Tras la comida en buena compañía de nuestro capellán, Rvdo. D. Javier Utrilla (FSSPX), nos acercamos al cementerio San José de nuestra ciudad, donde yacen los restos mortales de destacados carlistas granadinos y de otros muchos desconocidos. Allí rezamos por el descanso eterno de todos ellos, así como por cuantos españoles dieron sus vidas por Dios y por la Patria.
Frente a la hermosa sepultura del General de Brigada Manuel Fernández de Prada, el presidente del Círculo Tradicionalista de Granada, Rodrigo Bueno, leyó la biografía de este militar ejemplar, así como el siguiente texto del periodista Francisco Guerrero Vílchez, fundador del periódico tradicionalista granadino La Verdad:
Gloria a los Mártires de la TradiciónGloria a su fundador, que con la caridad que le caracterizaba instituyó la fiesta solemne del 10 de Marzo, para perpetuar el recuerdo de aquellos sublimes soldados de la Tradición que sufrieron por su Dios, por su Patria y por su Rey.Para esta fiesta, notables escritores y nobilísimos corazones han escrito y sentido el martirio de la causa de la Religión Católica y el derecho de la Legitimidad desterrada.Hoy el más humilde de los carlistas granadinos os deposita una lágrima sobre vuestras tumbas y una oración por vuestras benditas almas.Y... otra lágrima sobre la tumba y otra oración por el alma de aquel nuestro Rey don Carlos VII, que compartió con vosotros penalidades y destierro.También suplicamos a Dios Nuestro Señor levante el velo que cubre hoy con lóbrega oscuridad a tantas almas que debieron ser carlistas y por cuya Causa debieron de hacer lo que vosotros hicisteis, en vez de permanecer en la mortal atonía de la indiferencia, ya que no les permita aún su conciencia declararse enemigos vuestros.La Causa de Dios no puede morir, y saldremos de las nuevas catacumbas cuando suene en el reloj de la Providencia la hora de grandes justicias.Nuestra fe, como la de aquellos humildes pescadores, nos salvará y regenerará la Patria. ¡Adelante, con el corazón puesto en Dios, la Patria y el Rey!¡¡Sursum... Carlistas!!
Seguidamente la piadosa margarita María Bravo depositó cuatro velas sobre la losa sepulcral, mientras se recitaban los siguientes versos:
Tras el canto del Oriamendi y los vítores de rigor, uno de los asistentes pronunció un sentido:
Al clamor de la Patria afligida Raza de héroes, del polvo salid; Que a besar vuestra sangre vertida Hoy acuden los hijos del Cid. Con la Cruz por bandera y escudo, Por corona el sangriento laurel Aun mostráis, en el pecho desnudo La honda huella del hierro cruel. Sin desmayo en la lucha homicida, Del deber escuchando la voz, Ofrecisteis la sangre y la vida Por el Rey, por la Patria y por Dios. |
Sobre el fúnebre mármol que os cierra Ruge herido el hispano león; Y se abate, cubriendo la tierra Vuestro, ayer, invencible pendón Hoy con paso tardío y doliente Vuestra tumba el guerrero al pisar De su llanto, en la amarga corriente Sus laureles arroja quizás. Vuestra sangre fecunda la Historia Como fuente inmortal de virtud; Y reciben su beso de gloria Las cenizas que ampara la Cruz. |
¡Gloria a los mártires y a los soldados de la Tradición!
Después nos desplazamos hasta la tumba del General Carlos Calderón, que da nombre a nuestro Círculo, frente a la cual se rezaron otras preces. Un sobrino tataranieto de nuestro General, el magistrado José Raúl Calderón, autor del exitoso libro Proceso a un inocente. ¿Fue legal el juicio a Jesús? (2009), nos habló de su ilustre antepasado y de la madre de éste, D.ª Josefa Vasco, no menos entregada a la Causa tres veces santa, por lo que recibió de Carlos VII el título de Marquesa de la Caridad. También nos refirió las gestiones que se siguen haciendo para dignificar esta sepultura.
Antes de marcharnos, acudimos al patio de los caídos por Dios y por la Patria, donde colocamos otra vela por el requeté Ángel Vidal Muñoz, a quien ya homenajeamos en nuestro acto en celebración del glorioso Alzamiento Nacional el pasado 18 de julio. En el mismo patio tuvimos ocasión de rezar asimismo por el alma del heroico Alférez de la Guardia Civil Ulpiano Bravo Sahagún, muerto en la Cruzada de Liberación, que se halla también allí enterrado y que es abuelo y bisabuelo, respectivamente, de dos miembros de nuestro Círculo Tradicionalista.
A las 7 de la tarde se celebró en la capilla María Reina la santa misa tridentina en sufragio por los mártires de la Tradición, con la que dimos por concluida esta jornada en merecida memoria de nuestros muertos. El sermón de D. Javier Utrilla puede escucharse en el siguiente enlace:
No hay comentarios:
Publicar un comentario