consideramos que España deba intervenir militarmente en este conflicto y rezamos para que se restaure pronto una paz justa y duradera. No obstante, constatamos que el General <i>No importa</i> es hoy ucraniano, que se yergue altivo ante el invasor moscovita, y ante ese heroico General, no podemos, como españoles y tradicionalistas, sino quitarnos el sombrero.</p>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-51080828702881264722022-02-20T19:54:00.005+01:002022-02-23T09:41:58.247+01:00Gran éxito en la I Jornada Tradicionalista Granadina<p>La primera Jornada Tradicionalista Granadina, celebrada ayer, 19 de febrero de 2022, en la ciudad de de los cármenes, ha sido todo un éxito, tanto por la sabiduría y buena oratoria de los tres ponentes invitados, como por la afluencia de público, que llenó el salón a rebosar. </p><p>Medio centenar de asistentes participaron a lo largo de la jornada en las diversas charlas y tertulias que tuvieron lugar en un restaurante céntrico, pues finalmente no pudo celebrarse, como estaba previsto, en el Convento de las Comendadoras de Santiago, en cuyo muro se dejó un cartel indicando la nueva ubicación. </p><p>Acompañaron a los carlistas y simpatizantes de la Santa Causa granadinos, correligionarios de Málaga, Algeciras, Almería, Sevilla y otras localidades de la España meridional, en un ambiente distendido de amistad y camaradería.</p><p>El acto dio comienzo a las 12 con la presentación de los conferenciantes por parte de Rodrigo Bueno, en nombre del Círculo Tradicionalista de Granada General Calderón, quien expuso a continuación la permanencia histórica del carlismo en nuestra ciudad y provincia. Esta vio nacer a generales carlistas como <a href="http://reinodegranada.blogspot.com/2021/02/el-alpujarreno-general-arevalo-al.html" target="_blank">José María Arévalo</a>, <a href="http://reinodegranada.blogspot.com/2018/09/el-brigadier-carlista-granadino-manuel.html" target="_blank">Manuel Fernández de Prada</a> o <a href="http://reinodegranada.blogspot.com/search/label/General%20Carlos%20Calder%C3%B3n" target="_blank">Carlos Calderón</a>, así como a abnegados periodistas tradicionalistas como <a href="http://reinodegranada.blogspot.com/2014/09/lxxiii-aniversario-del-periodista-francisco-guerrero-vilchez.html" target="_blank">Francisco Guerrero Vílchez</a>, y experimentó un florecer de boinas rojas en la Cruzada Nacional de 1936, con la formación del <a href="http://reinodegranada.blogspot.com/2014/05/el-tercio-de-isabel-la-catolica-i.html" target="_blank">Tercio de Requetés Isabel la Católica</a>, cuyos ideales se mantuvieron en el anterior Círculo Fal Conde de Granada, del que es continuador el Círculo General Calderón.</p><p>D. Telmo Aldaz de la Quadra-Salcedo, presidente de la <a href="http://carlistas.es" target="_blank">Comunión Tradicionalista Carlista</a>, conocido en toda España por su abundante presencia mediática y querido por su locuacidad y autenticidad, tomó la palabra y contó lo que el carlismo significa para él y lo que le evoca la defensa de estos santos ideales. En segundo lugar intervino D. Javier M.ª Pérez-Roldán, secretario general de dicha Comunión, que disertó sobre la lucha contra la Revolución y acerca de la importancia de ser contrarrevolucionario en nuestros días. Cerró la tanda de conferencias matutinas el profesor D. Javier Barraycoa, quien, recién llegado de Barcelona, habló, entre otras cuestiones, del deber moral de la participación de los católicos en la vida social y política.</p><p>La agradable comida en el restaurante, con sus charlas a los postres y corrillos en el patio, permitió entablar nuevos contactos y amistades, que servirán sin duda para reorganizar y potenciar el tradicionalismo tanto en nuestra ciudad como en nuestra región, Andalucía Oriental.</p><p>La tertulia de la tarde, en ambiente más familiar aún, no fue menos interesante y permitió aclarar ciertas dudas sobre algunos de los principios defendidos por el Tradicionalismo español. También despertaron interés los libros de la <a href="https://tienda.tradicionviva.es/" target="_blank">Asociación Editorial Tradicionalista</a> y se vendieron varios ejemplares de <a href="https://tienda.tradicionviva.es/producto/la-intolerancia-doctrinal-del-cardenal-pie/" target="_blank"><i>La intolerancia doctrinal</i></a>, del Cardenal Pie, y de <i><a href="https://tienda.tradicionviva.es/producto/el-laureado-tercio-de-requetes-de-ntra-sra-de-montserrat/" target="_blank">El laureado Tercio de Requetés de Ntra. Sra. de Montserrat</a></i>, tan en boga en nuestros días por la ignominiosa retirada de la estatua del Requeté que se hallaba en el recinto de la abadía de Montserrat frente a la cripta en la que descansan cientos de requetés mártires de la Cruzada, así como de <i><a href="https://tienda.tradicionviva.es/producto/escolios-para-el-combate/" target="_blank">Escolios para el combate</a></i>, del profesor Barraycoa, entre otros.</p><p>No podemos dejar de mencionar en esta crónica al periodista Danilo Albin, que tuvo la amabilidad de dedicarnos <a href="https://www.publico.es/politica/ultraderecha-carlista-celebra-conclave-convento-monjas-granada.html" target="_blank">un artículo</a> en el diario enemigo <i>Público</i>, el cual permitió que varias personas más se enterasen del acto y acudiesen. ¡Desde aquí le mandamos un caluroso saludo y nuestro agradecimiento por la propaganda gratuita!</p><p>La Causa de la Tradición avanza. ¡Por Dios, por España y por la Monarquía tradicional!</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhPzOTuug9Le8klChWt9Cdefk6W8ObZNWvUnwh4vdXOUsTUrLT-YpvyGOS5lU0zIkJkHsmnLdBEXRWVkaTmuF6m1_3XeGePkburr_ZPZzz940hy-pfV4zFfclgzGyokwFfbF9aeRR5_DRvlr9NJEqRI_EfITSKSvow0mS0mb_VE4miPXOG9A97t5EyH=s2000" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1500" data-original-width="2000" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhPzOTuug9Le8klChWt9Cdefk6W8ObZNWvUnwh4vdXOUsTUrLT-YpvyGOS5lU0zIkJkHsmnLdBEXRWVkaTmuF6m1_3XeGePkburr_ZPZzz940hy-pfV4zFfclgzGyokwFfbF9aeRR5_DRvlr9NJEqRI_EfITSKSvow0mS0mb_VE4miPXOG9A97t5EyH=s320" width="320" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEh7FoesZ7iq51d01KEE9DrTjT848fFdmmilMsATd7c9o3kOs54RAGhUGnFFYer_k9ckfkGDFHs7StUOsZ2aDuVUAF5H5e8LxlACR0qfJ6InXoauED9PaIehhVIzK3NbwQn5OjlHLl3lAG9947sRs12GhXKd3nyO3gfenGP7LqNBcovPM4seUyFWN_00=s2016" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1512" data-original-width="2016" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEh7FoesZ7iq51d01KEE9DrTjT848fFdmmilMsATd7c9o3kOs54RAGhUGnFFYer_k9ckfkGDFHs7StUOsZ2aDuVUAF5H5e8LxlACR0qfJ6InXoauED9PaIehhVIzK3NbwQn5OjlHLl3lAG9947sRs12GhXKd3nyO3gfenGP7LqNBcovPM4seUyFWN_00=s320" width="320" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEi8mzaIX8Esr-tQdpl-CyCm1K-YjKy6zW9QymGlWdKM1cEhmXl3JGbQqO7yHK8KUlGZEuxg5vveIeZexZg1lo8mzmHLT-DZQ_DSwdemqYkCu4r7uj1dY--MyvPgHptmthpkB_xsrN_f1JzKTytjxDGhREaeKPq1GaEEiT0VX5DoRiA3lowFREfdNBax=s2016" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1512" data-original-width="2016" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEi8mzaIX8Esr-tQdpl-CyCm1K-YjKy6zW9QymGlWdKM1cEhmXl3JGbQqO7yHK8KUlGZEuxg5vveIeZexZg1lo8mzmHLT-DZQ_DSwdemqYkCu4r7uj1dY--MyvPgHptmthpkB_xsrN_f1JzKTytjxDGhREaeKPq1GaEEiT0VX5DoRiA3lowFREfdNBax=s320" width="320" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhXIkE2p-_j9zci32JoTC50B2jKzP5zcOjZNXlvDykUg5Dp9Gfijrno1quR0Qr0S4irNvI_0Q4zOl1eCXI61Op_wMO6jB2hXJzN58VZ0XKqmsinXWDTdI2zVoPeaeCqS0WCb0AoStXsvf120xMDg0plwxW3qyggL3eMGEQsi0kyU35KA7Lz2xZGNDNS=s2000" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1500" data-original-width="2000" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhXIkE2p-_j9zci32JoTC50B2jKzP5zcOjZNXlvDykUg5Dp9Gfijrno1quR0Qr0S4irNvI_0Q4zOl1eCXI61Op_wMO6jB2hXJzN58VZ0XKqmsinXWDTdI2zVoPeaeCqS0WCb0AoStXsvf120xMDg0plwxW3qyggL3eMGEQsi0kyU35KA7Lz2xZGNDNS=s320" width="320" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjn6NgCAchK5w1dzADwXb4FwlxXqGjZi2U8zG66DnXV_F-iYuqufSQBGlcD303YKLBSaKK9El_V_cF3LN5vQ_X73Oo-0wRwLH7xlOU0fFG7YGMUnHmJNQG_qnjUyo7CfrszxbDIW1SuAATXBOVGuBpdnvsqvF_FY8mHq7lfkqZ3czhA6_ZabcQ9rAII=s2000" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1500" data-original-width="2000" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjn6NgCAchK5w1dzADwXb4FwlxXqGjZi2U8zG66DnXV_F-iYuqufSQBGlcD303YKLBSaKK9El_V_cF3LN5vQ_X73Oo-0wRwLH7xlOU0fFG7YGMUnHmJNQG_qnjUyo7CfrszxbDIW1SuAATXBOVGuBpdnvsqvF_FY8mHq7lfkqZ3czhA6_ZabcQ9rAII=s320" width="320" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiUl_CadISe_o84FPo9U9AN4psB-fsch9h5hRa4U8LNcsNfb5fTo7bCN486dEavhiTCq6sPpwk7j2wYvBjL0GWeHuFXzUL-dY-h3OfSZ6Nn5EcX8AzcB_w9X0da2LlJY8xxv5A69EghG5dVV8eCyvoHBSfO9gAjdPUJ0CCjIbRf6y4VCqdeb89vkNL8=s2016" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1512" data-original-width="2016" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEiUl_CadISe_o84FPo9U9AN4psB-fsch9h5hRa4U8LNcsNfb5fTo7bCN486dEavhiTCq6sPpwk7j2wYvBjL0GWeHuFXzUL-dY-h3OfSZ6Nn5EcX8AzcB_w9X0da2LlJY8xxv5A69EghG5dVV8eCyvoHBSfO9gAjdPUJ0CCjIbRf6y4VCqdeb89vkNL8=s320" width="320" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhnaqR2l4iTIsMI-wQqWBTRDKU_ocYy7QOrJ2HXq2HXJm4nrkMK7gafEATQQJhyZ0ZxfcFNwxZqWS5l3IVprIzyza4U0OW07wtVjJlPoCUGEJ4WkavPwHZcACz2hMu0xEyebZH5JLMlmCTkRuGnjMjxXYFLUbzxsYlVmtli7jdlUQAxi-DFBVatyy6A=s2016" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1512" data-original-width="2016" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhnaqR2l4iTIsMI-wQqWBTRDKU_ocYy7QOrJ2HXq2HXJm4nrkMK7gafEATQQJhyZ0ZxfcFNwxZqWS5l3IVprIzyza4U0OW07wtVjJlPoCUGEJ4WkavPwHZcACz2hMu0xEyebZH5JLMlmCTkRuGnjMjxXYFLUbzxsYlVmtli7jdlUQAxi-DFBVatyy6A=s320" width="320" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgysuhrgTcMtS83vez2da7HxOO0v6qOgmS72gqUcTg5PEWIO3pbAgMgqkIXC8VuglUXYXTllAk7C8TbdZ99cEhJpB0dlQ_TL0xo4DpN7y3RNR8xB9xW4a4vLi-xehAMh-4E9gdxnQn02a9K-l1GrPnPajeFSDf-JL6_O0-hrLFd-OHnceWOYfwftV6G=s2016" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1512" data-original-width="2016" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgysuhrgTcMtS83vez2da7HxOO0v6qOgmS72gqUcTg5PEWIO3pbAgMgqkIXC8VuglUXYXTllAk7C8TbdZ99cEhJpB0dlQ_TL0xo4DpN7y3RNR8xB9xW4a4vLi-xehAMh-4E9gdxnQn02a9K-l1GrPnPajeFSDf-JL6_O0-hrLFd-OHnceWOYfwftV6G=s320" width="320" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhY1AVusrL-GaO0DAU-weinSUxc3NpSFePujM5mUfOFEj6pObD_v5z8pClSY-TvJEKQyE2ibiDY_9ozxKbPwPSXnrHwbHjMFhGxrY-iH-P3K--S3HN8On3ZQ12djdAjxrnVMi1BrUL_Y9Zkmnag3GlAcIX5_0A6v8TnLmjX-fzGUChzTtdEB6SCVgNE=s1600" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1200" data-original-width="1600" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhY1AVusrL-GaO0DAU-weinSUxc3NpSFePujM5mUfOFEj6pObD_v5z8pClSY-TvJEKQyE2ibiDY_9ozxKbPwPSXnrHwbHjMFhGxrY-iH-P3K--S3HN8On3ZQ12djdAjxrnVMi1BrUL_Y9Zkmnag3GlAcIX5_0A6v8TnLmjX-fzGUChzTtdEB6SCVgNE=s320" width="320" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhRpzhsqmR5Ua3o2ksyUUt9gq_WzFIYg_f57tBENqFLz7mnzYr8-WY75ZX9iYZvX_0DptzdcJeF_L32cCILlOam2tg06a87HeQeF8MH8-1ADjJ9r8H5IiRPope57sJiYHWcCUiuHRTqRvaIoaNyc2vFNfk94p4g83gFERa2y7OhBad9sJISr1clNqdE=s2000" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1500" data-original-width="2000" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhRpzhsqmR5Ua3o2ksyUUt9gq_WzFIYg_f57tBENqFLz7mnzYr8-WY75ZX9iYZvX_0DptzdcJeF_L32cCILlOam2tg06a87HeQeF8MH8-1ADjJ9r8H5IiRPope57sJiYHWcCUiuHRTqRvaIoaNyc2vFNfk94p4g83gFERa2y7OhBad9sJISr1clNqdE=s320" width="320" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><br />Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-11922527531123925722022-02-18T12:49:00.005+01:002022-02-20T17:09:55.518+01:00Javier Barraycoa en «La Sacristía de La Vendée» sobre la I Jornada Tradicionalista Granadina<p>Entrevista a Javier Barraycoa en «<a href="https://www.youtube.com/channel/UC0rhml5sfEMfgS_w0lOVvOg" target="_blank">La Sacristía de La Vendée</a>» sobre la I Jornada Tradicionalista Granadina, que se celebrará (D.m.) mañana 19 de febrero de 2022:</p><p><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="321" src="https://www.youtube.com/embed/n_p-J8V7dEs" width="387" youtube-src-id="n_p-J8V7dEs"></iframe></div><p></p>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-7944144793002837522022-02-12T00:37:00.004+01:002022-02-13T23:14:55.254+01:00Acude a la Primera Jornada Tradicionalista Granadina<p>El próximo 19 de febrero de 2022 (sábado) tendrá lugar (Dios mediante) la <b>Primera Jornada Tradicionalista Granadina</b> en la <a href="https://goo.gl/maps/ZGJCwC1D5pWuHYbt5" target="_blank">Hospedería de las Comendadoras de Santiago</a> (Granada), en la que intervendrán a partir de las 11:30 como oradores los Sres. D. Telmo Aldaz, D. Javier M.ª Pérez-Roldán y D. Javier Barraycoa, todos ellos destacados tribunos del Tradicionalismo español, con los que almorzaremos después en el convento de las Comendadoras de Santiago, seguido lo cual habrá tertulia, presentación de libros de la <a href="https://tienda.tradicionviva.es/">Editorial Tradicionalista</a> y oración en la capilla del convento. </p><p>Si no has reservado ya tu plaza, nos gustaría invitarte a que lo hagas. Por favor, además de acudir, te pedimos que compartas el siguiente cartel con tus amigos o conocidos que puedan tener interés. Muchas gracias. </p><p>Círculo Tradicionalista de Granada General Carlos Calderón</p><p><br /></p><p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEizyce3Zcy84DETsq_kCWZPvNoGbutPeemc9Q_SHrvwjBmTU6B1kxcj0tZ5Cwo4cxGumZzc7r6lI34P81y0fN83CnaRinGUdPNHVazLZXdQeCbBVhXzVeT-x_FFErshpMfKkxNqldqAgtvj_Rhl8vn4T4lXJW7gov3QLWzMOOMPHVY4suI-FGLTGBB3" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img alt="" data-original-height="1280" data-original-width="905" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEizyce3Zcy84DETsq_kCWZPvNoGbutPeemc9Q_SHrvwjBmTU6B1kxcj0tZ5Cwo4cxGumZzc7r6lI34P81y0fN83CnaRinGUdPNHVazLZXdQeCbBVhXzVeT-x_FFErshpMfKkxNqldqAgtvj_Rhl8vn4T4lXJW7gov3QLWzMOOMPHVY4suI-FGLTGBB3=w454-h640" width="454" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"></td></tr></tbody></table><br /><br /><p></p>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-51274589048717683562021-11-09T07:39:00.002+01:002021-11-09T07:39:00.156+01:00Un rasgo de hidalguía de Carlos Calderón<p style="text-align: right;">por Natalio Rivas Santiago (1865-1958)</p><p>Nunca he sido carlista; pero siempre, rindiendo culto a la justicia, he afirmado que el partido tradicionalista español ha sido en nuestra Historia un modelo de constancia y consecuencia que no ha tenido parigual.</p><p>Arranca su actuación política en la muerte de Fernando VII, y, tras un siglo de lucha sin descanso, ha sufrido la derrota en tres guerras civiles, y, sin embargo de ello, ha subsistido sin decaer su espíritu ni rendirse su voluntad. Multitud de familias, lo mismo las más ilustres que las más modestas y humildes, han ido legando a sus descendientes el culto a las ideas, constituyendo su apretada comunión una falange que nunca ha claudicado.</p><p>A pesar de separarme de sus componentes la más radical diferencia política, he contado en dicha agrupación con muchísimos amigos, lo que me ha ofrecido ocasión de conocer de cerca su manera de ser. No he tratado uno solo que no fuera un cumplido caballero y que en todos sus actos no resplandeciera la más noble hidalguía. La imparcialidad me impone reconocerlo.</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgnTuKTB54n5jbZOvoQNRK9yoZ5VeBP5wB0Rkk60m5cKh6pD_hoX9xWW6gwdsILVRtKwt0XTtKKuJiCAqokjqK04zbvBWtK4fmf8jWkajZChStM-1OrPSWi5T9bdQUbWmShsrKfVJMkdaQ/" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img alt="" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgnTuKTB54n5jbZOvoQNRK9yoZ5VeBP5wB0Rkk60m5cKh6pD_hoX9xWW6gwdsILVRtKwt0XTtKKuJiCAqokjqK04zbvBWtK4fmf8jWkajZChStM-1OrPSWi5T9bdQUbWmShsrKfVJMkdaQ/" width="180" /></a></div><p></p><p>Pues bien: en los días venturosos, y ya tan remotos, de mi juventud, presencié un episodio que quiero rememorar como demostración viva de cuanto llevo dicho. Creo que de los que actuaron en él, acaso sea yo el único superviviente.</p><p>El año 1892 es sabido que se celebró en toda España con inusitada solemnidad el cuarto centenario del descubrimiento de América. Entre los muchos actos que habían de tener lugar figuraba el viaje a Granada de S. M. la Reina Regente, Doña María Cristina, acompañada del Rey niño Don Alfonso XIII, ambos de inolvidable y grata memoria.</p><p>El estar sepultada en la referida capital la gloriosa Reina Católica, alma del descubrimiento, prestaba singular importancia a las fiestas del centenario. Además, allí la Soberana descubriría el magnífico monumento dedicado a conmemorar la visita de Cristóbal Colón a su augusta protectora, esculpido por el inmortal artista Mariano Benlliure.</p><p>El anuncio de la visita de los Reyes produjo en Granada enorme contento. Yo recuerdo todos los detalles porque acababa de ser elegido diputado provincial, y lo mismo la Diputación que el Ayuntamiento tuvieron que ocuparse de preparar el más lucido recibimiento a los augustos huéspedes.</p><p>Hubo que pensar, ante todo, en qué edificio había de alojarse la Corte. Todos deseábamos que fuese el mejor. Después de discutir cuál sería el más idóneo para el caso, el entonces alcalde, don Manuel Tejeiro, indicó que ninguno podía aventajar al Carmen, llamado de Los Mártires, situado en la Alhambra, con vistas a la vega y a Sierra Nevada, donde hubo de estar aposentado el gran poeta don José Zorrilla cuando fue coronado. A todos nos pareció de perlas la iniciativa; pero inmediatamente alguien hizo notar que siendo tan hermosa mansión de la propiedad de don Carlos Calderón y Vasco éste no la cedería, precisamente, por ser los Reyes los que habían de ocuparla.</p><p>Calderón no vivía en Granada. Su residencia permanente era París. Carlista de abolengo, había sido jefe de la escolta personal de Don Carlos VII durante la última contienda civil, y se creía que, adversario irreconciliable de la Monarquía reinante, se negaría a ceder su casa —que nadie habitaba— para que fuera alojamiento de los Soberanos.</p><p>Se discutió sobre aquella dificultad, y el alcalde tomó, muy resuelto, la responsabilidad de hacer la petición en nombre de la ciudad.</p><p>Dirigió un extenso y expresivo telegrama al opulento prócer carlista, y éste contestó con otro cuyo texto no recuerdo, pero sí la esencia de su contenido. En él hago memoria que decía que para los Reyes de España, que no lo eran más que de hecho, no cedería su casa, pero que para la ilustre dama que ocupaba el trono, no como Reina, pero sí como augusta señora, tenía la más alta satisfacción de ofrecerla.</p><p>A mí no me sorprendió, porque, como he dicho antes, conocía yo muy bien la hidalguía que caracterizaba todos los actos de los tradicionalistas.</p><p>No hay que decir que los elogios que se prodigaron a Calderón fueron tan justos como unánimes.</p><p>Y entonces, para preparar de la manera más digna y espléndida el aposento de las personas reales, rivalizaron en celo todas las señoras granadinas, lo mismo las de estirpe aristocrática que las adineradas de la clase media, llevando a Los Mártires tapices, cuadros, mármoles, esmaltes y muebles de época riquísimos y artísticos y cuanto creyeron que había de embellecer la regia mansión. Y no es preciso consignar que en la elección y colocación de tantas preciosidades presidieron el gusto y la elegancia, que son patrimonio de las damas de mi amada tierra.</p><p>Y, desgraciadamente, fueron estériles tan lujosos preparativos, porque la desgracia quiso que el Rey niño enfermara en Huelva y tuvieran, por prescripción facultativa, que trasladarlo a Madrid.</p><p>Pero el gesto caballeroso de don Carlos Calderón quedó como honroso recuerdo en la memoria de todos.</p><p><br /></p><p>Rivas, Natalio: <i>Retazos de historia: páginas de mi archivo y apuntes para mis memorias (<a href="https://books.google.es/books?hl=es&id=Q7IbAAAAMAAJ" target="_blank">sexta parte del anecdotario histórico contemporáneo</a>)</i>, Editora Nacional, Madrid, 1952.</p>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-75995628148692644762021-10-14T12:23:00.052+02:002023-05-18T12:18:09.109+02:00Los granadinos no descendemos de los moros<p>Es un mito popular que las gentes de Andalucía en general, y las de Granada en particular, descienden, al menos en parte, de la población musulmana que habitaba la región antes de la conquista castellana; un mito de origen extranjero (promovido desde el siglo XIX por escritores como Washington Irving) que ha calado tanto, que ha acabado teniendo graves repercusiones políticas e identitarias, y ha servido de base ideológica para la artificial Comunidad Autónoma de Andalucía (cuya bandera tiene un origen islámico, como constatamos hace seis años en nuestra entrada <a href="http://reinodegranada.blogspot.com/2015/04/el-origen-moro-de-la-bandera-de-andalucia.html" target="_blank">El origen moro de la bandera de la Junta de Andalucía y las mentiras de los "andalucistas"</a>).</p><p>Lo cierto es que los españoles del sur nada tenemos que ver con quienes construyeron la Alhambra (por muy fascinante que nos parezca este monumento), ni fueron nuestros antepasados quienes saquearon Compostela a las órdenes de Almanzor. Lo demuestran, sin ir más lejos, recientes estudios genéticos, <b>[1]</b> así como todos los historiadores serios. Por mucho que vanamente se empeñen algunos en negarlo, las expulsiones masivas de los moriscos se produjeron. Y las repoblaciones masivas de cristianos viejos, también. No es que nos alegremos de que así fuera; más grato nos sería afirmar que, al igual que en América, la política de evangelización y mestizaje hubiese dado resultado y que ningún morisco pacífico hubiese tenido que salir de la tierra que le vio nacer. Simplemente la verdad de los hechos nos obliga a decir las cosas como fueron.</p><p>Pero vayamos al origen: ¿por qué, salvo algunos esclavos y cautivos, no había cristianos en ninguno de los reinos de Andalucía cuando estas tierras son reconquistadas? No olvidemos que la Bética había sido hogar de muchos santos, incluso de Padres de la Iglesia como San Osio de Córdoba, San Leandro y San Isidoro de Sevilla, y que nuestra tierra incluso había albergado un importante acontecimiento cristiano de la Antigüedad, el Concilio de Elvira. La respuesta es sencilla: los "tolerantes" musulmanes los habían expulsado, aniquilado o habían forzado su emigración. Esta intensa represión tuvo lugar especialmente tras la llegada de almorávides y almohades, pero también antes, como prueban episodios como el de los mártires de Córdoba.</p><p>Es cierto que en los primeros siglos de Al-Andalus, el grueso de los cristianos hispanos, lejos de islamizarse, <b>[2]</b> siguieron constituyendo la mayoría de la población, que conocemos por el nombre de <i>mozárabes</i>. Pero poco a poco fueron pasando al norte. De hecho, la población del reino astur-leonés iría aumentando casi exclusivamente con los mozárabes venidos del sur. <b>[3]</b></p><p>Tras la expedición de Alfonso el Batallador de 1125, con la que colaboraron los mozárabes, una multitud de estos fueron deportados a África por decreto del emir almorávide Alí ibn Yúsuf en el año 1126 <b>[4]</b> (miles de ellos lograrían regresar a España dos décadas después, estableciéndose en Toledo) <b>[5]</b> y, pocos años después, los que habían quedado, sometidos a un hostigamiento continuo, se vieron obligados, por decreto del sultán almohade Abd al-Mumin, a emigrar a Castilla y León o islamizarse, bajo pena de la vida y confiscación de sus bienes. <b>[6]</b></p><p>Reconquistada la Baja Andalucía por el rey San Fernando en el siglo siguiente, le tocaría el turno a los musulmanes, que fueron desterrados de esta región a consecuencia de la revuelta mudéjar de 1264. La región quedó despoblada e inhóspita (los moros se marcharon al vecino reino nazarí de Granada) y fue repoblándose con cristianos procedentes del norte durante un proceso lento y prolongado, <b>[7]</b> lo que explica que se tardase también tanto en tomar Granada. El historiador Manuel González Jiménez habla de «la práctica sustitución de una población por otra». <b>[8]</b></p><p>Veamos qué pasaba en el reino de Granada. Como demuestra el gran arabista <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Francisco_Javier_Simonet" target="_blank">Francisco Javier Simonet</a>, tradicionalista y autor de la monumental <i>Historia de los Mozárabes de España</i>, para cuando llegasen los Reyes Católicos, en este reino no quedaría vestigio alguno de la antigua población hispana:</p><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px;"><p style="text-align: left;">«en el reino y Estado nasarita, fundado por Aláhmar con elementos puramente musulmanes y repoblado con la inmigración de los moros expulsados de los reinos de Sevilla, Córdoba, Jaén, Valencia y Murcia, recién conquistados por nuestros Monarcas, no había para la tolerancia del gobierno musulmán los motivos que hubo en otro tiempo cuando los sultanes de Córdoba contaban entre sus vasallos una inmensa muchedumbre de cristianos españoles; y así en el nuevo reino no había para los nuestros más partido que huir ó renegar». <b>[9]</b></p></blockquote><p>Cuando los Reyes Católicos toman Granada en 1492, se permitió a sus habitantes quedarse sin que tuviesen que renunciar forzosamente a su fe, merced a las condiciones de las capitulaciones. Por otro lado, como es natural, el cardenal Cisneros (hombre caritativo e ilustrado, que nada tiene que ver con la leyenda negra que se ha hecho de él) inició la evangelización de Granada, que en un principio dio muy buenos resultados, hasta tal punto que los mismos doctores musulmanes de la ciudad se convencieron de sus errores y pidieron ser bautizados. Ello impresionó de tal manera a los moros granadinos que, imitándolos, acudieron en masa a bautizarse. <b>[10]</b> Llevado de su celo apostólico, Cisneros mandó quemar públicamente en la plaza Bib-Rambla copias del Corán y libros de teología islámica (salvando expresamente todos los de ciencias), lo que, unido a otros sucesos menores, terminó de soliviantar a los moros no convertidos, los cuales iniciaron un efímero levantamiento en el Albaicín en 1499. <b>[11]</b> Este se extendió a las montañas, y en el año siguiente, Gonzalo Fernández de Córdoba, el Gran Capitán, tuvo que sofocar una primera revuelta mora en Güéjar y Lanjarón. <b>[12] </b></p><p>Pacificada la región, Fernando el Católico dictó disposiciones para facilitar la evangelización con estímulos y recompensas para los que se hicieran cristianos. Sin embargo, algunos moros, en lugar de acogerse a estas ventajas y privilegios reales, optaron por asesinar a los misioneros, saquear e incendiar pueblos y vender en África como esclavos a los hombres, niños y mujeres que capturaban en sus correrías. <b>[12]</b> Los moros habían incumplido las condiciones de la capitulación, de manera que se suprimió el estatuto de mudejaría. En 1501 Fernando el Católico dispuso que se aparejasen en el puerto de Estepona los buques necesarios para el transporte de los moros que prefiriesen pasar a Berbería antes que hacerse cristianos. <b>[13] </b></p><p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right; margin-left: 1em; text-align: right;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgcKgLgkuqoNWtXZB6Ui15a0jmCkgTIyif45DycUMQ0-am4wh93XOFNj5HcB7pyeF5y7LYN4NLRMUox9lk61_rvrOGmKOuVQYmuVx4yIsewdKU9to0P8KE63rigf43LMa1Sccyn6GTPS-g/" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img alt="" data-original-height="2048" data-original-width="1516" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgcKgLgkuqoNWtXZB6Ui15a0jmCkgTIyif45DycUMQ0-am4wh93XOFNj5HcB7pyeF5y7LYN4NLRMUox9lk61_rvrOGmKOuVQYmuVx4yIsewdKU9to0P8KE63rigf43LMa1Sccyn6GTPS-g/" width="178" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="font-size: x-small;">Degüello de cristianos en Cadiar, <br />según un grabado de la novela <br /><i>Los Monfíes de las Alpujarras</i> (1859) <br />de Manuel Fernández y González.</span></td></tr></tbody></table>Sin embargo, el problema morisco persistió. Durante el siglo XVI en las costas españolas (especialmente en las del reino de Granada) turcos, berberiscos y corsarios practicaron saqueos y secuestros de cristianos, lo que, según informes transmitidos al rey, podían hacer debido al trato y la ayuda que recibían de algunos moriscos. <b>[14]</b> Ante este panorama, se endurecieron las medidas contra ellos. A petición de las Cortes de Castilla (1559-1560), Felipe II prohibió a los moriscos tener esclavos negros a su servicio, para evitar que los educaran en el mahometismo. También se les prohibió usar armas sin autorización, y cuando estos empezaron a rebelarse, se reunió un concilio provincial en Granada, en el que se acordó prohibirles el uso de la lengua árabe y las costumbres moriscas. <b>[15]</b> En 1568 se produjo la insurrección mora más conocida: la llamada rebelión de las Alpujarras (que en realidad afectó a todo el reino de Granada), en la que cientos de cristianos granadinos indefensos fueron degollados por los salvajes <i>monfíes</i>. <p></p><p></p>Para conocer las muchas y escalofriantes atrocidades que los moriscos cometieron contra nuestros antepasados, recomendamos la lectura de <i><a href="https://books.google.es/books?id=KfUrAQAAMAAJ&printsec=frontcover&hl=es#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Historia del Rebelion y castigo de los Moriscos del reyno de Granada</a> </i>(1599), por Luis del Mármol Carvajal. Esta obra fue reeditada en 1797, en palabras de su editor, «como una obra tan digna de ser leida, y que puede dar honor á la nacion por el merito que en sí tiene, y las grandes hazañas de nuestros antepasados en una conquista que tantos bienes acarreó á la Religión Christiana, no merecia que estuviese tan sepultada en el olvido por la rareza de sus exemplares».<p></p><p>Como consecuencia de esta revuelta, sofocada por Don Juan de Austria, la práctica totalidad de los moriscos que quedaban en el reino de Granada (más de 60.000) tuvieron que ser diseminados por la Corona de Castilla. <b>[16] </b>Pagaron justos por pecadores, pues se desterró a todos, también a los que no habían participado en la sublevación. <b>[17]</b> En la guerra alpujarreña habían muerto, además, según el embajador veneciano Leonardo Donato, una tercera parte de los moriscos que habitaban la región. <b>[18]</b> Extensas zonas de las actuales provincias de Almería, Granada y Málaga quedaron despobladas (de los 400 pueblos de la región, medio siglo después solo se había conseguido repoblar 270). <b>[19]</b></p><p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right; margin-left: 1em; text-align: right;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghiCuC0RYRgURW2hFzfDxRnLFRLIgmH2XFhvSQ04-kgksSJJC6jcSPN_PIboDVs5k_94CTgf7xEhQj-S87TZ36J23HQBPdbGiDK_843Y4sJ9YmCOpbG8vmyIYFOChicIpr1z-3YyH3VTgJ0R5eYw1w14mXt4Ybw5Xawaygx90Mel8hIld9sI1bbrHf/s690/pena%20de%20muerte.png" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="487" data-original-width="690" height="226" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghiCuC0RYRgURW2hFzfDxRnLFRLIgmH2XFhvSQ04-kgksSJJC6jcSPN_PIboDVs5k_94CTgf7xEhQj-S87TZ36J23HQBPdbGiDK_843Y4sJ9YmCOpbG8vmyIYFOChicIpr1z-3YyH3VTgJ0R5eYw1w14mXt4Ybw5Xawaygx90Mel8hIld9sI1bbrHf/s320/pena%20de%20muerte.png" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">La ley imponía la pena de muerte a cualquier morisco que<br />regresase al Reino de Granada y su esclavitud o adopción <br />en caso de ser menores de edad.<br /><a href="https://books.google.es/books?id=DfhTMTcvIfAC&hl=es&pg=PA334#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Nueva Recopilación (Libro 8.º, título 2.º, Ley XIII)</a></td></tr></tbody></table>El historiador Antonio Domínguez Ortiz afirma que, a pesar de los grandes recelos por parte de los cristianos viejos y aunque los matrimonios mixtos fueron rarísimos, con el paso de las generaciones los antiguos moriscos granadinos (ya dispersos por Castilla), podrían haber llegado a ser integrados. <b>[20]</b> Sin embargo, los continuos tratos entre moriscos de diferentes partes de España, sus intrigas con franceses, turcos y berberiscos y el alarmante aumento de la población mora en el reino de Valencia motivaron que, en 1609, Felipe III decretara su expulsión general, por sugerencia del duque de Lerma. <b>[21]</b> Se evitaba así que los moriscos sirviesen de quinta columna en cualquier ataque de turcos o berberiscos.<p></p><p>El historiador francés Henri Lapeyre, en su exhaustivo trabajo <i>Geografía de la España morisca</i>, incluso pone cifras detalladas. De los cerca de 300.000 moriscos que vivían en España, abandonaron definitivamente nuestro país en torno a los 275.000 con la primera expulsión. <b>[22]</b> En 1614 se expulsó a otros 7000 más que habían vuelto clandestinamente. <b>[23]</b> Los poquitos que quedaron (por ser esclavos, haberse integrado en familias cristianas o haber abrazado la vida religiosa) suponían menos de un 0,3 % de la población española de siete millones, <b>[24]</b> y no se concentraron en Granada. </p><p><br /><b>Notas:</b><br /></p><p>[1] <a href="https://elpais.com/elpais/2019/06/04/ciencia/1559654994_049558.html" target="_blank">Al-Andalus no dejó rastro en la genética del sur de España</a>. <i>El País</i>, 5-6-2019; <a href="https://sevilla.abc.es/andalucia/granada/sevi-ciencia-desmonta-mito-mestizaje-poblacion-espana-apenas-tiene-norte-africa-201906041808_noticia.html" target="_blank">La ciencia desmonta el mito del mestizaje: la población del sur de España apenas tiene ADN del norte de África</a>. <i>ABC de Sevilla</i>, 4-6-2019.<br />[2] Simonet, Francisco Javier. <i><a href="https://books.google.es/books?id=5_s1AQAAMAAJ&printsec=frontcover&hl=es#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Historia de los Mozárabes de España</a></i>. 1897-1903, p. XXXIV. El mismo autor no ignora que, durante los primeros siglos, entre los mismos musulmanes, los españoles renegados o <i>muladíes</i>, junto con los beréberes, fueron superiores en número a la élite árabe dominante.<br />[3] Simonet, p. 141.<br />[4] Simonet, p. 750.<br />[5] Simonet, p. 761.<br />[6] Simonet, p. 765.<br />[7] González Jiménez, Manuel. «<a href="https://web.archive.org/web/20220620213444/https://www.colmich.edu.mx/relaciones25/files/revistas/069/ManuelGonzalezJimenez.pdf" target="_blank">La repoblación de Andalucía (Siglos XIII-XV)</a>». Universidad de Sevilla. <i>Relaciones</i> (COLMICH, Zamora), México, 1997, vol. 18, núm. 69, págs. 31-32.<br />[8] González Jiménez, p. 26.<br />[9] Simonet, 1897-1903, p. 789.<br />[10] Guichot, Joaquín. <i><a href="https://books.google.com.ph/books?id=U6tMAAAAYAAJ&hl=es&pg=PA1009#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Historia general de Andalucía. Tomo VI</a></i>. En «Colección completa de las Obras Literarias y Gráficas de Joaquín Guichot y Parody. Tomo III». 1913, p. 1009.<br />[11] Guichot, p. 1012.<br />[12] Guichot, p. 1016.<br />[13] Guichot, p. 1018.<br />[14] Balmes, Jaime. <i><a href="https://books.google.es/books?id=oO_KVA3kcp4C&hl=es&pg=PA503#v=onepage&q&f=false" target="_blank">El Protestantismo comparado con el Catolicismo. Tomo I</a></i>, París, 1852, págs. 503-504. <br />[15] Guichot, p. 1028.<br />[16] Domínguez Ortiz, Antonio. <a href="https://revistaseug.ugr.es/index.php/meaharabe/article/view/14837/12830" target="_blank"><i>Los moriscos granadinos antes de su definitiva expulsión</i></a>. Miscelánea de estudios árabes y hebraicos. 1964. Vol. 12-13: p. 114.<br />[17] Lafuente, Modesto. <i><a href="https://books.google.es/books?id=fWKcbeBtXKkC&pg=PA197#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Historia general de España, tomo VIII</a></i>. 1862, p. 113.<br />[18] Lapeyre, Henri. <a href="https://books.google.com/books?id=gDvwjcybT4UC&pg=PA218" target="_blank"><i>Geografía de la España morisca</i></a>. Universitat de València, 2011, p. 14. <br />[19] Domínguez Ortiz, p. 118.<br />[20] Domínguez Ortiz, págs. 120-121.<br />[21] Lafuente, págs. 197-202.<br />[22] Lapeyre, págs. 218-220. <br />[23] Lapeyre, p. 212. <br />[24] <a href="https://www.ine.es/explica/cervantes/files/assets/common/downloads/publication.pdf" target="_blank">Tras los pasos de Cervantes [en clave estadística] - INE</a>, p. 5</p>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-81917263993103703422021-10-09T16:43:00.000+02:002021-10-09T16:43:00.622+02:00La nación española es sagrada<p><i>¡La Patria! </i>Sólo el ser degenerado y envilecido puede despreciarla: por eso el mundo civilizado le azota el rostro con el dicterio deshonroso llamándole: <i>¡sin patria!</i> El <i>sin patria</i> es huérfano perpetuo, expósito miserable, que degeneró de su alcurnia y pasa la vida envuelto en dos andrajos de la abyección. <br /></p><p>Y si esa<i> Patria </i>es la gloriosísima España, cuya historia tejió una epopeya incomparable, en los pliegues de cuya bandera se cantaron los himnos de triunfo más armoniosos, la nación mil veces bendita que, desde Covadonga a Granada, fue recorriendo un camino alfombrado de turbantes y sombreado por laureles; la amazona inmortal que dilató más allá de los mares sus conquistas, porque, no cabiendo en su recinto ni el tesoro de su saber, ni la grandeza de su valor, tuvo que descubrir un mundo, para fecundarlo con su civilización y con su fe, para plantar en aquellas tierras vírgenes, con la Cruz de Cristo, el pendón de sus heroicidades. En una palabra: si esa Patria es la nuestra, la sociedad nacional es entonces tan sagrada, su tradición es tan divina, que sólo el infierno aguijado de la envidia, pudiera robarnos la riqueza de tan riquísimo abolengo. </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7J-L2z3_MXqwyf7dkSCkndf4kI8ryqtXZxfXie5r665BEbhsx05xCRtR-PBAlZfuGHlmuu1deF-9jbNCInY6RenbS9yA-SHFzeuCXV9HlA7OeLecrq2lwMO5sN7zYETUaw2Vm_pWyFO8/" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img alt="" data-original-height="450" data-original-width="450" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7J-L2z3_MXqwyf7dkSCkndf4kI8ryqtXZxfXie5r665BEbhsx05xCRtR-PBAlZfuGHlmuu1deF-9jbNCInY6RenbS9yA-SHFzeuCXV9HlA7OeLecrq2lwMO5sN7zYETUaw2Vm_pWyFO8/w320-h320/image.png" width="320" /></a></div><p></p><p>Sólo de España hubo de cantar un poeta: </p><p><span> </span>“Por eso, al par de tu arrogante dama <br /><span> </span>fueron tu gloria la bandera y Dios: <br /><span> </span>y pueblos, como tú, de tanta fama <br /><span> </span>... ¡la Historia miente si consigna dos!” </p><p>Y más adelante: </p><p style="text-align: left;"><span> </span>“España, mi ilusión y mi consuelo,<br /><span> </span>solar más noble, que ambicione yo, <br /><span> </span>no vio la tierra... y aun el mismo cielo... <br /><span> </span>¡el cielo, sí; pero la tierra, no!”</p><p>Heredad preciosa que la sabia Providencia alhajó para nosotros, obligándonos a no degenerar de tanto heroísmo y de virtudes tantas, estimulándonos a abrillantar más y más su bandera con nuestra sangre, para que se mezcle con la sangre que en su escudo dejaron estampada nuestros padres. </p><p>Y ¡cómo alientan esos triunfos que ya son nuestros, porque es ya legítima de nuestra familia! Cómo nos encantan y conmueven sus genios portentosos, sus sabios eminentes, sus literatos insignes, cuya estela perdura en la casa solariega que habitamos! </p><p>Contemplad la riqueza fabulosa de nuestra madre: sus monumentos arquitectónicos, sus catedrales majestuosas, las cruces de los caminos que forman las piedras miliarias de su paso triunfal, las imágenes que predican su devoción en sencillas hornacinas, las ermitas cuajadas de exvotos que perpetúan milagros y favores del cielo, los cantares pletóricos de fe y esmaltados de esperanzas, las romerías de las aldeas, el Pilar donde posó su planta la Madre de Dios, cuando vivía aún en carne mortal, el sepulcro de Santiago... todo, en España nos predica que “<i>Dios está aquí</i>”, que nuestra Patria es, al par que baluarte y fortaleza, templo espléndido, donde es preciso orar, para mostrarnos agradecidos a los beneficios incontables que derramara el cielo en este suelo privilegiado. </p><p>¿No advertís cómo palpita el pecho de todo español honrado, cuando ve en el extranjero la enseña nacional o escucha elogios de nuestros antepasados? </p><p>Yo recuerdo el júbilo que inundó mi espíritu al penetrar por primera vez en la Basílica de San Pedro, cuando me sorprendieron las gigantescas estatuas que adornan las columnas del grandioso templo; porque son las imágenes que, desde niño, tengo grabadas en mi corazón: de Santa Teresa de Jesús, de San Ignacio de Loyola, de San Francisco Javier. Aquellas efigies me parecían gloria propia que yo mismo prestaba al Vaticano; y mi gozo se dilataba porque aquellas esculturas eran la exaltación de mi madre España. </p><p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right; margin-left: 1em; text-align: right;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhxVJGt3UdnmdFlobhwniSJnRcOHtaNdctJrtNHLFz3w-lLl3l20aW28WNLzJlPWg-rJxC5z8Rpwuo990YYe_6oockYH709GQ76AqsdIAP2Xw6FXXOq1rZUgS1VWruktMwzPb3S9H3bjnc/" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img alt="" data-original-height="535" data-original-width="390" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhxVJGt3UdnmdFlobhwniSJnRcOHtaNdctJrtNHLFz3w-lLl3l20aW28WNLzJlPWg-rJxC5z8Rpwuo990YYe_6oockYH709GQ76AqsdIAP2Xw6FXXOq1rZUgS1VWruktMwzPb3S9H3bjnc/" width="175" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">José María Ruano y Corbo <br /><span style="font-size: x-small;">(Salamanca, 1876 - Paracuellos, 1936)</span></td></tr></tbody></table>Al recorrer las repúblicas hispanoamericanas, al oír allí la lengua de Castilla, al ver en nombres y ciudades, en obeliscos y templos, en usos y costumbres la huella de los campeones hispanos, siento que el amor fraternal me une y enlaza con aquellos naturales. Entre todos esos Estados, estrecho con amor más tierno a la República de Colombia, donde cuento con amigos tan cariñosos, de la que admiro su rica literatura; y la quiero más por ver en ella más viva la devoción por España, porque se consagró al Sagrado Corazón de Jesús como nosotros, porque celebró un Congreso eucarístico que alegró a los cielos; porque en Velada inolvidable y solemnísima en honor de Santa Teresa de Jesús, elogió con tanto entusiasmo a nuestra Doctora mística y la aclamó “la gloria de la Raza”. </p><p>Y es que la Patria no es una sociedad sobrepuesta y artificial, no es fruto de un pacto adventicio, sino algo consustancial para todo hombre bien nacido.</p><p><br /></p><p>Texto extraído de “El Socialismo a la luz del Evangelio” (Tortosa, 1934), págs. 64-68, por el Dr. <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%A9_Mar%C3%ADa_Ruano_y_Corbo" target="_blank">José María Ruano</a>, mártir de la Tradición</p>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-17898334647739403762021-09-29T22:04:00.001+02:002021-09-29T22:04:13.305+02:00Crónica de las fiestas patronales de la Virgen de las Angustias, patrona de Granada. 2021.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiHmPqyf3L8tCw9hWo2rEPHRoMc4Qdfq0fQTVhRhGanlql1Wq8i1zCZdZNgWamLnfMnyHLtZnLo5LLUVFpPydx8n7zwYJLjvbTg9-MeHEDMeyh-Jzo9gVzEp0APEPiEbJllQzIecWf4W1o/s2048/IMG_20210625_122613.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiHmPqyf3L8tCw9hWo2rEPHRoMc4Qdfq0fQTVhRhGanlql1Wq8i1zCZdZNgWamLnfMnyHLtZnLo5LLUVFpPydx8n7zwYJLjvbTg9-MeHEDMeyh-Jzo9gVzEp0APEPiEbJllQzIecWf4W1o/w300-h400/IMG_20210625_122613.jpg" width="300" /></a></div><p><b>1. Introducción.</b></p><p>Desde 1887, de la mano de León XIII, la Virgen de las Angustias es patrona formal de la ciudad de Granada y de la archidiócesis de Granada. Además, su devoción se encuentra muy extendida por la actual provincia de Granada, y, hasta cierto punto, por las provincias de Almería y Málaga, que corresponden con el territorio del antiguo Reino de Granada. Por esto, y aunque el Reino de Granada no tiene patrón oficial, de decantarnos, éste sería sin dudarlo Nuestra Señora de las Angustias.</p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhfMyfwl7LD2ExqAprsMmIwMqeopPfjVRoBOkOfk7-TK9OzURfSHsEIDbbIlvejK23Ike2u1IbP5rNKyl4b6FI56s2cVP7NO3cV4V6SD9oMMLRwCo08lFeF51EagUBnS8oEHwwRoI1XClA/s1954/Gozos_de_Nuestra_Se%25C3%25B1ora_de_las_Angustias_Patrona_de_la_Ciudad_y_Reino_de_Granada_Texto_impreso__1.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1954" data-original-width="1307" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhfMyfwl7LD2ExqAprsMmIwMqeopPfjVRoBOkOfk7-TK9OzURfSHsEIDbbIlvejK23Ike2u1IbP5rNKyl4b6FI56s2cVP7NO3cV4V6SD9oMMLRwCo08lFeF51EagUBnS8oEHwwRoI1XClA/w214-h320/Gozos_de_Nuestra_Se%25C3%25B1ora_de_las_Angustias_Patrona_de_la_Ciudad_y_Reino_de_Granada_Texto_impreso__1.jpg" width="214" /></a></div><p style="text-align: center;"><span style="font-family: trebuchet;"><i>Gozos de Nuestra Señora de las Angustias, Patrona de la Ciudad y Reino de Granada</i> (Barcelona, 1891). </span><span style="font-family: trebuchet;">El único documento que he encontrado con mención a un patrón del Reino de Granada, y su tardía fecha (ya desaparecido el Reino de Granada) nos invita a pensar que es una licencia particular. Este documento confirma la ausencia de un patrón oficial del Reino de Granada, así como la fuerza de la Virgen de las Angustias como potencial patrona.</span></p><p><br /></p><p>La fiesta de la Virgen de las Angustias se celebra el 15 de septiembre, durante la onomástica de la Virgen de los Dolores. Además de su misa principal, en la Basílica de la Virgen de las Angustias (Carrera de la Virgen, Granada), los actos por las fiestas patronales incluyen la ofrenda floral que se viene realizando desde hace 40 años -y que este año cumple su 40º aniversario-, y la procesión de la Virgen de las Angustias por Granada desde su Basílica el último domingo del mes. Además, cabe destacar <i>la torta de la Virgen (de las Angustias)</i>, un dulce típico de este período que se vende en ocasión de la fiesta de la Virgen de las Angustias.</p><p>Este año en particular, la fiesta de la Virgen de las Angustias ha coincidido con diversas circunstancias externas reseñables. En primer lugar, como ya hemos adelantado, es el 40º aniversario de la celebración de las ofrendas florales a la Virgen de las Angustias, surgidas a imitación de las que se realizan a la Virgen del Pilar de Zaragoza, por lo que la Hermandad Sacramental de la Virgen de las Angustias ha realizado una exposición en su antiguo Hospital para conmemorar la efeméride. En segundo lugar, cabe destacar el anuncio del arzobispo de Granada de que no se va a celebrar la tradicional procesión de la Virgen de las Angustias este año, justo un día después de que todos los demás obispos de Andalucía autoricen la restauración del culto público. Y, en tercer lugar, la polémica causada por el anuncio del ayuntamiento liberal del calendario de festivos, en las que se considera festivo el "Día de Mariana Pineda", pero no la fiesta de la Virgen de las Angustias.</p><p><br /></p><p><b>2. Ofrenda floral y Misa.</b></p><p>Con la idea de participar en los actos de la Virgen de las Angustias como patrona de Granada y reivindicarla como patrona de su Reino, el Círculo General Carlos Calderón de Granada decidió hacer acto de presencia en los actos por la fiesta de la Virgen de las Angustias. En un principio, la idea era participar en la ofrenda floral y hacer una ofrenda en el nombre del Círculo, pero al decidirse la participación de éste con sólo unos pocos días de antelación y debido a ciertas complicaciones logísticas, se acordó limitarnos a asistir a la Misa por la Virgen de las Angustias y participar en la ofrenda floral al año siguiente con mejor preparación.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhII60l_Y8Q7Ukfe7yQCdtSdG5OLKEToroxVgjXRr1N0IxAUIXTCKAwKzMoCmZ-CLqB60dmjVXjed9UmBea4R5ao3QpIjU-QfpLdolU6zAr0shgstUBdv697IyBcEtdqCLJH5g2bZd_jB4/s2016/IMG-20210915-WA0036.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1512" data-original-width="2016" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhII60l_Y8Q7Ukfe7yQCdtSdG5OLKEToroxVgjXRr1N0IxAUIXTCKAwKzMoCmZ-CLqB60dmjVXjed9UmBea4R5ao3QpIjU-QfpLdolU6zAr0shgstUBdv697IyBcEtdqCLJH5g2bZd_jB4/w400-h300/IMG-20210915-WA0036.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Los cuatro, entre miembros y simpatizantes, que<br />asistimos en nombre del Círculo General Carlos Calderón <br />de Granada a la Misa por la Virgen de las Angustias. </td></tr></tbody></table><p style="text-align: center;"><br /></p><p><span><b> 2.1. La Ofrenda floral.</b></span></p><p><span>La Ofrenda floral comenzó en la noche del día anterior a la fiesta de las Angustias cuando, una vez montada la estructura en</span> la que se realizaría la ofrenda, el Cuerpo de Bomberos de Granada colocó una corona de flores sobre la Piedad de la fachada de la Virgen de las Angustias, como su ofrenda particular.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhsGta2gwX0DlNmsIUo_uVNH3bNsuFSe0aKYuA0NF7KUGKkQmXeP5J_oiu9sWp3B9n7sLHzAxdw1eTi-EnY-s5aB1E091uOtLEc5LKjCroS9pdkq_HeBBfhT7Wp5WIHttlVP4IWUWmNjaU/s2048/IMG_20210916_174252.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhsGta2gwX0DlNmsIUo_uVNH3bNsuFSe0aKYuA0NF7KUGKkQmXeP5J_oiu9sWp3B9n7sLHzAxdw1eTi-EnY-s5aB1E091uOtLEc5LKjCroS9pdkq_HeBBfhT7Wp5WIHttlVP4IWUWmNjaU/s320/IMG_20210916_174252.jpg" width="240" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><br />La Piedad de la fachada de la Basílica de la<br />Virgen de las Angustias. Se puede ver la corona <br />de flores que fue colocada en la noche del día <br />anterior por el cuerpo de bomberos de Granada.</td></tr></tbody></table><br /><div>La ofrenda floral se realiza de la siguiente manera. En la fachada principal de la Basílica, a ambos lados de la puerta, se encuentra la estructura en la que se realiza la Ofrenda Floral. Los granadinos y otros fieles hacen cola frente ella y entregan un ramo de flores. En la estructura, hay dos operarios atados con arneses, que cogen los ramos y los van colocando en esta estructura, que se asemeja a dos cuadrados verdes en los que se introducen los ramos. </div><div><br /></div><div>Una vez acabada la ofrenda, los dos cuadrados de la puerta aparecen completamente llenos de flores.</div><div><br /><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhLkhRj44XRSiWuIoXf3PSte5SGYeh7_KyChRPw9-dme37RUfuW5M6vqKbfNdHSaVxtDTyakTLjYmxNNOw6Pl9-jDWi6FsRX4M7KT3BMZhwidH3OQVC-gX9CcOfciQV_XPBp9ppPya9l0I/s2048/IMG_20210916_174244+%25281%2529.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1169" data-original-width="2048" height="366" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhLkhRj44XRSiWuIoXf3PSte5SGYeh7_KyChRPw9-dme37RUfuW5M6vqKbfNdHSaVxtDTyakTLjYmxNNOw6Pl9-jDWi6FsRX4M7KT3BMZhwidH3OQVC-gX9CcOfciQV_XPBp9ppPya9l0I/w640-h366/IMG_20210916_174244+%25281%2529.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Fachada de la Basílica el 14 de septiembre, con la estructura para la Ofrenda repleta de flores.</td></tr></tbody></table><br /><div>Debido a las circunstancias especiales provocados por la COVID-19, se han introducido una serie de novedades con respecto a la celebración tradicional de la Ofrenda. En vez de hacer cola, se estableció un recorrido vallado para que los fieles no se agolparan provocando una multitud. Además, se concedió un amplio horario en el que se podía hacer la ofrenda floral a lo largo de todo el día, desde las 9:00 horas a las 21:00. <p><b><span> 2.2. </span>La Misa.</b></p><p>En total, hicimos acto de presencia cuatro miembros y simpatizantes del Círculo, que fuimos llegando entre las 11:00 y las 12:00. En estos momentos, apenas se empezaba a realizar la ofrenda floral, y las puertas de la Basílica estaban cerradas, no abriéndose hasta las 12:00-12:15.</p><p>Una vez abiertas, entramos, y cabe destacar la gran multitud que se encontraba dentro, aún a pesar de que entramos tan rápido como pudimos para coger sitio; hasta el punto de que ni siquiera pudimos sentarnos los cuatro en un mismo banco, si bien estábamos relativamente cerca.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj8QyPTaY95vzNNXp4oKiXmaygaRkZqybhhIsND8bhUHRgWXgJV5MFwibZ3-lWCKAdwBrAKH-iPtyHpDw1HYPOxH5nu4IHVwrRofnYWNne3sIsx3HbzifYRiv3-9Dtah7NO644c11e7L6s/s2048/IMG_20210915_121415.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1536" data-original-width="2048" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj8QyPTaY95vzNNXp4oKiXmaygaRkZqybhhIsND8bhUHRgWXgJV5MFwibZ3-lWCKAdwBrAKH-iPtyHpDw1HYPOxH5nu4IHVwrRofnYWNne3sIsx3HbzifYRiv3-9Dtah7NO644c11e7L6s/w400-h300/IMG_20210915_121415.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><br />El interior de la Basílica. <br />A la derecha, se puede observar el "paraguas" o umbrella con los <br />colores púrpura y blanco, coronado por las llaves de San Pedro.</td></tr></tbody></table><br /></div><div>La Misa por la Virgen de las Angustias fue oficiada por el arzobispo de Granada, Francisco Javier Martínez Fernández. Contó con la asistencia de la Hermandad de la Virgen de las Angustias, que paseó su guion en procesión antes de empezar la Misa, así como la Archicofradía del Rosario y la Cofradía de la Virgen de las Angustias Coronada de la Alhambra. Se trató de una misa pontifical, con un umbella de color púrpura y blanco y con las llaves de San Pedro, y que fue acompañada por música y cantos. </div><div><br /><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg-zdhayvsOuR-iRlJQtlWT0rIsrpAms5lWfKo78M6PuM5H1iSds5TOPHU38NaLJaBz4qY8eDFMjAb85eke-L41UD64aXc5xVtQGFG-Mcg7OAqoes4OBLMuY_euMpG9YERyHQrF4bO1Woc/s2048/IMG_20210915_123057.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg-zdhayvsOuR-iRlJQtlWT0rIsrpAms5lWfKo78M6PuM5H1iSds5TOPHU38NaLJaBz4qY8eDFMjAb85eke-L41UD64aXc5xVtQGFG-Mcg7OAqoes4OBLMuY_euMpG9YERyHQrF4bO1Woc/s320/IMG_20210915_123057.jpg" width="240" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><br />Procesión del guion de la Muy Antigua, <br />Pontificia y Real e Ilustra Hermandad <br />Sacramental de Nuestra Señora de las Angustias.</td></tr></tbody></table><br /><div>De la homilía, pronunciada por el Arzobispo, cabe mencionar el énfasis a los dolores de la Pasión de Cristo en la redención del género humano, y la necesidad de nosotros los fieles de ofrecer nuestro propio sufrimiento y dolores (de forma análoga a los ofrecidos por la Virgen) a Cristo. Además, desde mi perspectiva, cabe mencionar la ausencia dentro de la Homilía de referencias a la Virgen de las Angustias o a la ciudad de Granada y su archidiócesis, de forma equivalente a cómo se hizo en la Capilla Real con las virtudes de la Reina Católica en el aniversario de su nacimiento.<p>Acabada la Misa, normalmente se dan los vítores y vivas a la Virgen de las Angustias y a la ciudad de Granada, pero antes de eso, el Arzobispo emitió una noticia pública. Esta pausa no fue oída por los asistentes que esperaban fuera, quiénes dieron los vítores sin esperar a la noticia, dando una situación algo irónica en la que se dieron vítores fuera y dentro de la Basílica en dos momentos distintos. La noticia que dio el arzobispo fue que con las nuevas medidas, los templos podían volver a celebrar misa con el 100% del aforo (aunque se mantenía la distancia social), así como la noticia ya sabida de que la procesión tradicional de la Virgen de las Angustias no se iba a celebrar. Según el arzobispo, porque se agolparía una grandísima cantidad de gente por el amor del pueblo granadino a la Virgen de las Angustias, y no se podría asegurar las medidas de seguridad. Algunos de los miembros de nuestro círculo decidieron abandonar el templo en actitud de disconformidad. Acabada la intervención del arzobispo (ahora sí), se dieron los vítores a la Virgen de las Angustias y a la ciudad de Granada.</p><p><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiOBnb_HtNA0pWibAgFgM6jehs5pYU4hDakSCVkd9MMoa9BbT2BS9rjSgJyNpzvIOOlPiiiUrPhroJRUu2IpSZhLJ-LIdFEDU4eQgp9gfGPO1Pp61-SnLCAXw2QDa7QXquHzVsD1PHpvdU/s1920/IMG_20210915_132234.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="1080" data-original-width="1920" height="360" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiOBnb_HtNA0pWibAgFgM6jehs5pYU4hDakSCVkd9MMoa9BbT2BS9rjSgJyNpzvIOOlPiiiUrPhroJRUu2IpSZhLJ-LIdFEDU4eQgp9gfGPO1Pp61-SnLCAXw2QDa7QXquHzVsD1PHpvdU/w640-h360/IMG_20210915_132234.jpg" width="640" /></a></p><p><b><br /></b></p><p><b>3. Epílogo. Exposición y "procesión inversa" de la Virgen de las Angustias.</b></p><p>La estructura con la Ofrenda Floral se terminó de llenar a lo largo de todo el día 15, y, ya llena, se dejó frente a las puertas de la Basílica durante un par de días más. </p><p>Hasta el fin de septiembre, estuvo en el antiguo hospital la exposición por el 40º aniversario de la Ofrenda Flora . Ésta se distribuía a lo largo de dos estancias -el antiguo hospital y la casa parroquial, que se encuentran junto a la Basílica formando un sólo edificio. En la primera estancia, correspondiente al antiguo hospital, se expusieron los carteles por las fiestas de la Virgen de las Angustias pintados a lo largo de estos 40 años; destacando las referencias conmemorativas al pintor Hipólito Llanes, jubilado en 2006 y pintor de los carteles de la Virgen de las Angustias hasta entonces. La segunda estancia, correspondiente a la casa parroquial, contaba con recortes de periódicos de todos los 15 de septiembre entre 1981 y 2021, y con una maqueta a tamaño real con la estructura de la ofrenda floral en 1981 comparada con la realizada en 2021, incidiendo en los cambios y evolución para garantizar la seguridad de los operarios.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEieXppXegJsau8iOO7_zkjwcLk8or45g_lBNLHuWWi5THvdSVOYN8hWsfA1ZOyELbcD0wVmIhSh1aIBWcTMOiTCYIxymJ2HNHV2vLnIVJwWuHi7ic_iIpTouUY6tcUh4mnBWSr74LX6TQE/s2048/IMG_20210916_193528%255B1%255D.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1536" data-original-width="2048" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEieXppXegJsau8iOO7_zkjwcLk8or45g_lBNLHuWWi5THvdSVOYN8hWsfA1ZOyELbcD0wVmIhSh1aIBWcTMOiTCYIxymJ2HNHV2vLnIVJwWuHi7ic_iIpTouUY6tcUh4mnBWSr74LX6TQE/s320/IMG_20210916_193528%255B1%255D.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><br />Carteles pintados de los años anteriores de la <br />fiesta de la Virgen de las Angustias.</td></tr></tbody></table><p style="text-align: center;"><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjQK1_aVpaOfTZWkJOKwnqqCXIGBXD15ncG5KSv2hHYenATBUKW4x-TLKEwgQfQGtLdi4UjplAHye2yw1Uy9AOs6LqF415SI7IJZiT8hDTvAG3LwxJgMAmzh3DsVTdKDzd-hqu1O3p-84w/s2048/IMG_20210916_193440%255B1%255D.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1536" data-original-width="2048" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjQK1_aVpaOfTZWkJOKwnqqCXIGBXD15ncG5KSv2hHYenATBUKW4x-TLKEwgQfQGtLdi4UjplAHye2yw1Uy9AOs6LqF415SI7IJZiT8hDTvAG3LwxJgMAmzh3DsVTdKDzd-hqu1O3p-84w/s320/IMG_20210916_193440%255B1%255D.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><br />Maqueta de la estructura antigua para la <br />ofrenda floral (izquierda) y la moderna (derecha).</td></tr></tbody></table><div style="text-align: center;"><br /></div><p>En cuanto a la procesión, el domingo 26 de septiembre, último del mes, se sacó a la imagen de la Virgen de las Angustias a las puertas de la Basílica, para que pudieran ser contempladas por los granadinos. Para ello, se estableció un recorrido vallado, en la que los asistentes se aproximaban y veneraban a la patrona de Granada. </p><p>Según <a href="https://www.granadahoy.com/granada/personas-Patrona-Granada-registrar-incidencias_0_1614439612.html" target="_blank">Granada Hoy</a>, la Virgen estuvo expuesta a veneración pública desde las 15:00 hasta las 20:00, y se organizó el recorrido de forma que tenía una única entrada, que entraba cerca de la plaza Bibataubín y salía por la plaza del Humilladero, asistiendo hasta 50.000 fieles para venerar a la Patrona de Granada.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiw0PQX4_EzYEs9AYey9Q6Nqe4BqDS-1GJKFlMFQkgwp9wcKXL3DHoLqCdf3XiDSUuR7ainjjq1qoaOaqjohFXu8QoUrEtRrOU_QlF8ZxsgxZw63eTI3UXFrAswwXCDJcn0Jn77U9xmh2s/s1218/Screenshot_2021-09-26-21-25-51-789_com.instagram.android.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1218" data-original-width="1080" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiw0PQX4_EzYEs9AYey9Q6Nqe4BqDS-1GJKFlMFQkgwp9wcKXL3DHoLqCdf3XiDSUuR7ainjjq1qoaOaqjohFXu8QoUrEtRrOU_QlF8ZxsgxZw63eTI3UXFrAswwXCDJcn0Jn77U9xmh2s/s320/Screenshot_2021-09-26-21-25-51-789_com.instagram.android.jpg" width="284" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">La Virgen de las Angustias expuesta el 26 de septiembre <br />para veneración pública, en las puertas de su Basílica.</td></tr></tbody></table></div></div></div>Carolus Vhttp://www.blogger.com/profile/02537979792215294843noreply@blogger.com0Granada, España37.1773363 -3.59855718.8671024638211549 -38.7548071 65.487570136178846 31.5576929tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-84635238685738396252021-09-08T05:00:00.309+02:002021-09-12T17:32:03.322+02:00Centenario de Antonio Blanes Zayas, el heroico legionario y carlista granadino que fue elogiado por Millán Astray<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj2Ck7L6Ido4tdpgW6B36Crqn7s1SHRVqEqdiAgTV3wCs8Y00ynW83Milu0cGDuG2gGeYsnk0IVGgOauPae62yOBC5J04esZCGpHPWu1RrH1HRohEQtFR-VtCUeAEdvhE9vkcLLqiM_8-Y/s605/Antonio+Blanes+Zayas.jpg" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" data-original-height="605" data-original-width="276" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj2Ck7L6Ido4tdpgW6B36Crqn7s1SHRVqEqdiAgTV3wCs8Y00ynW83Milu0cGDuG2gGeYsnk0IVGgOauPae62yOBC5J04esZCGpHPWu1RrH1HRohEQtFR-VtCUeAEdvhE9vkcLLqiM_8-Y/s320/Antonio+Blanes+Zayas.jpg" /></a></div><div>D. Antonio Blanes y Zayas nació alrededor del año 1875 en una familia de la alta sociedad de Granada.<span style="font-size: x-small;">[1]</span> Era hijo de D. Juan Manuel Blanes Lueg (†<a href="http://www.bibliotecavirtualdeandalucia.es/catalogo/es/catalogo_imagenes/grupo.cmd?path=123216&presentacion=pagina&posicion=3" target="_blank">1926</a>), militar oriundo de Barcelona, y de la aristócrata granadina D.ª Matilde de Zayas-Fernández de Córdoba y Trujillo, hija del marqués de Cavaselice. Por vía materna descendía, entre otros ilustres personajes, de D. Antonio Domingo Fernández de Córdoba, marqués de Valenzuela y gentilhombre de la Boca de Felipe II, y de D. <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Diego_Fern%C3%A1ndez_de_C%C3%B3rdoba_y_Carrillo_de_Albornoz" target="_blank">Diego Fernández de Córdoba y Carrillo de Albornoz</a>, conde de Cabra, quien hizo prisionero al rey moro Boabdil en la batalla de Lucena (1483).</div><div><br /></div><div>Sus ideales religiosos y patrióticos le hicieron militar en la Comunión Tradicionalista, de cuya junta provincial fue vicepresidente en la década de 1910.<span style="font-size: small;">[2]</span> De profesión fue un exitoso abogado colegiado. </div><div><br /></div><div>En agosto de 1921, nada más conocer el desastre de Annual e incapaz de permanecer impasible ante aquella desgracia, a sus 46 años de edad decidió alistarse voluntario al recién fundado Tercio de Extranjeros, y marchó a Melilla para luchar por su Patria.<span style="font-size: small;">[3]</span></div><div><span style="font-size: small;"><br /></span></div><div>Halló gloriosa muerte tal día como hoy, 8 de septiembre, hace exactamente cien años. El diario tradicionalista <i><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/El_Pensamiento_Espa%C3%B1ol_(1919-1922)" target="_blank">El Pensamiento Español</a></i> lo narró así:</div><div><br /></div><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><div><i>COMO MURIÓ EL LEGIONARIO BLANES</i></div><div><i><br /></i></div><div><i>GRANADA 14. Un capitán de Artillería del 4.º ligero ha dirigido una carta a la condesa de Guadiana, hermana del legionario del Tercio D. Antonio Blanes Zayas, abogado de Granada, el cual murió gloriosamente, el jueves anterior, en el combate de Beni-Sicar. </i></div><div><i><br /></i></div><div><i>Dice que, a las cinco de la mañana del día 8, salieron fuerzas de Regulares y del Tercio para proteger la construcción de un blocao. Para ello tomaron las posiciones adelantadas al sitio en que trabajaban los ingenieros. </i></div><div><i><br /></i></div><div><i>En el avance asaltaron y tomaron una casa, en la que los moros se defendieron fuertemente. Una vez en la azotea, el legionario Blanes contuvo un momento de debilidad de la gente, poniéndose de pie y tremolando la bandera, por lo que fue muy felicitado. </i></div><div><i><br /></i></div><div><i>Al poco rato hubo muchos heridos en las guerrillas y se mandó avanzar a unos cuantos para retirar a aquéllos. </i></div><div><i><br /></i></div><div><i>Blanes, que retiraba a un herido, llevándolo a cuestas, recibió un balazo que le dejó mal herido, y a consecuencia del cual murió a los diez minutos. El médico, Sr. Segala, que le asistió en el mismo campo, refiere que, cuando Blanes comprendió que le faltaba la vida, sacó del pecho una medalla de la Virgen de las Angustias que al despedirle le había regalado su hermana, la condesa de Guadiana, y, besándola, expiró. </i></div><div><i><br /></i></div><div><i>Añade la carta que la conducta del heroico legionario ha causado general admiración, pues hasta cuando lo llevaban en la camilla fue dando vivas a España y a Millán Astray. </i></div><div><i><br /></i></div><div><i>Fue enterrado en una fosa especial, envuelto en la bandera española. </i></div><div><i><br /></i></div><div><i>En el acto del entierro, el teniente coronel Millán tuvo elogios para él, cuya conducta ofreció como modelo.</i><span style="font-size: small;">[4]</span></div></blockquote><div><br /></div><div>A título póstumo, le fue otorgada la Cruz Laureada de San Fernando.<span style="font-size: small;">[5]</span><br /><br />En carta dirigida al periodista José Ortega y Munilla, el entonces Teniente Coronel Millán Astray relató de este modo la muerte del heroico Antonio Blanes:<br /><br /><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><i>Después de asaltado un reducto enemigo, del que se le echó con la bayoneta, en feroz reacción, se luchó unas horas a distancia, no mayor de tres o cuatro metros; cada hombre que caía precisaba recogerlo para evitar que siguiese siendo herido, y los que por él iban caían también irremisiblemente. </i><div><i><br /></i></div><div><i>Don Antonio Blanes era el abanderado de nuestro intangible pabellón, y la enseña negra y amarilla de los jabalíes la había clavado orgulloso en la pequeña ciudadela del reducto, y allí flameó al viento todo el día, insultando al moro, que se vengaba disparando con saña sobre el guión de la bandera. Blanes (aliviado de su preciosa carga, que había puesto en donde se ha dicho, en el momento más recio del combate, cuando los que iban a recoger muertos o heridos no volvían al puesto de socorro, porque ellos, a su vez, necesitaban que fuesen a por ellos) marchó contento y orgulloso a sufrir la suerte de los heroicos camilleros, y, en efecto, cuando volvió, estaba moribundo, y no tuvo tiempo para más que para decirme: ¡Viva la Legión!, y besar amorosamente una efigie que pendía de su noble pecho. </i></div><div><div><i><br /></i></div></div><div><div><i>Así murió el legionario don Antonio Blanes y Zayas. </i> </div></div></blockquote><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><div><div> </div></div></blockquote><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><div><div><i>Le saludo con el mayor respeto y cariño, Millán Astray.</i><span style="font-size: small;">[6]</span></div></div></blockquote><div><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjuNGFh43QQoFiul6As7PMUUx2mlOUAA_HmqN6KiAfXqmjcfZkSYiMlxSekAJ5U8AokzXEDBAQUsn_YT04yinoL6CvxXAJqc07McwnVls8DGFShEs_hXSWfMnwcIXRLHf7Tv5dFFIb_bo0/s440/Esquela+Antonio+Blanes+Zayas.png" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="440" data-original-width="269" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjuNGFh43QQoFiul6As7PMUUx2mlOUAA_HmqN6KiAfXqmjcfZkSYiMlxSekAJ5U8AokzXEDBAQUsn_YT04yinoL6CvxXAJqc07McwnVls8DGFShEs_hXSWfMnwcIXRLHf7Tv5dFFIb_bo0/s320/Esquela+Antonio+Blanes+Zayas.png" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Esquela que le dedicó el<br />Colegio de Abogados de Granada<br /><a href="http://www.bibliotecavirtualdeandalucia.es/catalogo/es/catalogo_imagenes/grupo.cmd?path=47279&presentacion=pagina&posicion=3" target="_blank">Gaceta del sur (13/9/1921)</a></td></tr></tbody></table><br /><br /><div>Cinco años después, en 1926, el fundador de la Legión escribió las siguientes líneas sobre todo lo que le inspiraba el españolísimo nombre de Granada, recordando, como no podía ser de otro modo, a su heroico camarada de armas, nuestro compatricio Antonio Blanes:</div><div><br /><br /></div><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><div><i>La labor que se propone llevar a cabo el NOTICIERO GRANADINO es una labor de españolismo y, por lo tanto, de patriotismo; y ya que he tenido el honor de ser llamado, como uno de tantos, a cooperar a ella, envío estas modestas líneas, puesto que al pedirlas no se exige ninguna condición artística ni literaria para hacerlas.</i></div><div><div><i><br /></i></div></div><div><i>El nombre de Granada suena a nuestros oídos con igual valor que el nombre de España entera, y tras de ese armonioso nombre vemos también la figura de los Reyes Católicos en la Reconquista y en el vencimiento del poder agareno. ¡Quién sabe si desde un elevadísimo punto de vista, en el cual el tiempo no tenga el valor que nosotros le concedemos con la medida de nuestra propia vida, sino que tenga el valor con que se ven las épocas de la Historia, al evocar la guerra contra los moros que pusieron el pie en España, aparezcan unidos sin solución de continuidad aquella epopeya con el presente, y la guerra que hoy sostenemos en África no sea más que la continuación a través de la historia, de la que fue una etapa la rendición de Granada!; para nosotros, para los soldados que seguimos combatiendo contra el infiel agareno —como históricamente les llamamos— el nombre de Granada nos excita, el nombre de Granada nos entusiasma y el nombre de Granada es una enseña que eleva nuestro espíritu y que nos hace pensar constantemente en la victoria. En Granada realizó sus mayores hazañas Hernán Pérez del Pulgar, y nosotros, para perpetuar su memoria y para que sirva de estímulo, tenemos pensado el bautizar la primera Bandera que organicemos de nuestra Legión Extranjera con el nombre del inmortal Hernán Pérez del Pulgar, para rendir homenaje a la grandiosa figura militar de aquel heroico soldado y para que se adorne con sus armas y sus blasones la bandera de la Legión. </i></div><div><div><i><br /></i></div></div><div><div><i>A la Alhambra fuimos aprovechando la ocasión de un viaje de prácticas de la Escuela Superior de Guerra, cuando reglamentariamente visitábamos las fábricas de pólvoras y explosivos de Granada, que por cierto merecen también la admiración y el aplauso de los españoles, pues ya entonces —y han pasado algunos años— eran modelo en su clase y marchaban a la cabeza en la industria militar del mundo entero. No sabemos si somos poetas o no lo somos. Al menos, haciendo versos no hemos podido demostrarlo. Quizás dentro de nuestra alma soñadora se encuentren algunas de las condiciones que son precisas para ser poeta, y bien deploramos en este momento el no saber decir en verso lo que sentimos cuando entramos en la Alhambra de Granada, y por esta misma dificultad de decir de manera elocuente, brillante y esplendente los sentimientos de nuestra alma, diremos tan sólo: Que al entrar en la Alhambra fue tal nuestra emoción, nuestra alegría y nuestro entusiasmo y se revolvieron tan hondamente en nuestro espíritu tantos sentimientos atropellados, todos sublimes, todos puros y quizá alguno —como buen meridional— de honesta sensualidad, que la emoción se apoderó de nosotros, sentimos suave y tenue escalofrío, entusiasmo, ardor apacible, discreto, las palabras no afloran a nuestros labios, sólo sentimos un íntimo placer y el deseo vehemente de que estuviese a nuestro lado la mujer amada.</i></div></div><div><div><i><br /></i></div></div><div><div><i>En Granada nació el héroe legionario <b>ANTONIO BLANES Y ZAYAS</b>, que halló heroica y gloriosa muerte en el combate de Casabona, en Melilla, en el año 1921; cuando los viejos legionarios decimos el nombre de Granada, forzosamente tenemos que añadir el de nuestro legionario Antonio Blanes y Zayas, que a la hora de entregar su vida en la Legión dejó escritas para siempre las reglas de la obediencia militar, pues fue gozoso y decidido a entregarla ante el mandato, tan sólo de la mirada de su jefe, que lo envió a recoger compañeros que caían segados por los proyectiles enemigos, y se lanzó al lugar de la muerte sin vacilación y sin duda y una bala le destrozó su nobilísimo pecho y aun tuvo tiempo y alientos antes de morir de dar los vivas de la Legión e invocar el Santísimo nombre de la Virgen. ¡¡Gloria y loor al granadino Blanes y Zayas, saludemos todos a su recuerdo, y hoy que nuestra alma se siente contenta y feliz por poder rendir este tributo al pueblo en que te vio nacer, recibe —legionario querido— el homenaje de la Legión que, junto con estas líneas que cantan la inmortalidad de tu pueblo adorado, te envía tu compañero que jamás te olvidará y que te ofrenda el testimonio de gratitud de todos los legionarios!! </i></div></div><div><div><i><br /></i></div></div><div><div><i>JOSÉ MILLÁN ASTRAY. </i></div></div><div><div><i>Mayo 1926</i><span style="font-size: small;">[7]</span></div></div></blockquote><div><div>
<br />[1] Véase José Blanes Zabala: <a href="http://www.adurcal.com/enlaces/mancomunidad/guia/niguelas/muller/blanes.htm" target="_blank"><i>Andanzas de un peluquero</i></a>, Ayuntamiento de Nigüelas, 2006.</div></div></div><div>[2] Véase <a href="http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0029768199&page=1" target="_blank"><i>El Correo Español</i> (20/7/1911)</a>. El presidente era <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%A9_Luis_de_Andrada-Vanderwilde" target="_blank">José Luis Andrada-Vanderwilde y Pérez de Herrasti</a>.</div><div>[3] Véase <a href="http://www.bibliotecavirtualdeandalucia.es/catalogo/es/catalogo_imagenes/grupo.cmd?path=47251&presentacion=pagina&posicion=3" target="_blank"><i>Gaceta del Sur</i> (11/8/1921)</a>.</div></div><div>[4] <a href="http://www.memoriademadrid.es/doc_anexos/Workflow/1/52823/hem_elpensamientoespanol_19210915.pdf" target="_blank"><i>El Pensamiento Español</i> (15/9/1921)</a>.</div><div>[5] <a href="https://www.abc.es/archivo/periodicos/abc-madrid-19210925-18.html" target="_blank"><i>ABC</i> (25/9/1921)</a>.</div><div>[6] <a href="http://www.bibliotecavirtualdeandalucia.es/catalogo/es/catalogo_imagenes/imagen.cmd?path=178551&registrardownload=1&posicion=1" target="_blank"><i>El Defensor de Granada</i> (1/10/1921)</a>.</div><div>[7] <a href="http://www.bibliotecavirtualdeandalucia.es/catalogo/es/catalogo_imagenes/grupo.cmd?path=124229&presentacion=pagina&posicion=1" target="_blank"><i>Noticiero Granadino</i> (21/5/1926)</a>.</div>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-62258356706230771342021-08-21T17:47:00.026+02:002024-03-08T11:10:10.603+01:00La nación española es milenaria, pero sus regiones no<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjZyP07dFx7zEb8od_ce84pMLXcCgyBAtHf9iFq7alIjCytclxLV6rvZgR93HbEkQzrPPW76PBi8n5D2a0_HJyw-oSK0Imi5zGfqHztpb3sRmnMNrN-nbjGkgn1w4Ii_FxJDTDNNnCL44s/s975/puerta-recopolis.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="515" data-original-width="975" height="211" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjZyP07dFx7zEb8od_ce84pMLXcCgyBAtHf9iFq7alIjCytclxLV6rvZgR93HbEkQzrPPW76PBi8n5D2a0_HJyw-oSK0Imi5zGfqHztpb3sRmnMNrN-nbjGkgn1w4Ii_FxJDTDNNnCL44s/w400-h211/puerta-recopolis.jpg" width="400" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Ruinas visigodas en el Parque Arqueológico de Recópolis. <br /><i>Turismo Castilla-La Mancha</i>.</td></tr></tbody></table><br /><p>Desde hace más de un siglo el término “nación” ha generado ríos de tinta, y no ignoramos que también de sangre, especialmente en los países con pulsiones separatistas, como por desgracia es el caso de España. </p><p>Decía Juan Vázquez de Mella que lo que constituye una nación es la unidad de creencias, y que solo existe una nación cuando ésta se revela por una historia común y a la vez independiente de otras historias. Por eso, para el Verbo de la Tradición, España es una nación, pero no lo es ninguna de sus regiones. <b>[1]</b></p><p>No falta quien arguye que, tal como afirma el DRAE en su tercera acepción del vocablo, <a href="https://dle.rae.es/naci%C3%B3n" target="_blank">nación</a> puede ser cualquier «<i>conjunto de personas de un mismo origen y que generalmente hablan un mismo idioma y tienen una tradición común</i>», por lo que es posible tener naciones como churros, al gusto del consumidor. Sin embargo, rara vez se esgrime esta palabra sin pretender afirmar algo que va más allá de este significado, de manera que podemos decir con seguridad que se trata de un término con carga política.</p><p>Se equivocan quienes afirman que la nación española se construye en el siglo XIX o que el carlismo luchó contra la creación de un Estado moderno (Estado que se había formado ya en España en el siglo XVI, esto es, en su época de mayor esplendor). Lo demuestran innumerables documentos históricos, como la Gaceta Oficial de Oñate, que en un artículo de 1836 (en plena primera guerra carlista) explicó por qué nación y soberanía son cosas distintas <b>[2]</b> o el <a href="https://books.google.es/books?id=y5AWAAAAYAAJ&printsec=frontcover&hl=es#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Código Penal de Carlos VII</a> de 1875, repleto de referencias al Estado y sus atribuciones, por poner solo dos ejemplos de los miles posibles.</p><p>El tradicionalismo español siempre tuvo claro que se puede hablar verdaderamente de España y de españoles desde la conversión del rey Recaredo en el III Concilio toledano del año 589, pues fue a partir de entonces cuando, merced a la unidad católica, los pueblos hispanorromano y visigodo se fundieron en uno solo, que es el nuestro. <b>[3]</b></p><p>¿Desde cuándo existen, en cambio, León, Cataluña o Navarra? No hay duda de que no pueden atribuirse una antigüedad semejante. Algunas regiones españolas, como Andalucía o Valencia, son hijas de otras que estaban más al norte. Las hay que tuvieron Cortes propias, singularmente en la Corona de Aragón, y las hay que, aun conservando la denominación de “reino” (por proceder de una taifa mora), no lo eran más que sobre el papel, pues a efectos prácticos no fueron sino provincias de la Corona de Castilla. Y tampoco faltan las que, ostentando el nada deshonroso título de “provincia”, como Guipúzcoa, gozaron de fueros y privilegios. </p><p>Si hay algo que todas ellas tienen en común es que todas proceden de la fragmentación política que supuso la invasión de Tarik y Muza en nuestro suelo en el año 711. Pero el largo dominio musulmán, lejos de provocar la desaparición de nuestro pueblo (o nación), supuso la reafirmación del mismo, mediante la gloriosa empresa que se llamó la Reconquista.</p><p>Quienes pretenden que las regiones del norte desarrollaron sus propias nacionalidades al margen del resto de la Península parecen ignorar que, como escribió el arabista Francisco Javier Simonet (eminente tradicionalista), durante los primeros siglos de la Reconquista la población de los reinos del norte aumentó casi exclusivamente con los mozárabes llegados del sur, con la consecuente mezcla entre unos y otros. <b>[4]</b> ¿Cómo cabría esperar, si no, que los pocos que poblaban los reinos del norte lograsen derrotar a los muchos que poblaban de Al-Andalus? Así se explica que cuando Fernando III el Santo y Jaime I el Conquistador llegan a Córdoba y Valencia, respectivamente, no encuentran en ellas a mozárabes, pues éstos o sus descendientes se hallaban ya en las filas de sus ejércitos y no hacían más que volver a las tierras de sus abuelos.</p><p>Hablamos, por tanto, de un solo pueblo. Y no creemos casual que éste complete su unidad política, por obra de los ínclitos Reyes Católicos, cuando pone fin a la causa de su división.</p><p>Para negar esta realidad, además del falaz argumento de “singularidad racial” de vascos o catalanes, desmentido por la ciencia, <b>[5]</b> se ha recurrido al de las instituciones propias. Pero en el caso de Vizcaya, por ejemplo, encontramos que sus fueros no proceden de antiquísimos usos consuetudinarios del “pueblo vascón”, sino de las exenciones contempladas en las cartas-pueblas y el fuero de los hidalgos, de origen evidentemente castellano, aunque en la misma Castilla se perdieran en el siglo XIV a consecuencia del uniformador Ordenamiento de Alcalá. <b>[6]</b> En todo caso, nada tenían que ver con una “cultura vasca” diferenciada. De hecho, en muchas ciudades y no pocos pueblos de Vascongadas y Navarra jamás se ha hablado vascuence.</p><p>Algo similar podríamos decir de las famosas <i>Constituciones</i> catalanas. El origen de éstas se remonta a los <i>Usatges</i> de Barcelona promulgados en el siglo XI por el conde Ramón Berenguer I, que no hizo sino compilar las disposiciones que venían aplicándose. Por tanto, no encontramos descabellada la frase “antes fueron leyes que reyes”. Lo que no se dice es que estas disposiciones procedían a su vez del Fuero Juzgo, es decir, del reino visigodo de España. <b>[7]</b> Y es que España es milenaria, pero sus regiones no.</p><p><br /></p><div><b>[1]</b> <a href="https://books.google.es/books?id=VAgqAQAAMAAJ&pg=PA299#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Obras completas de Juan Vázquez de Mella, tomo X</a>, Madrid, 1932, págs. 299 y 303 (véase nuestra anterior entrada de blog <a href="http://reinodegranada.blogspot.com/2019/07/los-conceptos-de-nacion-y-de-estado-en.html" target="_blank">Los conceptos de nación y de Estado en el pensamiento de Juan Vázquez de Mella</a>). </div><div><br /></div><div>De Manuel de Santa Cruz (<a href="https://books.google.es/books?id=ms0eAAAAMAAJ&pg=PA54&lpg=PA54#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Apuntes y documentos para la historia del tradicionalismo español, tomo I, 1979</a>, p. 54) extraemos además el siguiente extracto:</div><div><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjIx4JpxnYL_zXokP4HZoekN3RUykP-cI32PC1r2pB5H8hMvT7rB8tgZ_tqPY2hbzyMWJRuNBGNlNT2jdUerm1he51mVyxYrsSeeOJ_LdUkAW17A6_0ObWU545QvtsNhb2VCaAJgjC4E0M/s664/Estado+y+Naci%25C3%25B3n+seg%25C3%25BAn+V%25C3%25A1zquez+de+Mella.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="256" data-original-width="664" height="246" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjIx4JpxnYL_zXokP4HZoekN3RUykP-cI32PC1r2pB5H8hMvT7rB8tgZ_tqPY2hbzyMWJRuNBGNlNT2jdUerm1he51mVyxYrsSeeOJ_LdUkAW17A6_0ObWU545QvtsNhb2VCaAJgjC4E0M/w640-h246/Estado+y+Naci%25C3%25B3n+seg%25C3%25BAn+V%25C3%25A1zquez+de+Mella.png" width="640" /></a></div><br /><div><b>[2] </b>Lejos de oponerse a una supuesta “construcción nacional”, los primeros carlistas (como antes hicieran los realistas fernandinos) ponían verdadero empeño en demostrar que la Monarquía tradicional era la esencia de la <b>Nación española</b> y la que representaba mejor los intereses del pueblo, calificando en cambio a los liberales como partidarios del caos y la anarquía. </div><div><br /></div><div>El periódico oficial de los defensores de Don Carlos María Isidro (<a href="https://prensahistorica.mcu.es/es/catalogo_imagenes/grupo.do?path=6006449&posicion=4&presentacion=pagina" target="_blank">Gaceta Oficial, n.º 90, 2 septiembre 1836, p. 462</a>) desmontaba, eso sí, la falacia liberal de la “soberanía nacional” con estas palabras:</div><div><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEikWd-oB6I22lzqVhLruDhNnmLM_dVNeWdg_NryR8nJna8uwJ3-KkJnSwNujOEbK6i_DV6Bzdu_xS4i2KlAKaNixhJHU4BZ1QypRVbAaTOCtZ60jCwaA9yA4CFzZrUcK74-VVfp1P1vDkA/s654/Naci%25C3%25B3n+Espa%25C3%25B1ola+en+la+Gaceta+Oficial+de+O%25C3%25B1ate.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="467" data-original-width="654" height="286" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEikWd-oB6I22lzqVhLruDhNnmLM_dVNeWdg_NryR8nJna8uwJ3-KkJnSwNujOEbK6i_DV6Bzdu_xS4i2KlAKaNixhJHU4BZ1QypRVbAaTOCtZ60jCwaA9yA4CFzZrUcK74-VVfp1P1vDkA/w400-h286/Naci%25C3%25B3n+Espa%25C3%25B1ola+en+la+Gaceta+Oficial+de+O%25C3%25B1ate.png" width="400" /></a></div><br /><div>A quienes deseen conocer las verdaderas motivaciones e ideas esgrimidas en las guerras carlistas, recomendamos la lectura de <a href="https://www.actashistoria.com/titulo.php?go=2&isbn=84-87863-31-0" target="_blank">La formación del pensamiento político del Carlismo (1810-1875)</a>, de la profesora Alexandra Wilhelmsen.</div><div><br /></div><div><b>[3]</b> «Conmemorando un cincuentenario», por A. Abad Gómez (<a href="https://prensahistorica.mcu.es/es/catalogo_imagenes/grupo.cmd?path=2206386&posicion=3&presentacion=pagina" target="_blank"><i>El Día de Palencia</i>, 7 mayo 1939, p. 3</a>). A este respecto, aconsejamos también la lectura de una obra de Modesto Hernández Villaescusa titulada <a href="https://web.archive.org/web/20180613001105/https://www.pdf-archive.com/2018/06/13/recaredoylaunidadcatolica/recaredoylaunidadcatolica.pdf" target="_blank">Recaredo y la unidad católica</a> (1890).</div><div><br /></div><div><b>[4]</b> Simonet, Francisco Javier (1897-1903). <a href="https://books.google.es/books?id=5_s1AQAAMAAJ&hl=es&pg=PA141#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Historia de los mozárabes de España. Madrid. p. 141</a>.</div><div><br /></div><div><b>[5] </b>Acerca de los estudios genéticos al respecto, véanse los artículos <a href="https://www.publico.es/ciencias/genes-vascos-no-son-diferentes.html" target="_blank">Los genes de los vascos no son diferentes</a> (2010); <a href="https://www.laopiniondemurcia.es/comunidad/2010/04/05/murcianos-castellanos-catalanes-unidos-adn-32837254.html" target="_blank">Murcianos, castellanos y catalanes, unidos por el ADN</a><i> </i>(2010) o <a href="https://elpais.com/elpais/2019/06/04/ciencia/1559654994_049558.html" target="_blank">Al-Andalus no dejó rastro en la genética del sur de España</a> (2019).</div><div><br /></div><div><b>[6]</b> Pirala, Antonio (1856). <a href="https://books.google.es/books?id=mPdKvVq3qMwC&pg=PA125#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Historia de la guerra civil y de los partidos liberal y carlista, tomo I, págs. 425-426</a>. Aunque se trata de un autor anticarlista, como historiador siempre fue respetado y consultado por los carlistas, y en este punto, como en otros, está en lo cierto.</div><div><br /></div><div><b>[7] </b>Véase <a href="https://books.google.es/books?id=hf-7AAAAIAAJ&pg=PA4#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Fueros de Cataluña: resumen histórico-legal (1870), p. 4</a>. y <a href="https://books.google.es/books?id=tpYWAAAAYAAJ&pg=PA247#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Brocá, Guillermo M.ª; Amell, Juan: Instituciones del Derecho Civil catalán vigente (1880), p. 247</a>.</div>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-69293894290551958742021-04-23T21:53:00.004+02:002021-04-24T17:34:27.859+02:00Reseña: Misa y Ofrenda Floral por el 570º aniversario del nacimiento de Isabel la Católica en la Capilla Real de Granada.<p class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></p><p><i>Nota previa: debido a la prohibición expresa de la Capilla Real de Granada de realizar fotografías o vídeos en el interior de sus instalaciones no se van a realizar en esta entrada reproducciones fotográficas del evento.</i></p><p><br /></p><p>Este 22 de abril de 2021 se han cumplido exactamente 570 años del nacimiento de Isabel la Católica (n. 22 de abril de 1451), y para conmemorar este 570º aniversario, se ha celebrado en la Capilla Real de Granada (así como en otros lugares, como el Palacio de Juan II, casa natal de la Reina Católica) un acto especial que, entre otras cosas ha incluido una ofrenda floral y una misa, de la que hoy vamos a hacer la reseña.</p><p>Como es de todos conocido, la Reina Católica descansa junto a su esposo Fernando el Católico, su hija Juana de Trastámara, su yerno Felipe de Habsburgo y su nieto Manuel de la Paz en la Capilla Real de Granada. La Capilla Real constituye el tercer elemento de la tríada de lugares "isabelinos" conformada por el Palacio de Juan II, un antiguo palacio real castellano dónde nació la Reina Isabel la Católica y que hoy es regentada por las agustinas, el Real Palacio Testamentario, dónde hizo testamento y murió la Reina Católica, hoy centro de interpretación, y, finalmente, la Capilla Real, dónde reposan sus restos mortales. El Palacio de Juan II, de hecho, también ha tenido una función relevante en el aniversario del nacimiento de la Reina, aunque la Capilla Real ha tenido un papel especial por tener en ella el cuerpo de Isabel la Católica, la cual -no lo olvidemos- ostenta el título de Sierva de Dios.</p><p><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh35eC7G1G0dT1RuWmViNQ84UsDnbo0Jtbq9fL8SFihlTB9nAKYSfUUnz3WKfoi7ukG4nXfPxu_3xQ2St1qVOzwEAZotjKrZEpxVkSo_DTdoNFPmtlbiPnsxOdX_wnj_gwnFi2Ihekk79s/s914/Capilla+Real+%25282%2529.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="892" data-original-width="914" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh35eC7G1G0dT1RuWmViNQ84UsDnbo0Jtbq9fL8SFihlTB9nAKYSfUUnz3WKfoi7ukG4nXfPxu_3xQ2St1qVOzwEAZotjKrZEpxVkSo_DTdoNFPmtlbiPnsxOdX_wnj_gwnFi2Ihekk79s/s320/Capilla+Real+%25282%2529.jpg" width="320" /></a></div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: x-small;"><br /></span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: x-small;">Monumento funerario de mármol de los Reyes Fernando (izq.) e Isabel (der.) los Católicos en la Capilla Real de Granada.</span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: x-small;"><br /></span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: x-small;">Fuente: Capilla Real de granada.</span></div><p>Para los que no conozcan la Capilla Real, éste es el lugar de sepultura de los Reyes Católicos, que quisieron hacerse enterrar en la ciudad de Granada. La Capilla se encuentra anexa a la Catedral de Granada, formando un sólo conjunto con la Catedral y la Iglesia del Sagrario. Se puede acceder a ella desde la Gran Vía de Colón, principal arteria de la ciudad de Granada, y, de hecho, es de los primeros edificios a los que es posible acceder en el centro histórico del que forman parte, desde la Gran Vía, junto a la Madraza (antigua escuela islámica hoy usada como centro de conferencias por la Universidad de Granada), la cual se encuentra justo enfrente de la Capilla. </p><p>La Capilla Real supone uno de los principales monumentos de la ciudad, por lo que la visita turística por la Lonja, la Capilla y el Museo-Sacristía supone uno de sus principales atractivos. Además, como espacio religioso tiene su horario de misa pública, es uno de los puntos neurálgicos del Día de la Toma, al custodiarse el Pendón de los Reyes Católicos en la Capilla Real, y se celebran importantes celebraciones por la Toma de Granada (2 de enero) y el Día de la Hispanidad (12 de octubre). También se celebran los aniversarios de la muerte de los Reyes Fernando (23 de enero) e Isabel (26 de noviembre).</p><p><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="600" data-original-width="900" height="266" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEizuhwZsnDUkzzh5SfAabmcnt7JLy5oD7I5pRTnky8KuGazLB7WYptz9ntsEF2grmoBcMm6wFvf0fLvSkCBtVrg2a5wsnx8TS5qaeuodR9yCHqkA16BFXud9OQBAgEkz2T-9clnyJ6oTHU/w400-h266/RLP_0235.jpg" width="400" /></div><p style="text-align: center;"><span style="font-size: x-small;">Tremolación del pendón de los Reyes Católicos el 2 de enero en la Capilla Real. Fuente: EL IDEAL.</span></p><p><br /></p><p>La Capilla Real tiene dos puertas: la primera da acceso a la Lonja, la antigua zona de mercaderes y que hoy en día sirve como puesto de compra de tickets y entrada a la Capilla, y la puerta principal, por dónde habitualmente se accede a la Misa de la Capilla y que lleva directamente al interior del recinto. A continuación, tenemos dos salas separadas por una reja: en la primera están las capillas de la Santa Cruz y San Ildefonso, y en la segunda se encuentran el presbiterio, el retablo mayor y los sepulcros de mármol de los Reyes Católicos y Juana I y Felipe el Hermoso. Estos monumentos se encuentran sobre una pequeña cripta (por la que se entra y se sale por unas escaleras frente a los sepulcros o "mausoleos" de los Reyes) en la que se encuentran los cuerpos de los Reyes Católicos, Juana I, Felipe el Hermoso y el Infante Manuel de la Paz en sencillos ataúdes o sarcófagos de plomo. </p><p><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiBZ5hW9nSii-p9I6SfEWILLqh5tIOI1-ZocTaD8ZARG5cgx3ZKq7StBfov0zM_TEyXQHSsUOym98lb051oF4KPn33-NV7huu_4CANj-4O22S01zksEigVHprjclJd4nV9WSZT0Ouj69r0/s1429/Capilla+Real+%25281%2529.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="890" data-original-width="1429" height="249" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiBZ5hW9nSii-p9I6SfEWILLqh5tIOI1-ZocTaD8ZARG5cgx3ZKq7StBfov0zM_TEyXQHSsUOym98lb051oF4KPn33-NV7huu_4CANj-4O22S01zksEigVHprjclJd4nV9WSZT0Ouj69r0/w400-h249/Capilla+Real+%25281%2529.jpg" width="400" /></a></div><p style="text-align: center;"><span style="font-size: x-small;">Fachada exterior de la Capilla Real. Fuente: Capilla Real de Granada. </span></p><p style="text-align: center;"><span style="font-size: small;">En el frente, la entrada principal a la Capilla. A la izquierda, la usada por los turistas en visitas culturales.</span></p><p><br /></p><p>Ahora, entremos de lleno en el evento. La puerta de la Capilla se abrió más o menos a las 19:00 horas, dónde ya esperaba un pequeño número de gente. Los asistentes irían entrando a la Capilla Real hasta las 19:30, hora en la que empezaría la Misa y Ofrenda floral. Para esto, la Capilla estableció un aforo limitado, con lugares señalados en los bancos y asientos en los que la gente debía sentarse, no dejando a nadie quedarse en pie. El número total de asistentes resultó bastante modesto, limitado al aforo máximo, pero tenemos constancia de que hubo gente que no pudo acceder por haberse alcanzado ya el aforo máximo.</p><p>El acto dio inicio con un discurso inaugural (que comenzó con unos problemas de megafonía) por una mujer cuyo nombre completo no hemos podido averiguar, pero que pertenece al Círculo Cultural Hispanista, con sede en Madrid -y que al parecer también ha organizado una ofrenda floral allí, en el Paseo de la Castellana, por motivo del aniversario del nacimiento de la Reina Católica. El contenido del discurso básicamente se limitaba a recalcar la importancia del acto celebrado. </p><p><br /></p><p style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj9bRejoXmHKFJSLlg4CNbYERDqJsQVjh8SB-P-jJpmXyVLt9cGHVYRAaiLU0QLGTiTP4rkFVfKIARSKTd0POV9YJY-Q2705FMpwUdMuKwTgRpSN-L6Y64hRrY4z2Q8Mx14hiIylILd4aE/s1350/restrato-de-isabel-la-cat%25C3%25B3lica.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1350" data-original-width="1141" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj9bRejoXmHKFJSLlg4CNbYERDqJsQVjh8SB-P-jJpmXyVLt9cGHVYRAaiLU0QLGTiTP4rkFVfKIARSKTd0POV9YJY-Q2705FMpwUdMuKwTgRpSN-L6Y64hRrY4z2Q8Mx14hiIylILd4aE/s320/restrato-de-isabel-la-cat%25C3%25B3lica.jpg" /></a></p><p><br /></p><p>Acto seguido, se dio inicio a la ofrenda floral, en la cual aquellos que hubiesen traído ramos de flores o simplemente flores para entregar en el sepulcro de los reyes, debía colocarlas frente a ellos siguiendo una ruta determinada (que se volvería a repetir al término de la misa para que los fieles pudieran recibir la Comunión). Acabada la ofrenda floral, dio inició la Misa en conmemoración del nacimiento de la Reina Isabel.</p><p>La Misa, fue una ceremonia oficiada por dos sacerdotes y un número más amplio de monaguillos, que contó con la música del órgano de la Capilla y el canto del coro. Se trató de una misa cantada y acompañada por el órgano y el coro, lo que servía (además de darle una gran belleza) para dotarle de una gran solemnidad, a la altura de un acto tan importante como el aniversario del nacimiento de la Reina Católica. Lo más destacable, sin embargo, lo constituyó el sermón del sacerdote que daba la homilía. Éste aprovechó la lectura de los Hechos de los Apóstoles del día 22 de abril (en la que el Apóstol Felipe se encuentra con un eunuco miembro de la corte de Etiopía y que peregrinaba a Jerusalén, haciéndole conocer la Buena Nueva a partir de una lectura que estaba haciendo del libro de Isaías) con una de las características más importantes de Isabel la Católica: la Evangelización de América.</p><p><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEizGMaWorokFbnqfaMcZ_3cf0SFUGP7ZUPX8buwezKTGtDHra7J0qPKsLb_bVGhTNGj2hcL802RDBmOolyro-ig7RmlZ7ykCfSuhudTkwVZiwFZVHUEgkKDJmIHQaYeF1BKkq16DqBPFy8/s900/105x15_Retablo-630x900.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="900" data-original-width="630" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEizGMaWorokFbnqfaMcZ_3cf0SFUGP7ZUPX8buwezKTGtDHra7J0qPKsLb_bVGhTNGj2hcL802RDBmOolyro-ig7RmlZ7ykCfSuhudTkwVZiwFZVHUEgkKDJmIHQaYeF1BKkq16DqBPFy8/w448-h640/105x15_Retablo-630x900.jpg" width="448" /></a></div><br /><p style="text-align: center;"><span style="font-size: x-small;">Retablo mayor de la Capilla Real. Fuente: Capilla Real de Granada.</span></p><p>El sermón hacía especial hincapié en el papel que ejerció la Reina Católica como auténtica madre de la Iglesia hispanoamericana. Por ello, se exponía como ejemplo paradigmático la reciente visita del Nuncio de su Santidad en España, el prelado filipino Bernardito Cleopas Auza, a la Capilla Real de Granada, en el transcurso de la cual se emocionó al entrar en presencia de la Reina Católica, a la cual la América Española, Filipinas y él mismo deben su fe.</p><p>Además de ello, el predicador recordó, especialmente a los defensores de la causa de su canonización, que la mejor forma de honrar a Isabel la Católica no es otra forma sino mediante la oración y la vida cristiana: la imitación de las virtudes de Isabel la Católica. Recordó que la Reina dedicaba dos horas al día a la oración, dándole a Dios así un "diezmo" de su tiempo y sacando de Él la fuerza para sobreponerse a las adversidades familiares (que no fueron pocas), que dos días a la semana dedicaba a hacer justicia a los pobres y a oír en audiencia a todo aquel que lo requiriese, y destacando en último lugar la gran importancia que tenía para ella la familia. </p><p>Finalmente, acabada la Misa, se abrió la cripta en la que se encuentra sepultada la Reina Isabel la Católica y la Sacristía-Museo, siguiendo la misma ruta turística que no se hacía desde el último estado de alarma. Los visitantes tuvieron la posibilidad de bajar a la cripta y presentar sus respetos a los restos mortales de la Reina, además de recoger una "estampita" que se abre con forma de libro y en cuyo interior, entre otras cosas, hay escrita una oración para la Reina Isabel. </p><p><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEivoQpoLmOxthWfaNikT7JvBHWZ0LmIeHif4JXGxt6dkZVX4kZ5FsZb6NKV0LcOgbivY8RhKySkILB-euYpExrBdaQtufKUzYkN8xrdxk8thTbwum5d6pFsxhQA16YtEOmFqp1agCgJioM/s1440/sarcofagos_11x20-1440x803.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="803" data-original-width="1440" height="223" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEivoQpoLmOxthWfaNikT7JvBHWZ0LmIeHif4JXGxt6dkZVX4kZ5FsZb6NKV0LcOgbivY8RhKySkILB-euYpExrBdaQtufKUzYkN8xrdxk8thTbwum5d6pFsxhQA16YtEOmFqp1agCgJioM/w400-h223/sarcofagos_11x20-1440x803.jpg" width="400" /></a></div><p style="text-align: center;"><span style="font-size: x-small;">Cripta de la Capilla Real. Fuente: Capilla Real de Granada.</span></p><p style="text-align: center;"><span style="font-size: x-small;">En el centro, se encuentran los sarcófagos de los Reyes Católicos. </span><span style="font-size: small;">En los "bancos", los sarcófagos de Felipe el Hermoso, Juana la "Loca" y el Infante Manuel de la Paz.</span></p><p>Luego de eso, tuvieron la oportunidad de dirigirse a la Sacristía-Museo, dónde se encuentran múltiples objetos de la Reina Isabel, como su corona, su cetro y su misal, así como otros objetos como la espada del Rey Fernando, los guiones de los Reyes y su Pendón, diversos cuadros góticos y dos estatuas orantes a tamaño real de los Reyes, para finalmente salir por la tienda -con múltiples objetos religiosos y profanos que normalmente están disponibles en la tienda (Librería) de Cruz de Elvira (Plaza de Alonso Cano). </p><p><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjhyphenhyphenTaxPy6lIDal1oX4ubZJIYurjXexDrTumotDspWKGVdcEzbzVox8K4FVJHzvr_fEneQhtn7qTBQo3kV81USBdsAwDzeB3SUS3VFxqOZFI0EltTryAim9UqKJzr8TmNDVDmvkSdSpio8/s1448/Capilla+Real+%25283%2529.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="641" data-original-width="1448" height="284" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjhyphenhyphenTaxPy6lIDal1oX4ubZJIYurjXexDrTumotDspWKGVdcEzbzVox8K4FVJHzvr_fEneQhtn7qTBQo3kV81USBdsAwDzeB3SUS3VFxqOZFI0EltTryAim9UqKJzr8TmNDVDmvkSdSpio8/w640-h284/Capilla+Real+%25283%2529.jpg" width="640" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-size: x-small;"><br /></span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-size: x-small;">Museo de la Capilla Real. Fuente: Capilla Real de Granada.</span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-size: x-small;">Sacristía de la Capilla Real habilitada como Museo. En primer término, puede observarse (en el triángulo de cristal), la corona de la Reina, la espada de Fernando el Católico y el cetro de Isabel la Católica. Al final, también se ven, a ambos lados de un modesto retablo, estatuas orantes de los reyes Católicos.</span></div><br /><p><br /></p>Carolus Vhttp://www.blogger.com/profile/02537979792215294843noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-1634981331488851672021-03-15T23:35:00.044+01:002021-03-15T23:51:22.646+01:00Exposición temporal. Laetare: la memoria de la madera. Reseña y reportaje fotográfico.<p> </p><p>Laetare: la memoria de la madera.</p><p><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgaixSLRslv8J8sUAMyFOSRtzba_oQ3hfzU94fD3gwnxfeGQ4qRrGoCaktSh4r4HDpfWzizxiRTBPwlzkJF2uHKBJh49w40FSTsYG67tD8xuPQZ-kULI2l6bMUcmWy0qACwfsAnx44kXIY/s2048/Cartel-Exposicion-LEATARE-la-memoria-de-la-madera-1448x2048-1.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="1448" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgaixSLRslv8J8sUAMyFOSRtzba_oQ3hfzU94fD3gwnxfeGQ4qRrGoCaktSh4r4HDpfWzizxiRTBPwlzkJF2uHKBJh49w40FSTsYG67tD8xuPQZ-kULI2l6bMUcmWy0qACwfsAnx44kXIY/w283-h400/Cartel-Exposicion-LEATARE-la-memoria-de-la-madera-1448x2048-1.jpg" width="283" /></a></div><p><br /></p><p>Desde el sábado 13 de marzo de 2021 hasta el próximo 4 de abril de 2021 -salvo días del Triduo a la Virgen de los Dolores y el Lunes Santo- está abierta en el Museo-Convento de las Carmelitas Calzadas (calle Monjas del Carmen, Realejo, Granada) la exposición temporal <i>Laetare: la memoria de la madera</i>, en ocasión del 60º aniversario de la bendición de la imagen de la Virgen de los Dolores que es titular de la Real Cofradía de la Virgen de los Dolores. La exposición estará abierta todas las tardes desde las 16:00 hasta las 18:00, y la entrada es gratuita, aunque se puede dejar un donativo a discreción del visitante para el convento y la Cofradía.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj8bRBriZm_51tM8IINiO-CIAgl-H5GHQytHgQKiL0xl2dtIreFrKJMn4hnXyqZY5KNOaA5b4GWzpdhOswS8Vgz63XAMTTHYjQwt-vTgFwKPPSzEVhRK9gF0dt-Iy0_txw-EcRl8HESzTE/s2048/IMG_20210314_162557%255B1%255D.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj8bRBriZm_51tM8IINiO-CIAgl-H5GHQytHgQKiL0xl2dtIreFrKJMn4hnXyqZY5KNOaA5b4GWzpdhOswS8Vgz63XAMTTHYjQwt-vTgFwKPPSzEVhRK9gF0dt-Iy0_txw-EcRl8HESzTE/s320/IMG_20210314_162557%255B1%255D.jpg" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><div><span style="font-size: x-small;"><br /></span></div><div><span style="font-size: x-small;"> </span>Museo-Monasterio de la Encarnación (1508) en Calle Monjas del Carmen (Realejo).</div><div><br /></div><div><br /></div></td></tr></tbody></table><p><br />La Real Cofradía de la Virgen de los Dolores nació en 1940 al amparo del Tercio de Requetés de Isabel la Católica. Su sede originalmente estaba ubicada en la iglesia de Santa María Magdalena (Calle Puentezuelas) hasta 1960, en que se trasladó a la iglesia del monasterio de San Antón (Calle Recogidas), y finalmente volvió a trasladarse a la iglesia de San Pedro y San Pablo (Carrera del Darro) en 1970, por lo que ha recibido el sobrenombre de <i>la Hermandad viajera</i>. La imagen de la Virgen de los Dolores procesiona el Lunes Santo desde el Monasterio de San Bernardo, frente a la iglesia de San Pedro y San Pablo. En la capilla de la Virgen de los Dolores de esta última puede encontrarse una bandera del Tercio Isabel la Católica-Cofradía de la Virgen de los Dolores de 1945.</p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjlW_trKCJem4sOGCIaqMfAHedUN2qFVQvTRAZ_3JYjmm6grgLkxmJI41djSeqDr2MyDdAHhII-R3Qexn-lsnmuMiKX5eWSyk519dXS6H8TfqsQh0HLCQpoX5cJPW-roSI1eY-XC_vsgfw/s2048/IMG_20200303_130958.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1536" data-original-width="2048" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjlW_trKCJem4sOGCIaqMfAHedUN2qFVQvTRAZ_3JYjmm6grgLkxmJI41djSeqDr2MyDdAHhII-R3Qexn-lsnmuMiKX5eWSyk519dXS6H8TfqsQh0HLCQpoX5cJPW-roSI1eY-XC_vsgfw/s320/IMG_20200303_130958.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><br />Capilla de la Virgen de los Dolores en San Pedro y San Pablo (Darro).<br />A la derecha, se puede ver una bandera con el aspa de San Andrés con el año de 1945.</td></tr></tbody></table><p><br /></p><p>Los orígenes de la cofradía se remontan a 1937, en el antiguo Palacio de los Tello (en el recientemente desaparecido restaurante <i>El Ventorrillo</i>: Paseo del Violón, Granada), que tenía una capilla con una imagen de la Virgen de los Dolores, y que fue empleada por el Tercio como cuartel general desde sus orígenes. Ahí, el Viernes Santo de 1937, el entonces Comandante de Caballería Manuel Rubio Moscoso hizo el voto en nombre del Tercio Isabel la Católica de crear una cofradía dedicada a la Virgen de los Dolores, el cual se hizo efectivo en 1940, acabada la Guerra, en la que el Cardenal Agustín Parrado dio su aprobación a los estatutos de la Cofradía. En 1960, ante la decisión de los propietarios, los Gómez de Cortinas, de emplear la imagen para culto interno, se encargó una nueva imagen al imaginero andaluz Aurelio López Azaustre (1925-1988), mientras que la cofradía empleaba una imagen provisional de la Virgen de los Dolores de la iglesia de San Antón. La nueva imagen de la Virgen de los Dolores fue terminada y bendecida en la iglesia de Santa María Magdalena (aún sede de la Hermandad) en 1961.</p><p>La exposición se articula en torno a un pequeño recorrido formado por dos de los patios del Convento que comunican entre sí, y una pequeña sala que comunica con la entrada del convento, dando lugar a un recorrido circular en el que el visitante acaba la visita en el mismo sitio por el que ha entrado. Nada más entrar, nos encontramos con un pequeño puesto de venta de productos de la Cofradía regentado por una hermana de la misma, quién sirve como primer contacto del visitante con la exposición. El primero de los patios (que tiene una preciosa escultura en piedra de la Virgen del Carmen en el centro), al que se accede por el lateral derecho de la entrada, está destinado a hacer una breve historia de la devoción a la Virgen de los Dolores en Granada antes del establecimiento de la Real Cofradía de la Virgen de los Dolores en 1940. El segundo patio está destinado a la cofradía per se, y, especialmente al evento que constituye el núcleo de la exposición: la talla en 1961 de la imagen actual de la Virgen de los Dolores por Aurelio López Azaustre. La última sala complementa la colección de este segundo patio.</p><p><br /></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgQMLZlArqiVx2kfdN26-gU1BGnZbw1JxSoq5z54EkNfoUSAPah4NSisKD-GV4itUyH10VsD2AYSLbTbSH7ExKXCMyQkwWyYGVB5-vJSNu4eSGynD5eGxXbx9o490DqTVyRqTD4nqM8ajQ/s2048/IMG_20210314_161020.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1536" data-original-width="2048" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgQMLZlArqiVx2kfdN26-gU1BGnZbw1JxSoq5z54EkNfoUSAPah4NSisKD-GV4itUyH10VsD2AYSLbTbSH7ExKXCMyQkwWyYGVB5-vJSNu4eSGynD5eGxXbx9o490DqTVyRqTD4nqM8ajQ/s320/IMG_20210314_161020.jpg" width="320" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj1QYgXNnDuSPNzzW13Lpa5PwmlzK488a0eRxDZdAFqHD9qTJNljjGYqNhr1q4bEcdTnBuO959wmsJcOuxJGsg4RJqnqTsGaWGPaMHWy0RbmH9fYlS1hcHV9pPZ6TwHeNubLichqnHZvHs/s2048/IMG_20210314_162005.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1536" data-original-width="2048" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj1QYgXNnDuSPNzzW13Lpa5PwmlzK488a0eRxDZdAFqHD9qTJNljjGYqNhr1q4bEcdTnBuO959wmsJcOuxJGsg4RJqnqTsGaWGPaMHWy0RbmH9fYlS1hcHV9pPZ6TwHeNubLichqnHZvHs/s320/IMG_20210314_162005.jpg" width="320" /></a></div><br /><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg5uJWyiSoawVzHIPdtAmuygfk8TeiG_J8KmPeaJ8umD9rE0IA_Ud3eiFcpzsZ25QsQpIj8q6OAIPBk66HBMnp3WMlbX1eTcmaT3J2pNFlSHw2iCQsX_iKJU93fhFtx-139eWYlvWIwCLM/s2048/IMG_20210314_162254.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1536" data-original-width="2048" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg5uJWyiSoawVzHIPdtAmuygfk8TeiG_J8KmPeaJ8umD9rE0IA_Ud3eiFcpzsZ25QsQpIj8q6OAIPBk66HBMnp3WMlbX1eTcmaT3J2pNFlSHw2iCQsX_iKJU93fhFtx-139eWYlvWIwCLM/s320/IMG_20210314_162254.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"> </td></tr></tbody></table><br />El material de la exposición incluye una amplia variedad de objetos fundamentalmente religiosos, que van desde medallas, pequeñas imágenes de la Virgen de los Dolores a cuadros, pasando por objetos litúrgicos y ceremoniales procedentes de la Cofradía, como un traje de penitente u algunos vestidos y atavios de la Virgen, así como fotografías y recortes de periódicos que sirven para poner en escena al visitante y adentrarlo en la historia de la cofradía y de su imagen titular.<p></p><p>En el primer patio, nos encontramos con diversos materiales que sirven a la exposición para crear un ambiente que evoca la importancia de la devoción de la Virgen de los Dolores en Granada antes de 1940. Encontramos cuadros, medallones de madera e imágenes del siglo XVI en adelante. Cabe destacar unos retablos pertenecientes a antiguos altares, con las oraciones que leía el sacerdote en latín y nos evocan el ceremonial de la misa antes del Vaticano II y el Posconcilio.</p><p>En el segundo patio, que forma un contenido temático con la última sala, nos adentramos más a fondo en lo que es la propia Cofradía, con múltiples aspectos que nos remontan a la historia de la Real Cofradía desde su fundación en 1940 hasta casi nuestros días, y que incluye objetos litúrgicos, como recortes de periódicos, fotografías o diplomas. Entre los más importantes cabe destacar la bandera blanca detrás del manto de la Virgen que ocupa el lugar central del patio, y en el que se lee: "COFRADIA N(uestra) SEÑORA DE LOS DOLORES", "TERCIO DE ISABEL LA CATÓLICA" y "AÑO DE 1940", con el escudo de la Cofradía, las fotografías y recortes de periódicos en torno a la talla y bendición de la Virgen en 1961, un ¿exvoto? que hace referencia a esto, y las cruces militares y la faja de general concedidas a la Virgen de los Dolores y los diplomas que lo atestiguan y con fecha en 2014 y 2015 respectivamente.</p><p><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjSxcI1Ja4VGyUsKrQ7sD6A7oybbVOEduJ8rWhcrv5_l3Y1qBAdGVbhT4iocb8bUkbGsmBwo2FrsP3F8_J1v2VMuLyqGEP6iLd_5qRayL7HFPde7Sq4kNNQNBDJ1KTs8tKsqzbH6N17AA4/s2048/IMG_20210314_161453.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjSxcI1Ja4VGyUsKrQ7sD6A7oybbVOEduJ8rWhcrv5_l3Y1qBAdGVbhT4iocb8bUkbGsmBwo2FrsP3F8_J1v2VMuLyqGEP6iLd_5qRayL7HFPde7Sq4kNNQNBDJ1KTs8tKsqzbH6N17AA4/s320/IMG_20210314_161453.jpg" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">¿Exvoto? que deja de la constancia de la creación de la imagen de la Virgen de los Dolores por el imaginero Aurelio López Azaustre y su bendición en la iglesia de Santa María Magdalena en 1961.</td></tr></tbody></table><p></p><p><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgJjkR-lx_JyuJQXAiPofXQdS2nc9h1qhg5PwXMDC4u714v6iGxGd81_xf_GE2tlh2JtUxYoGzO6tVbolSF9FId8GNMIkHr_Kd8F821W_x-LMPCtjfT2PBvEAl6auKIhWEN_dkT6ignpTM/s2048/IMG_20210314_161531.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="1536" data-original-width="2048" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgJjkR-lx_JyuJQXAiPofXQdS2nc9h1qhg5PwXMDC4u714v6iGxGd81_xf_GE2tlh2JtUxYoGzO6tVbolSF9FId8GNMIkHr_Kd8F821W_x-LMPCtjfT2PBvEAl6auKIhWEN_dkT6ignpTM/s320/IMG_20210314_161531.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Faja de General (2014) y Cruces Militares (2015) concedidas a la Virgen de los Dolores.</td></tr></tbody></table><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: left;"><div class="separator" style="clear: both;">El interés, sin embargo, que ofrece esta exposición radica en la alta simbología tradicionalista de la Real Cofradía de la Virgen de los Dolores, así como en la gran cantidad de objetos litúrgicos de esta cofradía que tienen simbología propia del Requeté y la Comunión Tradicionalista.</div><div class="separator" style="clear: both;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both;">Ya hemos mencionado brevemente la bandera, sin embargo, también nos podemos encontrar en la exposición una bandera rojigualda con el Sagrado Corazón de Jesús y el Inmaculado Corazón de María bordados, y una gran cantidad de símbolos del Requeté en los objetos litúrgicos de la Cofradía. Ya hemos mencionado a la bandera, con el escudo de la cofradía compuesta por el aspa de Borgoña bajo tres clavos -a los que posteriormente se añadiría una corona real y una corona de laurel entregada por la Hermandad de ex-combatientes del Requeté-, aunque no deja de llamar la atención este escudo con el aspa de Borgoña en un traje de penitente, así como no pocos objetos litúrgicos con el águila bicéfala y la cruz de Borgoña sobre fondo blanco de la Comunión Tradicionalista en no pocos objetos litúrgicos.<div class="separator" style="clear: both;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjaiHGt0TXA6ECUaCpZoYGpjNg5tBASEEcf0I6T60AQ6RiUIghreQpdhk_Fv30huk8Z-ES6iC9RSpgo6KanAr6vSTdy1PD-HS0Vt9L7R8PeObEsSpCMphipslHaEe4fEjDMzpYkVnBOQQk/s2048/IMG_20210314_161837.jpg" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjaiHGt0TXA6ECUaCpZoYGpjNg5tBASEEcf0I6T60AQ6RiUIghreQpdhk_Fv30huk8Z-ES6iC9RSpgo6KanAr6vSTdy1PD-HS0Vt9L7R8PeObEsSpCMphipslHaEe4fEjDMzpYkVnBOQQk/s320/IMG_20210314_161837.jpg" /></a><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhWPs4QNg68jGqT_Pm0hUESuoQ0CU_i3Cn-N68mN7Rql3HN8phmEhJEyniFag73dLxAqHyJFiUL4Wh5ZI1_g7kcgi4ouhYnLY4aWbdTw9XUAgD9dd4Zjq-poynRZcnqcd79_tV3DF6R51c/s2048/IMG_20210314_161411.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhWPs4QNg68jGqT_Pm0hUESuoQ0CU_i3Cn-N68mN7Rql3HN8phmEhJEyniFag73dLxAqHyJFiUL4Wh5ZI1_g7kcgi4ouhYnLY4aWbdTw9XUAgD9dd4Zjq-poynRZcnqcd79_tV3DF6R51c/s320/IMG_20210314_161411.jpg" /></a></div><div class="separator" style="clear: both;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhDOCUZDU2IPb25dk809NAYI_HnwP-Q58Up7syBamejgoF3uqzeByqYx_Rt5EIwVhaPrWfy6PEk1vKrLRxlx28ogiKJfoCX3JtfsENVfNFEpRGpmjfPhc3hG7h2h6KlB7OgK13LaczTmBo/s2048/IMG_20210314_161653.jpg" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhDOCUZDU2IPb25dk809NAYI_HnwP-Q58Up7syBamejgoF3uqzeByqYx_Rt5EIwVhaPrWfy6PEk1vKrLRxlx28ogiKJfoCX3JtfsENVfNFEpRGpmjfPhc3hG7h2h6KlB7OgK13LaczTmBo/s320/IMG_20210314_161653.jpg" /></a><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi86utcJ_8mjNiTnerGZmdNR3o4X4ljdx0NuMi0mTthPHZ-0ZT2R5tXl5Q5pY1dVMvPQFSukLePzB-R9FathHB7mURXsKzLya36bgMFSOznWGZhygwkFXBVpL2PMWhtBS53_wslWJIK1II/s2048/IMG_20210314_161804.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi86utcJ_8mjNiTnerGZmdNR3o4X4ljdx0NuMi0mTthPHZ-0ZT2R5tXl5Q5pY1dVMvPQFSukLePzB-R9FathHB7mURXsKzLya36bgMFSOznWGZhygwkFXBVpL2PMWhtBS53_wslWJIK1II/s320/IMG_20210314_161804.jpg" /></a></div><div class="separator" style="clear: both;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both;"><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhNqr_ho2fCfeiko71eQqj4vneD3wHMJCdvqaTzG3IjLbqyEVpIom1XMpb06xBV_lyg299up8HQTBsoWCo_vrF56XBJrlHLdCfdzqvotKvXg9bjqRu-1JJJhunwpBIuNvfhgJCOa7_XUZw/s2048/IMG_20210314_162225.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1536" data-original-width="2048" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhNqr_ho2fCfeiko71eQqj4vneD3wHMJCdvqaTzG3IjLbqyEVpIom1XMpb06xBV_lyg299up8HQTBsoWCo_vrF56XBJrlHLdCfdzqvotKvXg9bjqRu-1JJJhunwpBIuNvfhgJCOa7_XUZw/s320/IMG_20210314_162225.jpg" width="320" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><br />La Real Cofradía de la Virgen de los Dolores fue famosa por hacer alarde durante la Posguerra de una gran cantidad de simbología tradicionalista, provocando una gran tensión con la Falange y algún que otro importante conflicto.<br /><br /></td></tr></tbody></table></div><div class="separator" style="clear: both;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both;">Este hecho nos debe llevar a esta reflexión final, y es que a pesar de los intentos de la cultura oficial de ningunear al carlismo como una mera anécdota o partido político fracasado, o un movimiento con poca presencia práctica en Granada (así lo define el "Mapa de la Memoria Histórica de Granada", portavoz del nuevo relato histórico oficial sobre esta época), la influencia del carlismo en la cultura popular española no ha sido nulo.</div><div class="separator" style="clear: both;"><br /></div><div class="separator" style="clear: both;"><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh2lgHF9VeV0aFwO6KJt1uDRwXYNj24xfVjS2U_MvDf5s0Yl7pWFyKSfIXN53-spj5tPCKgga98syqWfEdkqtkisUfCcIIzTgKhL71qBblXF2Sz4l74RrVjVuNNGxYJvJXO4OCkAVvS2vI/s2048/IMG_20210314_162317.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh2lgHF9VeV0aFwO6KJt1uDRwXYNj24xfVjS2U_MvDf5s0Yl7pWFyKSfIXN53-spj5tPCKgga98syqWfEdkqtkisUfCcIIzTgKhL71qBblXF2Sz4l74RrVjVuNNGxYJvJXO4OCkAVvS2vI/s320/IMG_20210314_162317.jpg" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><br />Esta última foto la pongo como curiosidad: un aspa de Borgoña bajo el escudo del Convento de la Encarnación. Esta bandera pertenece al Convento, no a la exposición, sin embargo no he podido averiguar más del motivo por el que se ha puesto la Cruz de San Andrés bajo el escudo del Convento.</td></tr></tbody></table><span style="font-size: x-small;"><br /></span></div><div class="separator" style="clear: both;"><p>Para acabar, quiero animar a todos los tradicionalistas y simpatizantes que vivan en Granada o en la zona próxima y puedan desplazarse a Granada aprovechen para dirigirse al Realejo y visitar la exposición (repetimos: todas las tardes de 16:00 a 18:00 hasta el 4 de abril, salvo los días del Triduo a la Virgen de los Dolores y el Lunes Santo). A fin de cuentas, es gratuita (salvo lo que deseen dejar de donativo) y se ve en un momento, además de ser altamente recomendable.</p><p><br /></p><p>Enlaces externos (para obtener información actualizada):</p><p>Real Cofradía de Nuestra Señora de los Dolores - Granada (Facebook): <a href="https://www.facebook.com/virgendelosdoloresgranada">Real Cofradía Ntra. Sra. de los Dolores (Granada)</a></p><p>Museo Carmelitas Granada (Facebook): <a href="https://www.facebook.com/MuseoCarmelitasGranada/">Museo Carmelitas Granada</a></p></div></div></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><p>Fuentes: </p><p>RFHCSSG (s.f.). <i>Real Federación de Hermandades y Cofradías de Semana Santa de la Ciudad de Granada</i>. Real Cofradía de la Virgen de los Dolores. URL: https://www.hermandadesdegranada.com/real-cofradia-de-nuestra-senora-de-los-dolores/</p><p>Real Cofradía de la Virgen de los Dolores (2021). <i>LAETARE. La memoria de la madera. 60 años. Los Dolores de la gubia de Azaustre</i> (folleto).</p><p>Museo Carmelitas (s.d.). <i>Museo Carmelitas</i> (folleto).</p>Carolus Vhttp://www.blogger.com/profile/02537979792215294843noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-44750403342279171682021-03-06T23:26:00.026+01:002021-03-08T17:33:36.210+01:00Celebración por los mártires de la Tradición en GranadaComo cada año por estas fechas, hoy hemos celebrado dignamente en Granada la festividad de los mártires de la Tradición, instituida por S. M. Carlos VII (q.s.g.h.) para honrar la memoria de todos los que dedicaron y entregaron sus vidas por la Santa Causa de la Tradición española.<div><br /></div><div>Tras la comida en buena compañía de nuestro capellán, Rvdo. D. Javier Utrilla (<a href="https://www.fsspx.es/es" target="_blank">FSSPX</a>), nos acercamos al cementerio San José de nuestra ciudad, donde yacen los restos mortales de destacados carlistas granadinos y de otros muchos desconocidos. Allí rezamos por el descanso eterno de todos ellos, así como por cuantos españoles dieron sus vidas por Dios y por la Patria.</div><div><br /></div><div>Frente a la hermosa sepultura del General de Brigada <a href="https://reinodegranada.blogspot.com/2018/09/el-brigadier-carlista-granadino-manuel.html" target="_blank">Manuel Fernández de Prada</a>, el presidente del Círculo Tradicionalista de Granada, Rodrigo Bueno, leyó la biografía de este militar ejemplar, así como el siguiente <a href="http://www.bibliotecavirtualdeandalucia.es/catalogo/es/catalogo_imagenes/grupo.cmd?path=57872&interno=S&presentacion=pagina&posicion=2" target="_blank">texto</a> del periodista <a href="https://reinodegranada.blogspot.com/2013/11/el-periodista-francisco-guerrero-vilchez.html" target="_blank">Francisco Guerrero Vílchez</a>, fundador del periódico tradicionalista granadino <i><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/La_Verdad_(Granada)" target="_blank">La Verdad</a></i>: </div><div><br /></div><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><div><div><b><i>Gloria a los Mártires de la Tradición </i></b></div></div><div><div><i><br /></i></div></div><div><div><i>Gloria a su fundador, que con la caridad que le caracterizaba instituyó la fiesta solemne del 10 de Marzo, para perpetuar el recuerdo de aquellos sublimes soldados de la Tradición que sufrieron por su Dios, por su Patria y por su Rey. </i></div></div><div><div><i><br /></i></div></div><div><div><i>Para esta fiesta, notables escritores y nobilísimos corazones han escrito y sentido el martirio de la causa de la Religión Católica y el derecho de la Legitimidad desterrada. </i></div></div><div><div><i><br /></i></div></div><div><div><i>Hoy el más humilde de los carlistas granadinos os deposita una lágrima sobre vuestras tumbas y una oración por vuestras benditas almas. </i></div></div><div><div><i><br /></i></div></div><div><div><i>Y... otra lágrima sobre la tumba y otra oración por el alma de aquel nuestro Rey don Carlos VII, que compartió con vosotros penalidades y destierro. </i></div></div><div><div><i><br /></i></div></div><div><div><i>También suplicamos a Dios Nuestro Señor levante el velo que cubre hoy con lóbrega oscuridad a tantas almas que debieron ser carlistas y por cuya Causa debieron de hacer lo que vosotros hicisteis, en vez de permanecer en la mortal atonía de la indiferencia, ya que no les permita aún su conciencia declararse enemigos vuestros. </i></div></div><div><div><i><br /></i></div></div><div><div><i>La Causa de Dios no puede morir, y saldremos de las nuevas catacumbas cuando suene en el reloj de la Providencia la hora de grandes justicias. </i></div></div><div><div><i><br /></i></div></div><div><div><i>Nuestra fe, como la de aquellos humildes pescadores, nos salvará y regenerará la Patria. ¡Adelante, con el corazón puesto en Dios, la Patria y el Rey! </i></div></div><div><div><i><br /></i></div></div><div><div><i>¡¡Sursum... Carlistas!!</i></div></div></blockquote><div><br /></div><div>Seguidamente la piadosa margarita María Bravo depositó cuatro velas sobre la losa sepulcral, mientras se recitaban los siguientes versos: <br />
<table border="0" cellpadding="10" cellspacing="10">
<tbody><tr>
<td><div align="justify"><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Al clamor de la Patria afligida</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Raza de héroes, del polvo salid;</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Que a besar vuestra sangre vertida</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Hoy acuden los hijos del Cid.</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><br style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;" /></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif;"><span style="font-size: 16.5px;">Con la Cruz por bandera y escudo, </span></span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif;"><span style="font-size: 16.5px;">Por corona el sangriento laurel </span></span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif;"><span style="font-size: 16.5px;">Aun mostráis, en el pecho desnudo </span></span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif;"><span style="font-size: 16.5px;">La honda huella del hierro cruel.</span><br /><br /><span style="font-size: 16.5px;">Sin desmayo en la lucha homicida,</span></span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Del deber escuchando la voz,</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Ofrecisteis la sangre y la vida</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Por el Rey, por la Patria y por Dios.</span></i></div><div style="text-align: left;"><br /></div></div></td>
<td><div align="justify"><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Sobre el fúnebre mármol que os cierra</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Ruge herido el hispano león;</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Y se abate, cubriendo la tierra</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Vuestro, ayer, invencible pendón</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;"><br /></span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Hoy con paso tardío y doliente</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Vuestra tumba el guerrero al pisar</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">De su llanto, en la amarga corriente</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Sus laureles arroja quizás.</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><br style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;" /></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Vuestra sangre fecunda la Historia</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Como fuente inmortal de virtud;</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Y reciben su beso de gloria</span></i></div><div style="text-align: left;"><i><span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Las cenizas que ampara la Cruz.</span> </i></div><div style="text-align: left;"><br /></div></div></td>
</tr>
</tbody></table>Tras el canto del Oriamendi y los vítores de rigor, uno de los asistentes pronunció un sentido:</div><div><br /></div><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px;"><div style="text-align: left;"><i>¡Gloria a los mártires y a los soldados de la Tradición!</i></div></blockquote><div><br /></div><div>Después nos desplazamos hasta la tumba del <a href="https://reinodegranada.blogspot.com/search/label/General%20Carlos%20Calder%C3%B3n" target="_blank">General Carlos Calderón</a>, que da nombre a nuestro Círculo, frente a la cual se rezaron otras preces. Un sobrino tataranieto de nuestro General, el magistrado José Raúl Calderón, autor del exitoso libro <a href="https://www.libermangrupoeditorial.es/producto/proceso-a-un-inocente/" target="_blank"><i>Proceso a un inocente. ¿Fue legal el juicio a Jesús?</i> (2009)</a>, nos habló de su ilustre antepasado y de la madre de éste, D.ª Josefa Vasco, no menos entregada a la Causa tres veces santa, por lo que recibió de Carlos VII el título de Marquesa de la Caridad. También nos refirió las gestiones que se siguen haciendo para dignificar esta sepultura.</div><div><br /></div><div>Antes de marcharnos, acudimos al patio de los caídos por Dios y por la Patria, donde colocamos otra vela por el requeté <span style="background-color: white; color: #222222; font-family: "Times New Roman", Times, FreeSerif, serif; font-size: 16.5px;">Ángel Vidal Muñoz, a quien ya homenajeamos en nuestro acto en <a href="https://reinodegranada.blogspot.com/2020/07/celebracion-del-18-de-julio-en-granada.html" target="_blank">celebración del glorioso Alzamiento Nacional el pasado 18 de julio</a>.</span> En el mismo patio tuvimos ocasión de rezar asimismo por el alma del heroico Alférez de la Guardia Civil Ulpiano Bravo Sahagún, muerto en la Cruzada de Liberación, que se halla también allí enterrado y que es abuelo y bisabuelo, respectivamente, de dos miembros de nuestro Círculo Tradicionalista.</div><div><br /></div><div>A las 7 de la tarde se celebró en la <a href="https://www.google.com/maps/place/Capilla+de+Mar%C3%ADa+Reina/@37.1566175,-3.5969478,15z/data=!4m5!3m4!1s0x0:0x57959fd4813f9004!8m2!3d37.1566175!4d-3.5969478" target="_blank">capilla María Reina</a> la santa misa tridentina en sufragio por los mártires de la Tradición, con la que dimos por concluida esta jornada en merecida memoria de nuestros muertos. El sermón de D. Javier Utrilla puede escucharse en el siguiente <a href="https://www.youtube.com/watch?v=nrfH4dAXhuk" target="_blank">enlace</a>:</div><div><br /></div><div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><iframe allowfullscreen="" class="BLOG_video_class" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/nrfH4dAXhuk" width="320" youtube-src-id="nrfH4dAXhuk"></iframe></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div></div><div><br /></div><div><b>Imágenes del acto:</b></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjjhwav5EsDsSnUj9D10xc9SwjCsPwsAPRqUV26abXE3QykwSCbQxaWG5iB3ahBElSoR_uFsra4Y1uU0yrBgf98h7d_7CdtZg1PFvkbGA31UJMP3_s-aENDGT4he7YDIns8d6n2cTf4YjA/s1280/WhatsApp+Image+2021-03-05+at+10.32.36+%25281%2529.jpeg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="1280" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjjhwav5EsDsSnUj9D10xc9SwjCsPwsAPRqUV26abXE3QykwSCbQxaWG5iB3ahBElSoR_uFsra4Y1uU0yrBgf98h7d_7CdtZg1PFvkbGA31UJMP3_s-aENDGT4he7YDIns8d6n2cTf4YjA/s320/WhatsApp+Image+2021-03-05+at+10.32.36+%25281%2529.jpeg" width="320" /></a></div><div><br /></div><div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhC8An-UDyhHLc_IdGcXOV6RvaFGUVCjqO4CaSqkatAQygsfFBbQgDwTm764U2AuA3Ha2xnb_EeuKJEOgrFCIwpUO64ZHgYhoCVXVbKgh7IawDe2wC4gLQYWMblledzmamAbw7rjQjsNNI/s2000/WhatsApp+Image+2021-03-06+at+22.11.21.jpeg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1125" data-original-width="2000" height="181" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhC8An-UDyhHLc_IdGcXOV6RvaFGUVCjqO4CaSqkatAQygsfFBbQgDwTm764U2AuA3Ha2xnb_EeuKJEOgrFCIwpUO64ZHgYhoCVXVbKgh7IawDe2wC4gLQYWMblledzmamAbw7rjQjsNNI/w320-h181/WhatsApp+Image+2021-03-06+at+22.11.21.jpeg" width="320" /></a></div></div><div><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhzHoBGzAjK-RYz3FkwBKYiL4Fd_gUcSW0-dmVYOC7mpl5_l3XDW2SWfoczdRpen11Rsh4H5Mpuyil7TXW-oaGNAIQbB8mtGtlUUGZzQvZSx7vKxwDRtT4tamJWPQgm_ZRK21LDCEEtwJw/s2048/WhatsApp+Image+2021-03-06+at+22.36.53+%25281%2529.jpeg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="2048" data-original-width="1536" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhzHoBGzAjK-RYz3FkwBKYiL4Fd_gUcSW0-dmVYOC7mpl5_l3XDW2SWfoczdRpen11Rsh4H5Mpuyil7TXW-oaGNAIQbB8mtGtlUUGZzQvZSx7vKxwDRtT4tamJWPQgm_ZRK21LDCEEtwJw/s320/WhatsApp+Image+2021-03-06+at+22.36.53+%25281%2529.jpeg" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgotNBPVY5cQBM-GI2ya-TejiZm2BT-LS24KrwSWQYn9jdgd_eoDLjHubGcpT8HQrDEEYi4dON5PhnRgos3nk7fv4Y-YNpTVV6y2xMohpOPgo7VZV5EEJabhbZBQ6LOo69Fvj0CBdDe1GY/s2048/WhatsApp+Image+2021-03-06+at+22.08.59.jpeg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1152" data-original-width="2048" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgotNBPVY5cQBM-GI2ya-TejiZm2BT-LS24KrwSWQYn9jdgd_eoDLjHubGcpT8HQrDEEYi4dON5PhnRgos3nk7fv4Y-YNpTVV6y2xMohpOPgo7VZV5EEJabhbZBQ6LOo69Fvj0CBdDe1GY/s320/WhatsApp+Image+2021-03-06+at+22.08.59.jpeg" width="320" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgVVd4KRkzqxzPMeZSmYSUQQeHhU5u7cJkvbu6hKtazIxkpRo_7rCp-W7utPMJLkm5IB47rhtHycAWjipPhQPYmfnR3Kmq280A5o-znYlaTmqE0KIGx_pIQzXaV_W20fBsbMK9oRhaXgms/s2000/WhatsApp+Image+2021-03-06+at+22.09.36.jpeg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1125" data-original-width="2000" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgVVd4KRkzqxzPMeZSmYSUQQeHhU5u7cJkvbu6hKtazIxkpRo_7rCp-W7utPMJLkm5IB47rhtHycAWjipPhQPYmfnR3Kmq280A5o-znYlaTmqE0KIGx_pIQzXaV_W20fBsbMK9oRhaXgms/s320/WhatsApp+Image+2021-03-06+at+22.09.36.jpeg" width="320" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div></div>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-21651349436798451832021-01-20T09:48:00.003+01:002021-01-20T10:01:12.518+01:00Valores tradicionales: Crónica de una saga de maestros<p><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi6oVYsQqrGZAG2njMGXNVV9Pp_M1NBZtEOw8yLiJmW172-WKLo3UCS3QnxHyDJCPhn7bMr1qDIUwGGWkb21z2aZY3qFXjab8QqBjxsSizuxuRAz7t0Myr6mtD13YRyAd4CpKGpzrS1bcY/" style="clear: right; display: inline; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em; text-align: center;"><img alt="" data-original-height="2048" data-original-width="1365" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi6oVYsQqrGZAG2njMGXNVV9Pp_M1NBZtEOw8yLiJmW172-WKLo3UCS3QnxHyDJCPhn7bMr1qDIUwGGWkb21z2aZY3qFXjab8QqBjxsSizuxuRAz7t0Myr6mtD13YRyAd4CpKGpzrS1bcY/" width="160" /></a></p><p>Hemos recibido el interesante libro «<a href="https://www.amazon.es/Valores-tradicionales-Cr%C3%B3nica-saga-maestros-ebook/dp/B08HR8G91F" target="_blank">Valores tradicionales: Crónica de una saga de maestros</a>» (Penguin Random House, 2020, 449 págs.), por Carlos Font Guerrero, recientemente a la venta en papel y en formato digital. Su autor, maestro jubilado, ha tenido la amabilidad de regalarnos dos ejemplares, uno de ellos para uso y disfrute de los integrantes del Círculo Tradicionalista de Granada «General Carlos Calderón». </p><p>Aunque su título no permita intuirlo, buena parte de la obra se dedica a narrar con todo detalle y en más de cien páginas (del capítulo 20 al 35) las andanzas carlistas del cordobés de nacimiento y granadino de adopción <a href="http://reinodegranada.blogspot.com/search/label/Carlos%20Cruz%20Rodr%C3%ADguez" target="_blank">Carlos Cruz Rodríguez</a>, bisabuelo del autor. Y lo hace de forma en parte novelada, pero bien documentada, con muchos textos originales y un rigor histórico que suele echarse en falta en no pocos historiadores que tocan el tema de la <a href="http://carlismo.es" target="_blank">Santa Causa</a>. Estas páginas darían perfectamente para un libro aparte, pero Carlos Font ha estimado oportuno incluirlas junto con la historia de sus otros ascendientes, íntimamente ligada a la de España y sus guerras intestinas, desde la de 1833-1840 hasta la de 1936-1939. </p><p>A través de los textos que dejó escritos –y que se reproducen en el libro–, Font ha podido recrear la actuación política y militar de su bisabuelo, que es la parte que más nos interesa. Carlos Cruz estudiaba magisterio en Granada cuando sobrevino a España la desastrosa revolución de Septiembre de 1868, cuyos excesos permitieron el resurgir del carlismo. Él mismo cuenta cómo constituyó la Junta carlista de Belicena y cómo en 1872 colaboró al triunfo de la candidatura como diputado a Cortes por Santa Fe de su correligionario y amigo <a href="http://reinodegranada.blogspot.com/search/label/General%20Carlos%20Calder%C3%B3n" target="_blank">Carlos Calderón y Vasco</a>, de quien tanto hemos hablado en otras ocasiones. Al igual que Calderón, Cruz tomó parte poco después en la tercera guerra carlista; en 1873 acaudilló incluso una de las tres <a href="http://reinodegranada.blogspot.com/2016/01/la-tercera-guerra-carlista-en-el-reino.html" target="_blank">partidas carlistas que se alzaron en la provincia de Granada</a> y, tras esta peripecia tan poco conocida, marchó al Norte, combatiendo a las órdenes del General Ollo y padeciendo después la emigración. </p><p>La lectura de este libro, especialmente de los fragmentos autobiográficos de Carlos Cruz Rodríguez, nos ha recordado mucho a otro titulado «Recuerdos de un carlista andaluz (un cruzado de la causa)» (1982) sobre los hechos no menos heroicos en esa misma guerra del alcalaíno Rufino Peinado, a cuyos descendientes tuvimos también ocasión de conocer hace cosa de año y medio. </p><p>Como única nota negativa –sin desmerecer por ello el conjunto– hemos de advertir que en su epílogo Font hace un alegato en favor de la democracia liberal y pinta las guerras carlistas y la Cruzada de Liberación (que él no llama así, evidentemente) como luchas fratricidas causantes del retraso de España. Pero este análisis, que está en plena consonancia con la historiografía oficial, se olvida de Napoleón, de Bolívar, de Riego, de la acción de las logias masónicas, de las matanzas de frailes, de las desamortizaciones, de las quemas de iglesias, de los incesantes pronunciamientos liberales, de los cantonalistas, de los filibusteros, de los yankees, de Abd el-Krim, de la Semana Trágica, del terrorismo anarquista, de las huelgas violentas, de los separatismos, de la injerencia de Stalin en nuestra patria y de un largo etcétera en que nada tuvo que ver el carlismo, salvo por el hecho de querer poner remedio a todo ello. </p><p>Y es que los carlistas, que amamos profundamente a España, la hemos deseado ver en todo momento próspera y en paz, alejada de las convulsiones que a la larga acarrea siempre el sistema demoliberal, pues éste, al negar la autoridad de Dios sobre la sociedad entera, elimina todo principio de orden y autoridad. Y aunque las nuevas pedagogías no incidan en ello, las consecuencias de esta pérdida de autoridad las sienten como nadie los maestros. </p>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5544758654553708765.post-35663391690373995142020-11-20T18:31:00.000+01:002020-11-20T18:31:09.606+01:00El alpujarreño General Arévalo, al servicio del Altar y del Trono en cuatro guerrasLos lectores asiduos de nuestro cuaderno de bitácora habrán sin duda leído acerca del <a href="http://reinodegranada.blogspot.com/search/label/General%20Carlos%20Calder%C3%B3n" target="_blank">General carlista granadino Carlos Calderón y Vasco</a>, del que tanto hemos hablado en otras ocasiones. Este bizarro caballero español, que da nombre al actual Círculo Tradicionalista de Granada “General Carlos Calderón”, no es, sin embargo, el único natural del reino de Granada que llegó a lo más alto del escalafón militar carlista.<br />
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En entradas anteriores hemos hablado del no menos heroico <a href="http://reinodegranada.blogspot.com/2018/09/el-brigadier-carlista-granadino-manuel.html" target="_blank">Brigadier carlista granadino Manuel Fernández de Prada, Marqués de las Torres de Orán</a> y en esta ocasión nos disponemos a escribir sobre el General fernandino y carlista José María de Arévalo, que nació tal día como hoy, un 20 de noviembre del año 1791. Este pundonoroso militar combatió por la bandera sagrada de Dios, la Patria y el Rey en nada menos que cuatro cruentas guerras civiles, que mejor cabría definir como <i>cruzadas</i>. Murió en el exilio y casi en la indigencia, pero con el consuelo de recibir, poco antes de expirar, el cariño de la Familia Real proscrita en febrero de 1869.<br />
<br />
En el mes de marzo de ese mismo año, se agolpaba la gente a una de las principales tiendas de la Puerta del Sol a contemplar con cierto sentimiento que se admiraba de encontrar dentro de sí un cuadro en ella expuesto. Representaba a un anciano moribundo en un pobre lecho de un modestísimo cuarto, y sobre el cual e inclinaban tristemente, silenciosos y visiblemente conmovidos, un apuesto joven y una elegantísima señora de la misma edad, cuyo noble porte daba claras muestras de la alteza de su cuna. El cuadro representaba la muerte del general Arévalo, visitado en aquellos supremos instantes por Don Carlos VII y su esposa, Doña Margarita.<br />
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<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhaOMWi1fHzYqlDrlvCTLTvN0_1wqlH7fIeyZ5Su5idzJdcQU-Y-j4K_sb74iHeDktul7AIii80Chyphenhyphenb255ouEiX3RttvMjFXAAryWbYufFDLFMDOpT9-q2vHGOcrUxXbUhUyXsS9waPhcQ/s1600/General+Ar%25C3%25A9valo.jpg" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="1598" data-original-width="1060" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhaOMWi1fHzYqlDrlvCTLTvN0_1wqlH7fIeyZ5Su5idzJdcQU-Y-j4K_sb74iHeDktul7AIii80Chyphenhyphenb255ouEiX3RttvMjFXAAryWbYufFDLFMDOpT9-q2vHGOcrUxXbUhUyXsS9waPhcQ/s320/General+Ar%25C3%25A9valo.jpg" width="212" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">El General Arévalo retratado en un <br />
<a href="https://auctionet.com/es/1371817-carlismo-la-corte-carlista-en-el-exilio-y-las-cortes-absolutistas-hacia-1870-album-con-199-retratos-cartes-de-visite" target="_blank">álbum de personalidades carlistas</a></td></tr>
</tbody></table>
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José María de Arévalo nació en Capileira (reino de Granada) en 1791. A los 16 años, en octubre de 1808, obtuvo la gracia de cadete en el Colegio de Caballeros Cadetes de Granada, en el que en enero del año siguiente fue promovido a subteniente, pasando destinado al Regimiento de la Alpujarra.<br />
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Luchó en la Guerra de la Independencia, enfrentándose a los franceses en 1809 en Aranjuez, Almonacid y Ocaña, hallándose en 1811 en el reconocimiento de la Silla del Moro (Granada) e interviniendo en 1812 en la acción de Vélez Rubio (Almería), en la de las alturas de San Martín de Baza (Granada) y en la defensa del castillo de Caravaca (Murcia), haciéndolo en 1813 en el sitio de Murviedro (Valencia) y en el de Tarragona. En 1812 había sido ascendido a teniente.<br />
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Destinado en 1815 al Regimiento de Ultonia, tres años después fue trasladado al de Voluntarios de Castilla, pasando poco después a la situación de retirado en Murviedro.<br />
<br />
Al producirse la revolución liberal de 1820 no se unió a ella, por lo que fue sometido a procedimiento sumarial, huyendo en 1823 y uniéndose, al mando de veinte hombres, a las fuerzas realistas del general Samper, quien le concedió el empleo de capitán y con el que intervino en la toma de Vinaroz y en los dos sitios de Valencia.<br />
<br />
El 27 de abril de 1823, durante el primer sitio de la plaza de Valencia, los constitucionales se apoderaron del convento de Corpus Christi. Hallándose el comandante Arévalo de jefe de la línea avanzada del Quarte, logró penetrar el primero en dicho convento, desalojando de él a los enemigos que lo ocupaban, después de un reñido combate que duró más de diez horas y con sólo cuarenta hombres contra más de doscientos que tenazmente lo defendían, causándole la pérdida de catorce hombres e hiriendo a veinte más. Se destacó con igual valor y bizarría en la salida que hicieron los enemigos, en número de quinientos hombres, el día 29 de abril con el fin de destruir las obras del citado Cantón, a los que rechazó al mando de sólo ciento cincuenta hombres y consiguió encerrar en la plaza, sin que lograsen su intento.<br />
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También persiguió, al mando de una columna, a la partida del llamado “sastre Francisco”, a quien derrotó cerca de Turís (Valencia), participando seguidamente en el levantamiento del sitio de Murviedro y en el sitio y rendición de la plaza de Alicante.<br />
<br />
Los años siguientes sirvió en el 1.er Regimiento de Tiradores y en el de Córdoba, solicitando en junio de 1825 la licencia ilimitada, que le fue concedida. Estando en esta situación recibió en el mes de septiembre de 1826 la Cruz de San Fernando de 2.ª clase, Laureada, en recompensa de las acciones realizadas durante el primer sitio de Valencia.<br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right; margin-left: 1em; text-align: right;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgYlv9Lr_d3Gy-hccTv_kORLQiRTi3EeKfrRvuRfGvxxenzqQ7OOls0cMd2C1DGbBDh3_LNWrpcNlkQyt2OVDYQzqgvwaQn1Cijopy_XhsbT8QYrOJRRfUie88lgq1RuAY-vtsdrhhaLd4/s1600/Jos%25C3%25A9+Mar%25C3%25ADa+de+Ar%25C3%25A9valo.png" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="525" data-original-width="308" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgYlv9Lr_d3Gy-hccTv_kORLQiRTi3EeKfrRvuRfGvxxenzqQ7OOls0cMd2C1DGbBDh3_LNWrpcNlkQyt2OVDYQzqgvwaQn1Cijopy_XhsbT8QYrOJRRfUie88lgq1RuAY-vtsdrhhaLd4/s320/Jos%25C3%25A9+Mar%25C3%25ADa+de+Ar%25C3%25A9valo.png" width="187" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">El General Arévalo retratado en la<br />
obra <i><a href="https://carlismo.es/wp-content/uploads/2019/05/b-de-artagan-bocetos-tradicionalistas.pdf" target="_blank">Bocetos tradicionalistas</a></i>.</td></tr>
</tbody></table>
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Era ya comandante de Infantería en el Ejército isabelino cuando en el año 1835 solicitó y obtuvo su licencia absoluta para presentarse a principios del siguiente mes de junio al general carlista Cabrera.<br />
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La justa fama de jefe de claro talento y vasta ilustración, sobre todo en asuntos militares, de que el señor de Arévalo llegó precedido al campo carlista dio lugar a que el caudillo tortosino le nombrara secretario suyo y e confiriese poco después la dirección de las ''Academias'' que creó en las tropas de su mando a fin de que sus subordinados adquiriesen el mayor grado posible de cultura, especialmente en lo relativo al arte de la guerra, debiéndose, por lo tanto, muy en particular a José María de Arévalo la formación de aquella distinguida y bizarra oficialidad del Ejército carlista del Centro que, tan gallardamente dirigido por el General Conde de Morella, se cubrió de gloria militar en tantos y tan sangrientos combates, lo mismo en los días de los éxitos que en los de las retiradas.<br />
<br />
La vida del jefe carlista Arévalo fue íntimamente unida a la historia de la primera guerra civil por Aragón, Valencia y Murcia; describir ésta sería preciso para detallar los servicios de aquél, porque en cuanto D. Ramón Cabrera recibió el nombramiento de Comandante General Carlista del Bajo Aragón, nombró Jefe de Estado Mayor de su División al señor de Arévalo; bástenos, pues, recordar que éste se distinguió más particularmente en las acciones de Chert, Prat de Compte, Azuara, Zurita, La Yesa, Muniesa, Alcanar, Terrer, Cantavieja, Puente de Alcance, Torrecilla, Cherta, Siete Aguas, Plá del Pau, Maella, Carboneras, Morella y, sobre todo, en Chulilla, la última victoria de los carlistas del Centro, que fue dirigida por el jefe Arévalo, cogiendo unos setecientos prisioneros al General Ortiz.<br />
<br />
Cuando el General Cabrera salió del Centro con la expedición del General Gómez Damas, dejó al señor de Arévaol de Comandante General interino del Bajo Aragón, trasmitiéndole todas sus facultades; tal era la confianza que le inspiraba su Jefe de Estado-Mayor.<br />
<br />
Al concluir la primera guerra civil era ya Mariscal de Campo carlista D. José M.ª de Arévalo, y honraba su pecho, entre otras varias condecoraciones, con la Gran Cruz de la Real y Americana Orden de Isabel la Católica y con la Cruz de primera clase de la Real y Militar Orden de San Fernando.<br />
<br />
En Francia permaneció emigrado el General carlista Arévalo hasta que en 1847 fue a Gibraltar, desde donde se trasladó a su país natal, Las Alpujarras, con el cargo de Jefe de Estado-Mayor del Teniente General carlista Gómez Damas encargado por Carlos VI de promover un levantamiento en Andalucía; pero aquel proyecto fracasó y entonces aquellos dos bravos generales carlistas hubieron de trasladarse a Inglaterra para volver más tarde a Francia, pues ambos prefirieron morir en la expatriación antes que reconocer a la Reina cuyo trono habían combatido con las armas en la mano.<br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right; margin-left: 1em; text-align: right;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgvAgpcXIciJBqN3PbGYtEDaI6dh2ajiIFbxK7VmRAJ3Mu1xP6KlCBWxBwUWKIMKvZSL1HFjBasfLJ_lSuS4kY4e6Yn0116lSlY25Avvr6Zp6CUZLy8Ia-y769-x2Bpsq43kdUnUd_QV7E/s1600/Muerte+del+General+Ar%25C3%25A9valo.jpg" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="833" data-original-width="484" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgvAgpcXIciJBqN3PbGYtEDaI6dh2ajiIFbxK7VmRAJ3Mu1xP6KlCBWxBwUWKIMKvZSL1HFjBasfLJ_lSuS4kY4e6Yn0116lSlY25Avvr6Zp6CUZLy8Ia-y769-x2Bpsq43kdUnUd_QV7E/s320/Muerte+del+General+Ar%25C3%25A9valo.jpg" width="185" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">La visita de los Reyes al General Arévalo <br />
narrada por el periódico parisino <i>L'Union</i> <br />
y traducida por <a href="http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0002494284&page=2" target="_blank"><i>La Esperanza</i> (9/2/1869)</a>.</td></tr>
</tbody></table>
<br />
Cuando fue destronada Doña Isabel, al reorganizar Don Carlos sus fuerzas, promovió a Teniente General al señor de Arévalo, y le destinó a su Consejo de París, capital en la que falleció cristianamente aquel bravo, entendido y leal veterano poco después, teniendo el consuelo de verse asistido en su última enfermedad por la augusta señora Doña Margarita de Borbón, el ''Angel de la Caridad'', como la apellidaron los enfermos y los heridos, tanto del campo liberal como del campo carlista.<br />
<br />
El insigne Aparisi y Guijarro relató así sus últimos instantes:<br />
<br />
<blockquote class="tr_bq">
<i>Casi vivía de limosna el teniente general Arévalo; ya dije que doña Margarita le consoló y él la bendijo; ahora añado que cuando D. Carlos le abrazó moribundo, el valiente guerrero se echó a llorar.</i></blockquote>
<br />
Carlos VII presidió el funeral. En cementerio del P. Lachaise, según la pía y noble costumbre de España, no se pronunció ningún discurso. Pero ninguno de los leales servidores de Carlos VII pudo contenerse, y de todos los corazones después de las preces, salió el mismo grito, que pronto levantaría ecos por doquier: «¡<i>Viva Carlos VII!</i>»<div><br /></div><div>Su fidelidad a nuestra bandera perduró en su descendencia a lo largo de generaciones. Un hijo suyo, José Arévalo Brugada, fue fusilado por los liberales en la primera guerra. Su yerno, el brigadier Antonio Santa-Pau Cardos, combatió por Carlos VII en la tercera junto a sus hijos (nietos del General Arévalo) Francisco, Antonio y José María Santa-Pau y Arévalo. Y varios nietos de este último (tataranietos del General Arévalo) lucharon en la última Cruzada: Luis Arturo y José María Angulo de Santa Pau murieron ambos por Dios y por España; y Jaime Angulo de Santa Pau se alistó al Tercio de Requetés María de Molina y sirvió después en diferentes unidades del Ejército nacional. Aquí puede verse, en una sola familia, la continuidad venerable de los principios salvadores de nuestra Patria, defendidos con la pluma y con las armas hasta en seis ocasiones, desde la guerra de Independencia hasta la Cruzada de Liberación.</div><div><br /></div><div><br /></div><div>
Fuentes: <br />
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* Isabel Sánchez, José Luis: <a href="http://dbe.rah.es/biografias/84213/jose-maria-arevalo" target="_blank">José María Arévalo en el Diccionario Biográfico Español</a>.<br />
* Barón de Artagan: José María Arévalo en <a href="https://carlismo.es/wp-content/uploads/2019/05/b-de-artagan-bocetos-tradicionalistas.pdf" target="_blank">Bocetos tradicionalistas</a> (1912), pp. 109-111.<br />
* Aparisi y Guijarro, Antonio: <a href="https://books.google.es/books?id=H7NIAQAAMAAJ&pg=PA121#v=onepage&q&f=false" target="_blank">Opúsculos, tomo IV</a>, p. 121.<br />
<br /></div>Rodrigohttp://www.blogger.com/profile/06915869867695981258noreply@blogger.com0